Otra vez llegue tarde al colegio, esta es la tercera vez y en la clase de álgebra el profesor ya no me acepto, ¿para que diablos necesito álgebra si lo que quiero estudiar es derecho?
Desayuno solitario y veo a Marlene y a Lee caminando a lo lejos, parece que buscan a alguien, se miran emocionados. Me ven ahí sentado, intentando ahogar mi ansiedad, mi tristeza y la presión por salvar el semestre en comida, no soy un tipo gordo, pero, vaya que me gusta comer.
Me saludan desde lejos, y yo les respondo con un gesto sutil. Se acercan con paso acelerado, me provoca cierta gracia observarlos, parecen un par de niños pequeños a punto de capturar a su presa, un caramelo, un juguete, algo por el estilo.
-Te tenemos una sorpresa. -dice Lee sonriendo de oreja a oreja.
-¿Que cosa?
-¿Recuerdas que querías ir al concierto de John Boy? -Le hace par Marlene.
-¿Yo? Corrección. Tu querías ir al concierto de John Boy. -Respondo con comida en la boca.
-Bueno, si, pero quería que ambos fueran conmigo. Así que Lee compro los boletos para que podamos ir los 3 ¿te gusta la idea?
-Hm... Maldito riquillo. -Musito en voz baja.
-¿Que pasa? -Pregunta Marlene y su expresión cambia inmediatamente.
-No, nada. ¿Cuando es el concierto? -Pregunto fingiendo interés.
-25 de Agosto, la próxima semana. Ahora, ¿me dices que tienes?
-Discutí con mi madre ayer. -Respondo.
-¿Ya regreso? -Pregunta Lee.
-Sip. Y esta muy molesta por lo que he estado haciendo.
-Más bien, por lo que no has estado haciendo. -Completa Marlene con una risilla.
-Si, probablemente.
-¿no deberías estar en clase? -Me interroga Lee.
-Cierto, pero el de álgebra ya no me dejo pasar. Me levantó y recojo los cubiertos. -¿esto es un interrogatorio o algo por el estilo?
-Obviamente no, pero somos tus amigos. -Marlene camina hacia mi, me da un beso en la comisura de los labios y sigue hablando. -Tenemos que irnos, tenemos clase, y nosotros si entramos, nos vemos luego.
-Hasta luego. -Se despide Lee
-Con cuidado.
Estas últimas 2 semanas he pasado demasiado tiempo con ellos dos. Descubrí que Marlene es prácticamente vecina de Lee y que está totalmente obsesionada con el frío, los pingüinos y el ártico, así que, personalmente le apode Marlene "La Vecina del Ártico", la de los ojos bonitos, la de las piernas torneadas, la de los labios incandescentes...
En fin, ya he estado en casa de ambos. Lee tiene una casa enorme y muy bonita. Marlene tiene una casa normal, ni fea, ni bonita, algo tan "x" como ella. Es raro que vivan en el mismo barrio, los padres de Lee obviamente ganan más dinero que los de Marlene y mi madre juntos. Viven en un barrio de ricos, por así decirlo, y yo vivo en un barrio normal, ni bonito, ni feo, algo tan "x" como yo, y también tan "x" como Marlene.
Mis calificaciones están empeorando, estoy pensando en repetir el año, aunque como van las cosas creo que ya no será una opción. Lo de la discusión con mi madre fue mentira, en realidad, ya ni siquiera me voltea a ver desde que recibió el informe de calificaciones, solo me deja comida en el refrigerador con una nota que dice: "Cuando empieces a ser útil de nuevo, me avisas para cocinar con amor."
En cuanto a Marlene, me di cuenta que efectivamente no come mucho... Más bien... No come casi nada, se mata de hambre y no se porque, es muy delgada y aunque no es rica, tampoco es pobre como para que le falte comida a causa del dinero, he querido hablar acerca de eso con ella, pero no he tenido la oportunidad.
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Marlene, la vecina del ártico.
Short StoryEsta pequeña historia data las vivencias que se generaban poco a poco en mi imaginación y otro poco en mi vida diaria. Basado también en el desamor cotidiano. Para lo que estás a punto de leer se tomaron dos fuentes de inspiración: un corazón roto...