Enamorada del rey de la pista (Kageyama Tobio)

Cap 1

Hola soy Jun Takashi. Tengo el pelo largo y negro, mis ojos son del mismo colo. Mi piel es de tez pálida.

Soy amistosa y agradable, siempre pienso en los demás antes que en mí, aunque aquello no sea bueno michas veces.

¿Enamorada? Sí pero... preferiría olvidarlo de una vez ya que no le volví a ver a esa persona. ¿Su nombre? Kageyama Tobio. Sí. ¨El rey de la cancha¨.

Él y yo somos mejores amigos de la infancia... Bueno, éramos.

El día en el que sus compañeros de equipo le abandonaron en el partido, nos peleamos por ese mismo tema.

Me levanté y me puse mi nuevo uniforme.

Me he cambiado de preparatoria y ahora voy a la de Karasuno. Lo que más me ha llamado la atención de este sitio es los rumores que he oído sobre el equipo de voleibol masculino de la preparatoria Karasuno, yo siempre he amado este deporte y me enamore de él completamente al ver jugar a Kageyama. Aunque ahora no estamos tan unidos como antes.

Bajé y me encontré con mi madre.

-Buenos días madre, ¿dónde está papá? -Pregunté extrañada.

-Buenos días- Dijo mi madre dándome mi bento y mi desayuno, una deliciosa tostada -Tu padre se ha ido por trabajo, ya sabes que está siempre ocupado- Dijo sonriéndome. Sé perfectamente que esa sonrisa es falsa.

Mi padre trabaja en una oficina y siempre la pasa allí. Sólo viene de vez en cuando. Aunque yo creo que ni siquiera pasa la mayor parte del tiempo trabajando. Sí, creo que mi padre tiene una aventura. Lo odio con toda mi alma. Mi madre seguro que se ha dado cuenta.

-No te preocupes por un fenómeno como ése y búscate a alguien mejor, ¡mira! El señor Watanabe- Dije mientras mordía mi tostada.

El señor Watanabe es nuestro vecino y amigo de la infancia de mamá, han estado juntos pero llegó el idiota de mi padre y aquí estamos. Watanabe lleva enamorado de mi madre desde el primer día que la vio, y no se ha rendido. Yo lo prefiero a él como padre.

- ¿Por qué tendría que casarme con Watanabe-kun? -Preguntó un poco cansada. Últimamente todo el rato le digo lo mismo. Aunque no con padre delante.

-Watanabe-kun es un gran chico pero estoy con tu padre y mi esposo- Dijo resaltando el mi y un poco el esposo.

-Pues lo único que le agradezco a tu marido asqueroso- Dije volviendo a hacer como mi madre. -Es que me dio la vida y dos amados padres- Dije sonriendo a mi madre. Ella también sonrió ante mi comentario.

- ¿Aceptas a tu padre por fin? -Sonaba ilusionada. Su cara de alegría se le va a quitar al decirle otra vez lo mismo.

-No- ¡Y ahí esta! Esa cara de pena. -Si no tú y el señor Watanabe- Dije y me levanté para irme - ¡Me voy! Mamá habla con Watanabe-san, verás que él sí te ama y tú a él- Y me fui.

Me puse música y lo primero que hice fue ponerme los cascos para oír a Eminem. Amo a ese tío.... aunque más a sus canciones, mi corazón es solo de Kageyama. ¡Jun, olvídate de ese chico!

No me fije y choqué con algo. O mejor dicho alguien.

- ¡Lo siento! No me fijé por donde iba y.. - Oí. Me fijé en la persona que se estaba disculpando. Era un chico de pelo naranja bajito de altura bastante adorable.

-Tranquilo no pasa nada fue mi culpa. Estaba pensando y me choqué. ¡Lo siento mucho! Esto... - Dije esperando que me diga su nombre.

-Hinata, Hinata Shōyō- Y me extendió la mano. Yo gustosa la acepté.

-Jun Takahashi- Me miró sorprendido - ¿Hinata-san? ¿Ocurre algo?- Pregunté preocupada.

- ¿Eh? Ah, no. Lo siento Jun-chan estaba en mi mundo- Y nada más decir esto se empezó a rascar la nuca sonriendo nervioso con un leve sonrojo. Me reí un poco.

-No pasa nada Hinata-san, ha sido un placer el conocerte pero me tengo que ir, no quiero llegar tarde en mi primer día, ¡adiós!- Y nada más decir eso salí corriendo a clases por si llegaba tarde.

Me pregunto si le volveré a ver. Es, definitivamente, distinto a Kageyama. Él es alto, Hinata es pequeño, él es frío y poco amistoso, Hinata lo contrario.

¿Por qué todas los días pienso que lo volveré a ver? Que podremos arreglar las cosas; dejar esos estúpidos malentendidos de lado y volver a como éramos antes. Aunque me gustaría, sé que lo imposible, imposible es.

Ojalá no lo hubiera conocido, a Ooikawa Tooru. Por su culpa, perdí la mejor y mayor oportunidad de confesar mis sentimientos.

Al llegar veía a grupos de personas ya juntas.
<<Parece que me va a costar tener amigos>> Solté un pesado suspiro.

Me di con las manos en los mofletes y me animé a mí misma. -No Jun, no puedes caer antes de pelear- Y empecé a caminar hasta adentro.

Busqué mi casillero y me puse los zapatos de allí. Dejé los del uniforme en la casilla y me fui, con el número en mi mano, a mi nueva clase.

Paré para mirar el papelito, clase 1-A.

Giré y miré el cartel, ya he llegado.

Solté un suspiro y abrí la puerta. Apreté mi falda al entrar para comerme mis nervios. - ¡Oh, tú debes ser Jun-san! Pasa, pasa. Y preséntate ante tus nuevos compañeros, por favor- Asentí con la cabeza y me puse delante de todos.

-Me llamo Jun Takahashi- Sonreí tímida mientras mis mejillas se tornaron de un color rojizo. -Encantada- Por un impulso me agarré del flequillo.