"Una vez más he tenido que recoger mis pedazos
y rearmarme. Siento que cada vez que lo hago duele
menos y me hago más fuerte. Pienso incluso que de seguir
así, podría endurecerme al punto que ya no pueda romperme
más, y eso sería un alivio.
Pero, me preocupa perder la sensibilidad; temo que ya no pueda
volver a sentir, temo que ya no pueda volver a amar."