Esta mañana me he despertado con la fatiga de tu ausencia apoderándose de mi mente. Nada me llena, nada me duele, pues sólo tú eres la fuente de mi dolor.
Te he saludado y me has sonreído. He muerto mil veces.
Durante el breve instante en el que tus hermosos labios se curvaban hacia arriba, mi alma ha trascendido al Edén. Ha bebido de sus manantiales y ha gozado de sus frutos dulces. El aire es cálido allí, a diferencia del que corre por mi oscura habitación. Los animales viven en armonía, las plantas crecen más allá de lo imaginable y los prados, con sus suaves camas de césped esmeralda, han acariciado mi cuerpo hasta que ambos elementos eran sólo uno.
Sin embargo, tras ese instante, el vacío se ha apoderado de todo. Tus ojos se han desviado y el césped me ha asfixiado. Tu cuerpo se ha girado y el néctar del paraíso se ha tornado en veneno. Tu sonrisa se ha desvanecido y mi alma ha regresado a la torturada carne de su cuerpo.
Hoy me has dado el paraíso y me lo has arrebatado.
"No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos."- Miguel Hernández.
ESTÁS LEYENDO
Infatuación
Historia CortaDiario de un amor no correspondido. De un corazón torturado. Dedicado a todos los amantes silenciosos que habitan el mundo. Mi sufrimiento también es el vuestro, y el vuestro el mío. Queda prohibido cualquier tipo de copia.