Acaba de despertar, el aire era frio y fresco, se notaba que había llovido esa noche, no quería levantarme de la comodidad de mi cama y de el calor que mis cobijas me proporcionaban, pero el día estaba precioso, acaba de llover y el sol se veía sin una sola nube a su alrededor, ¡Que tonta! Había dejado la ventana abierta y el agua se había metido a mi habitación, dándome una excusa más para tenerme que levantar,y así fue; me puse mis pantuflas y una bata para cubrir mi cuerpo pues sólo llevaba ropa interior.
Salí de mi cuarto y me dirigí a el piso de abajo para ir por un trapo y secar el charco de agua, sentí que me observaba alguien, así que volteó y me sorprende ver a el chico que me renta la habitación de al lado, lo sorprendo recorriendo mis piernas casi desnudas con la mirada, no negare que su forma de hacerlo me hace sentirme bien, pero aún así me ofende y le digo:
-Y, ¿Que se supone que estas mirando?
-Ah! Perdona...Nada no veía nada, sólo... No me dí cuenta que habías bajado y...me sorprende verte aquí...¡Es todo!
-Pues ¿Qué esperas para seguir tu camino?
-Perdona Minerva...Y...¡Buenos días! Por cierto.
-Buenos días Uriel.
Mis padres le habían rentado una habitación al lado de la mía hace un año y medio, lamentablemente hace casí ocho meses ambos murieron en un viaje en avión, éste tuvo complicaciones en pleno vuelo y se cayó.
Ahora yo le rento la habitación y pues vive conmigo, casi no tenemos contacto, no pasa de saludos ni de la típica pregunta: "¿Qué tal tu día?" casi no está en casa, sólo pasa a dormir, y pocas veces trae compañía, debo admitir que es muy guapo, tiene unos hermosos ojos cafés, piel morena, es más alto que yo...casi debo subirme a una banqueta para alcanzarlo, y aún así eso no basta, pero jamás lo e visto con otros ojos, no me imagino nada con él .
Se acerca al refrigerador para sacar no se que tanta cosa pero está dispuesto a hacer el desayuno...eso es raro, casi nunca cocina...¡Sabrá Dios que mosca le pico!
-Hoy yo aré el desayuno ¿Te parece? ¿Gustas desayunar conmigo?
Creo haber puesto una cara muy rara pues se había ruborizado.
-Sí...gracias...Mmmm...pues dime,¿En que te ayudo?.
-No, no, nada, yo solo lo aré tú siéntate y...no se lee un rato o algo.
Así que me senté y empecé a platicar con el.
-Mmmm...y...¿Qué me cuentas?
-Pues nada...en el trabajo me va bien al igual que en la escuela,sólo que...Ufff!!
-¿Qué? ¿Qué pasa?
-Mi padre enfermó, está muy grave, el médico dice que no le queda mucho...
En ese momento hunde la cara en sus manos y logro distinguir por el movimiento en su espalda que está llorando, me acerco a el, reúno valor y lo abrazo, se voltea y me lo devuelve fuertemente llorando en mi hombro.
Jamás creí verlo derrumbado...tan dolido, me parte el alma verlo así, pero no lo conozco...no es lastima lo que siento, siento la necesidad de...De besarlo...¿Pero que demonios es lo que estoy pensando? Apenas lo conozco...hace sólo un año y medio, del cual casi no convivimos...no es normal, es extraño, pero no puedo negar que lo siento...Aparto suavemente su cuerpo del mío y siento su respiración en mi cuello, me estremece, y su cara roza suavemente con la mía avivando mis locos pensamientos, siento la necesidad de hacerlo...pero no lo hago, ¿Qué pensará él? ¿Sentirá él lo mismo? El aleja sólo un poco su rostro, sólo nos aparta un escaso espacio de 10 centímetros y me ve a los ojos fijamente, su mirada baja a mis labios y lentamente regresa a mis ojo, se acerca...y me da un beso en la mejilla, tan lento...
-Va a estar bien...no te apures...se que estará bien, se va a recuperar.
-Gracias Minerva-suspira-¿Sabes?
tú haces que me sienta mejor...se está haciendo tarde, será mejor que haga el almuerzo
-Sí...sí, eso creo,y...gracias,que harás?
-El almuerzo...¡No te digo! Sí se ve que andas distraida-dice de forma risueña-¡Ay mujer!
-Eso...sí entendí, pero¿Qué harás de almorzar?
-Tu déjate consentir
El día paso con tanta prisa, dando paso a la hermosa noche estrellada,yo me asomaba a la ventana,admiraba la luna y el cielo profundo era algo hermoso,tocaron la puerta de mí habitación alejandome de mis pensamientos
-Hola...¿Te e despertado?
-No,no para nada ¿Todo bien?
-Si...solo que...emm...
-¿Qué?
- ¿Puedo pasar la noche contigo?
Me quede estupefactada pero accedí
-Claro...adelante
-Gracias...disculpa la...
-No es ninguna molestia...pasa...
-Gracias
Admiramos juntos la noche por un rato más, dejando qué el silencio hablara por nosotros, juntando pensamientos vacíos y palabras secretas, él, pasa su mano por mí cadera y me voltea estamos cara a cara, posa ambas manos en mí cadera y coloca las mías,en su cuello, bailamos un vals imaginario hasta la madrugada,siendo ya la una de la mañana me recuesto en mí cama y cuando él va por algunas cobijas para acostarse en él suelo, antes de qué salga le digo:
-No vallas por cobijas, ven, duerme aquí conmigo- me recorro y le hago un espacio a mí lado
-¡Oh! Gracias Minerva
Se acuesta al lado mio estamos frente a frente, me acerco a él y pongo mí cabeza en su hombro,siento su respiración en mí cuello,él,me abraza por la cintura y me acerca a él todo lo qué es posible, me besa en la mejilla suavemente, y cuando lo veo, se a quedado profundamente dormido,y así yo lo secundo, ambos quedamos sumidos en un hermoso sueño, maravilloso,lleno de poesía, luces y colores bellos, teniendo en nuestra alma una aurora boreal de sentimientos magníficos.
