Una Trágica Historia De Amor

¡Qué Alivio!

Yo fui el primero en hacer guardia, luego le tocaba a mi ex. Pasó el tiempo y ya faltaban 5 minutos para que descanse.
Pero primero tenía que recoger los trozos de hot-dog que dejé cocinando en la fogata porque sentí hambre.
De pronto alguien me abrazó, pensé que era Camila que se había despertado, pero cuando giré la cabeza para poder darle un beso en los labios, me di con la sorpresa de que era mi ex, además dijo: Yo aún, te amo.
Me asusté, era cierto, ella no amaba a su novio, si no a mí.
Su cabeza se acercaba lentamente a la mía, no podía reaccionar por la impresión y susto que tuve, pero por suerte, sonó la alarma de mi celular indicando cambio de guardia.
Entré y cerré rápidamente la carpa. Sentí mucho alivio pues me tranquilicé al no escuchar más movimientos.