The Answer °°1er Lugar°°

Parte I

La elegante y solitaria habitación donde se encontraba aquel chico, estaba helada a causa de las inhumanas temperaturas que azotaban a aquel lugar, el frio desgarrador, que bien podría matar a cualquier desprevenido que tuviera la desdicha de rondar en las calles, para Dipper ese no era un problema pues estando dentro de su habitación estaba a salvo.

Se escuchaba el viento con brusquedad chocar en los vidrios tratando de derrumbarlos en vano era desdicha para el castaño tener el sueño ligero pues basto, tan solo con ello para que abriera sus azules ojos, encontrándose con la oscuridad de la noche.

Aquella eterna noche que alumbraba la galaxia donde vivía también conocida como "Sirux", nombre curioso pero que llenaba de gran orgullo a los pobladores y antepasados de aquella región por ser una de las más fuertes y estables del Universo, con el paso del tiempo se crearon rivalidades y enemistades con otras galaxias que deseaban ver en ruinas aquel reino lleno de gloria.

Se despojó de las cálidas sabanas para sentarse en la orilla de la cama, sintió el frio suelo erizando su piel un poco que con facilidad se fue acostumbraron; diviso un resplandor por su ventana que rápidamente capto su atención. Él había nacido con una curiosidad natural que lo había metido en diversos aprietos pero que también lo había llevado a conocer cosas increíbles que jamás creyó siquiera ver -Bethlehem...- de sus labios soltó un ligero susurro para sí mismo al ver a aquella estrella que hacía tiempo la había estado estudiando con limitada información de la biblioteca que había podido recolectar meses atrás, era obvio que no iba a lograr encontrar gran cosa en aquel polvoriento lugar que visitaba a menudo pues al estar restringida la información solo para los "Científicos" él tenía que buscar por su propia cuenta.

Conocía bien a aquellos hombres que se hacían llamar los Científicos, es más su Tío Ford era parte de ellos después de haber renunciado de ser parte de la prestigiosa línea de guerreros de los Pines y al cumplir la edad suficiente se convirtió parte de ellos, solo un montón de engreídos que creían conocer las respuestas del universo pero que en su egoísmo se las quedaban para ellos mismos, claro que esa opinión personal tenía que ser guardada, pues el castaño desde su corta edad había aprendido bien que un miembro de su "rango" tenía que acatar todo tipo de órdenes y mantener el perfil que le correspondía al provenir de una familia de guerreros de alto rango, pero por desgracia en él no habían funcionado aquellas lecciones que le habían forzado a tomar desde que apenas era un niño, ser parte de una familia cuyo apellido es reconocido por ser parte de la guardia real en altos rangos no es nada fácil, sobre todo si no cumples con las "características" dignas de todo Pines; digamos que él era diferente a lo que los demás esperaban. Con su facciones finas y cuerpo menudo había ganado diversas burlas entre los demás aspirantes a guerreros además de que era común escuchar las quejas de que él no era digno para ser un Pines pero ¡Maldita sea, él no había elegido quien ser! ¿Qué acaso no podían entender aquello? No lo mal interpreten, no detesta a su familia al contrario desde que era un niño de apenas unos 6 años después de la perdida de sus padres, unos "Investigadores" recién asignados a una investigación en la galaxia de "Ajeck"; sus tíos y su hermana gemela, Mabel, era lo único que podía llamar familia.

Desde entonces sus tíos les tenían estrictamente prohibido mencionar a los Investigadores y mucho menos pensar en ser parte de ellos, que mal que Dipper nunca escuchaba razones ya que su sueño más grande era ser parte de aquel grupo que se encargaba de investigar los misterios y maravillas ocultas del universo, locos o suicidas como los solían llamar; tal vez así era él, el solo pensar en conocer nuevas galaxias o especies nunca antes vistas lo excitaban a querer adentrarse a una aventura, una verdadera aventura, que si bien lo pensaba sonaba más como una fantasía algo infantil pero que no estaba tan lejos de la realidad.