Cap. 8: Victoria Pírrica

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Minas, barricadas, alambres de espino y claymores estaban dispuestos por todo el frente del edificio de la mina. Los milicianos estaban nerviosos, seguramente sería la primera vez que luchasen. Entonces por el horizonte aparecieron los DD. Los milicianos abrieron fuego contra los preparados mercenarios, si cayeron 3 muchos fueron. Los mercenarios se movían en formación mientras los blindados los cubrían. Agarré mi M16 y disparé varias ráfagas, muchas impactaron en los mercenarios haciendo que murieran 5 o 6 hombres. Lucy, desde lo alto del edificio, abatió a varios mercenarios. Natsu y Gray dispararon RPGs contra el tanque y los BTR, pero fallaron todos, por el intenso fuego de dichos vehículos. Un obús de tanque alcanzó a una parte de las barricadas, donde estaban apostados varios milicianos. No quedaron ni los restos de esos pobres diablos.

Fisher se acercó a mí, disparando a ciegas.

-¡Snake, hay que destruir esos blindados!-

-¡Me llevaré a los chicos y lo flanquearé!-

Con una rápida llamada por codec, avisé a Natsu y a Gray de que me acompañasen, mientras Lucy los distraía. Con sigilo, nosotros 3 rodeamos al tanque. Con mucho cuidado para que el tanquista no se diera cuenta colocamos C-4s en la parte del tanque de combustible y en la parrilla trasera. Seguidamente, se los colocamos a los BTRs. Pero un mercenario nos descubrió y nos empezó a disparar. Sus compañeros oyeron los tiros y nos empezaron a disparar. Al tanque y los BTRs no les dio tiempo de reaccionar porque Gray los voló. La explosión se llevó a un par de DD. Los que nos estaban disparando dejaron de dispararnos: aprovechando la distracción, los milicianos que quedaban avanzaron contra los mercenarios. Entre nosotros y los milicianos los mercenarios fueron aniquilados en un rodeo de plomo. Fue una victoria pírrica. Por cada mercenario que matábamos, ellos mataban a 5 de los nuestros. De los 560 hombres que había en la base, quedaron menos de 200. Habíamos demostrado que podíamos vencerles, pero también hemos demostrado nuestra inexperiencia en el campo de batalla. Pero lo bueno es que, al cabrón de Cypher le dolería bastante perder unos carísimos blindados y más le iba a doler lo que vendría. 

Metal Gear Solid: BloodStoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora