Capítulo 1

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Otro día de trabajo y su vida pasaba aburrida y lentamente frente a sus ojos, como si los segundos, minutos, horas, días y semanas fueran a un paso realmente lento y agotador.

Necesitaba algo que lo refrescara. Nuevo trabajo, nueva novia (o novio, porque sí, él era bisexual), nuevo lugar para vivir, quizá un viaje...

No lo sabía, la verdad es que Dean no lo sabía, sólo quería renovarse de la forma que fuera, o quizá sólo refrescar su mente, mínimo.

Su vida siempre había sido así:

La familia Winchester estaba conformada por Mary y John, los padres de dos pequeños, el mayor se llamaba Dean, un rubiecito de ojos verdes que le encantaba el pie y el rock sólo por su padre, quien para él era como su inspiración para vivir a la corta edad de 9 años. El menor se llamaba Sam, el pequeñito que era sobrepasado por Dean en cuatro años. Sammy -como le dicen los otros tres Winchester- siempre estaba estudiando, quería esforzarse para hacer cosas mejores en su vida.

Dean no tenía mucho que contar, había tenido –hasta sus 26 años- una vida normal, le gustaba, pero ya comenzaba a aburrir la rutina, porque no es que quisiera pasarse toda su vida trabajando de gerente en una empresa, le aburría. Ganaba suficiente y bastante dinero trabajando, los fines de semana solía hacer trabajos como mecánico automotriz, era perfecto haciéndolo ya que un conocido -para él algo como su segundo padre- llamado Bobby Singer, tenía un taller mecánico y él le había enseñado varias cosas, incluso a veces Dean era llamado por Bobby para que le ayudara, él iba, hacía el trabajo, y Bobby le daba lo que le correspondía.

Conociendo al viejo, como luego le llamó Dean, conoció a más personas que fueron integrándose a su vida, como la esposa del Singer: Ellen, y a la hija de ésta: Jo. A Jo la conoció mucho después de conocer a Bobby, la chica pasaba en la escuela y por eso nunca la veía cuando estaba haciendo algún trabajo en el taller. Cuando finalmente la conoció Jo tenía 14 y él 20, pero a pesar de la edad, rápidamente se hizo mejor amigo de ella, pasaban los años y los chicos seguían bastante unidos, casi como hermanos.

Dean se sentó en el lugar de todos los días, su "querida" oficina, que ya empezaba a no ser tan querida. Le costó bastante llegar al puesto de gerente, y estando ahí ya casi un año haciendo lo mismo todos los días, si que le cansaba.

Pero ya llegaría el momento de un cambio.

Ya llegaría el momento de su vida en el que brillaría.

...

Castiel se sentó acompañando a su hermano mayor quien atendía a una chica, hoy no tenía clases que hacer por lo que no tenía nada mejor más que acompañar a su hermano mientras éste trabajaba.

Mientras tanto, Cassie pensaba en su vida y lo bien que la llevaba hasta sus 29 años. Ahora que se ponía a pensar, la llevaba realmente bien, sólo le faltaba un acompañante de vida...

La familia Novak estaba compuesta por Chuck –su padre-, Miguel –el hermano mayor-, luego le sigue Gabriel, y el menor de la familia: Castiel. Chuck tuvo que criar sólo a los tres revoltosos pequeños, algunas personas cuando los veían los llamaban ángeles, ¿en serio? ¡Hijos del demonio que nunca se quedaban quietos! La madre había muerto dos años después del nacimiento de Castiel, por lo que los únicos que lograron conocerla apenas fueron Miguel y Gabriel, pero preferían no referirse al tema, ellos y Chuck lo mantuvieron guardado en su mente y corazón incluso para el pequeño Cassie.

Ahora, su vida ha sido de mucho estudio, estudio que él mismo quiso hacer. Luego de salir de la escuela, logró entrar con una beca completa a Stanford, ahí estudió pedagogía en biología, amaba eso, no tenía un por qué, sólo... amaba La Tierra y sus seres en total, como también le gustaba enseñar y tratar con demás.

Al Final Del Camino//Destiel AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora