-Lleva a la niña a mi oficina, y usted por favor. Alejese de el muchacho y su hija. Pena ajena da, continua trabajando hijo-Dijo y se fue.
La señora se marcho, muy molesta. Jamás le había faltado el respeto a alguien. Esta bien que trates bien a la gente, pero no siempre vas a soportar todo. Como dijo mi madre "No esperes de mi, lo que yo no recibo de ti".
Continúe mi trabajo, temía que al terminar e ir por Darcy, Steveen me corriera.
-¿Crees que me corra?-Dije mientras me cambiaba.
-¿Steveen?-Yo asenti-No, a el le agradan los niños.
-Adam, no quiero abusar, pero crees poder dejarme dormir esta noche en tu casa, en lo que consigo un apartamento.
-Puedes quedarte el tiempo que gustes-Dijo mientras caminábamos hacia la oficina de Steveen.
-Te lo agradezco mucho -Respondí y toque la puerta.
-Pase-Escuche desde adentro.
-Buenas noches.-Comente.
-Ya se término el trabajo?-Dijo viendo su reloj-Las 9:34, Darcy es un amor. Aún no entiendo por que esta en una caja.
-Larga historia-Respondió Adam.
Tome a Darcy, y Adam trajo la caja con la bolsa dentro de ella. Steveen nos dijo que nos quería temprano.
Hablamos un poco y al final salimos de ahí, ya había empezado a llover. Mi salvación, la vieja chamarra rota.
-Dime que no cubrirás a Darcy con eso-Menciono mientras caminaba rápido.
-Pues...-Si lo iba a hacer.
Adam paro de caminar, y saco de la caja, la cobija verde, y la puso encima de Darcy, sólo lo mire apenado y el soltó una carcajada.
-Harry-Menciono Adam.
-¿Que pasa?-Respondí caminando a su lado.
-¿Que paso con la mamá de Darcy?-Pregunto mientras metía sus manos en sus bolsillos.
-Pues-En verdad no me gustaba hablar de esto, traía malos recuerdos, pero Adam me a ayudado mucho.
-Si por alguna causa no quieres hablar de esto te entiendo-Dijo encogiéndose de hombros-Sigo sin entender como su madre pudo dejarla, es una niña muy linda-Termino por decir.
-Te contare en tu apartamento-Comente, no estaba listo pero lo haré.
Adam sonrió algo apenado.
Se me haría algo grosero no contarle, después de todo el ya me contó de el.
Seguimos caminando en silencio. Darcy iba profundamente dormida, es tan hermosa.
Llegamos a un gran edificio, si que era un lugar lujoso. Adam abrió la puerta y me dejo entrar primero, después entró el y camino con la recepcionista.
Luego de unos minutos me pidió que subiera con el por el ascensor. Luego de subir 16 pisos llegamos. Busco sus llaves en su bolsillo y cuando las encontró abrió la puerta, entramos y en verdad era algo muy acogedor. La sala, la cocina, se veía que le dedicaba tiempo a los arreglos y a la limpieza.
