Posesivo Rey Vampiro

Ternura

Al día siguiente, me levante de un buen ánimo. Pero comencé a sonreír por que ayer kaname se había puesto celoso, después de ver a Airó. También discutí con él, porque quería que durmiera en su habitación, pero me le negué, le dije que me quedaría en otra habitación, aunque él no quería, al final lo convencí, aunque estaba enfurruñado y se veía tan lindo, también le calque que mi bebe dormiría conmigo. El no dijo más nada y se fue, pero le dije en claro que aunque le había dado una oportunidad, que no iba a dormir con él, que se lo tenía que ganar, si quería eso. Será que horita, estará molesto, pero ni le hare caso. Después gire mi cabeza a lado, viendo a mi bebe jugando con sus deditos, por lo que sonreí, toque su cabecita con mis manos y le di un besito en la frente, el me miro a los ojos y sonrió, pensé que era la cosa más bella que tenía a lado mío y lo más importante en mi vida, después alzo sus manitos para que lo agarrara. Lo agarre y los puse en mis hombros.

Me levante de la cama, después de un rato, y nos fuimos al baño. Le quite, su pijamita, también hice lo mismo y lo metí junto conmigo. Mi bebe comenzó a llorar, sé que no le gusto que lo metiera al agua, pero sé que no estaba muy fría para él. Después de un rato dejo de llorar, y lo puso en mi pecho, el agarro mis cabellos y comenzó a jalarlos.

Nos quedamos un buen rato en el baño, jugando hasta que salimos, nos secamos y lo vestí primero, después me vestí yo. Salimos de la habitación y nos dirigimos al comedor, cuando llegue se encontraba kaname sentado, tomando una copa de vino, estaba algo serio, sé que esta así por lo de ayer, pero cuando me vio entrando cambio su expresión por una sonrisa, lo que me sorprendió.

Me senté en la silla frente de él, con mi bebe en brazos, vino una sirvienta, que me trajo la comida junto con el biberón, primero alimente al bebe hasta que acabo.

Mire a kaname que se había levantado, caminando hacia mí, y me lo que de mirando.

- Puedo cargar a mi hijo.

- Mmm... sí. Dije con duda, pero no se lo iba negar era su hijo después de todo. Se lo di en los brazos con cuidado, lo comenzó a cargar en sus hombros dándole palmaditas, para que eructara, mientras comía, los mire disimuladamente, lo cual me hizo feliz un poco ver como kaname tenía al bebe, parecía un verdadero padre, y eso me puso contento y a la vez lo vi tierno. Desvié la mirada al ver que me estaba mirando, por lo que me avergoncé.

Después de terminar de comer, nos dirigimos a la sala, ya me senté en el sofá grande y en otro que era de uno, con mi bebe en brazos, me percate se había dormido con él y eso me hizo sonreír.

- ¿porque sonríes?. Me pregunto confundido.

- Por nada. Dije desviando la mirada.

- Como que nada, hace rato hiciste lo mismo. Dijo molesto.

- Bueno, es que te veías tan tierno cargando al bebe. Dije ruborizado, la verdad me daba pena decir eso.

- ¿tierno, yo?. Dijo serio.

- Sí, es que nunca te he visto actuar así, y no me sorprendí, cuando la hacías cada vez que tenías al bebe. Dije sin titubeo.

- Mmm ya... bueno puedo ser diferente, cuando se trate de mi hijo y de ti, claro. Dijo mirándome con ternura, lo cual me sonroje.

- Ajamm... eso está bien. Dijo, desviando la mirada.

- Zero.

- Sí. Lo mire

- ¿Quieres salir conmigo, mañana? Dijo, lo que me sorprendí me estaba invitando a una cita.

- Mmm nos. Dije con nervios.

- Vamos, dique si, él bebe también vendrá con nosotros. Dijo con una sonrisa, que enamoraría a cualquiera.

- Aaa bueno, acepto. Dije en nervios, mañana saldría con kaname a una cita, eso me alegro. Se levantó del sofá, se dirigió a mi dándome al bebe con cuidado.

- Bueno, te veo mañana. Dijo.

- ¿Dónde vas, kaname?. Dije viendo que se iba.

- Tengo mucho trabajo que hacer, y estaré ocupado e algunos negocios. Dijo serio.

- Mmm ya, ok, bueno te veo mañana.

- Adiós, mi cielo. Dijo, acercándose a mí, para darme un beso, pero lo detuve, por los nervios.-¿no puedo besarte?.

- Aaa bueno, si puedes. Dije con nervios, y me dio un beso en la boca, con ternura y se fue, yo creo que estaba más rojo que un tomate, por el beso.

Después de eso, fui a visitar a Airó para ver como estaba, en eso le conté todo lo que me paso hoy, y nos pusimos a hablar tonterías después, ya me había cansado y me despedí de el con un beso en la mejilla, lleve a mi bebe a que comiera, igual que yo y nos dirigimos a la habitación. Me quede jugando con él, todo el rato, hasta que se durmió. Me dirigí al baño para bañarme, después de eso comencé a leer un libro, que había encontrado en la biblioteca de kaname, me quede leyendo hasta que no pude leer más del cansancio, deje el libro en la mesilla y me acosté al lado de mi bebe. Puse un brazo alado de su cuerpecito tapándolo con la manta y a la vez que se moviera no se cayera y me dormí.