Arriesgarse ➳ WoongKook (+18)

Una noche

Jungkook siempre se consideró un chico completamente saludable. Un joven estudiante de diecisiete años -casi dieciocho- que tenía muy buenas cualidades a su favor: apuesto (según todas sus compañeras de curso), un poco más alto del promedio coreano, atlético, sociable y con un promedio escolar dentro de lo razonable. Era bastante popular, por lo que una o dos veces al mes recibía alguna declaración de amor de alguna estudiante de su instituto, las cuales rechazaba con tacto y amabilidad.

¿La razón? Para lo que respecta a sus amigos y compañeros, él ya está interesado en alguna mujer mayor fuera del colegio, con la cual estaba logrando buenos resultados, y a punto de llegar a cuarta base.

¿La verdadera razón? A Jungkook le interesaban los hombres, desde siempre, y nunca había besado ni se había involucrado con alguno en toda su vida.

Él tenía lo suficientemente claro de que sería complicado para él. En la sociedad en la que vivía era mejor no arriesgarse a ser valiente o auténtico en lo que se refería a sus gustos, por lo tanto ya tenía organizado un esquema de cómo serían los próximos años de su vida: terminaría el colegio, asistiría a la universidad, cada vez que alguien preguntara diría que está saliendo con alguien pero a las semanas ya habría terminado con esa persona, razón por la cual nunca podría llegar a presentarla y por último, con diploma en mano, viajaría a algún país donde pudiera ser libre.

Si, definitivamente podría cumplirlo. Tan solo debía ser cuidadoso y manejar bien los engaños. En unos años podría hacer lo que quisiera realmente.

Pero, mientras tanto, seguía siendo un chiquillo de diecisiete años que, como se dijo en un principio, era completamente saludable. Y un joven saludable tiene sus necesidades. Jungkook lo único que deseaba en ese momento era tener sexo. No importaba mucho con quien, solo quería hacerlo y ya. No quería una relación de pareja cursi y "esperar a que llegue el momento". Quería ir directamente a un home run, aunque en su caso tal vez sería una pelota fuera del campo*.

Había asistido a fiestas en los últimos meses, esencialmente organizada por alguno de sus compañeros, pero si alguien lo veía todo el mundo se enteraría en un abrir y cerrar de ojos de su orientación, por lo que no podía arriesgarse. Tampoco podía entrar a un bar por su edad y no lograba encontrar una razón creíble para pedirle una identificación falsa a alguno de sus compañeros siendo que quería ir solo y solo le faltaban pocos meses para la mayoría de edad.

Hacía tiempo estaba así, sentía que la necesidad lo estaba matando y se odiaría si tuviera que tirar sus planes a la borda y relacionarse con alguna de las chicas que lo invitaban a salir (pero con una alta probabilidad de tener que esperar varios meses), o simplemente ligar a alguna de las fáciles, aunque seguramente todos se enterarían, cosa que no desencadenaría en nada bueno. Además, no estaba seguro de si siquiera podría ponerse duro con alguna de ellas, y tratar de averiguarlo y correr el riesgo de exponerse a semejante vergüenza no lo alentaba demasiado.

Por todas esas razones fue que se decidió a registrarse en ese sitio. Podría considerarse que cayó un poco más bajo que si hubiera intentado con alguna chica de ropa interior floja, pero un sitio de citas parecía ser su única opción en ese momento. La publicidad decía "sin engaños", "jóvenes de tu misma zona", "seguro", "confiable", y lo mejor de todo: "discreción asegurada" ¡Era perfecto! Ya tan solo tendría que encontrar a alguien en esa red de desconocidos con el mismo objetivo que todos los que estaban allí y hacer un acuerdo lo suficientemente conveniente para ambos.

Hacerse un perfil no fue complicado, aunque se aseguró de crearse una dirección de email distinta a la que usualmente usaba, solo por si acaso. No pensaba poner sus verdaderos datos, así que solo especificó la zona donde vivía y se agregó un par de años a su verdadera edad. Evitó poner foto y su verdadero nombre, tan solo algunos detalles físicos y aclaró específicamente que solo estaba interesado en relacionarse con hombres, dando así por terminada la creación de su cuenta. Luego se dispuso revisar perfiles que aparecían aleatoriamente pero, o vivían más lejos, eran muy viejos o sus fotos personales (porque había gente que si plasmaba su rostro en semejante sitio, para su sorpresa) no le convencía del todo. Bien, tal vez no era del todo cierto que aceptaría acostarse con cualquiera. A fin de cuentas, iba a ser su primera vez, ser un poco exquisito no estaba mal ¿No? No creía ser el único que rondaba su edad con el mismo problema.