Capítulo 11

57 8 0
                                    

-No podes invadir su espacio personal de esa manera- JB recriminó al menor, sintiendo a la vez la necesidad de defenderse.

-Si, tiene razón nuestro querido líder, no es apropiado- Junior busco apoyarse en la defensa del mayor.

-Que buenos amigos que están ahora...- contrataco con una media sonrisa, BamBam, ante la actitud de sus mayores -¿vos también tenés algo que enseñarle a nuestro desconsiderado maknae?- su mirada se dirigió hacia Jackson, que aún mantenía el agarre en la ropa de Yugyeom.
Todos quedaron en silencio y las leves risas, que por momentos se escapaban, se notaban falsas.

-No se preocupen por esas cosas- la voz suave de Laura retumbo en los oídos de cada uno, cortando la tensión que casi se podía respirar. -De donde vengo, los abrazos entre amigos son comunes, no importa si son hombres y mujeres... así que...¡quiero mi abrazo!- la muchacha volvió a levantar sus brazos hacia Yugyeom. Éste, dio una mirada rápida hacia sus mayores, pero ninguno levantaba los ojos del suelo. Sin preocuparse más terminó de acortar la distancia que lo separaba de Laura.

-Que pequeña...- susurro el menor asentando la pera sobre la cabeza de la chica.

-¡Yo no soy chiquita! Vos sos muy alto, es totalmente distinto...- se quejó Laura sonriendo -A esta altura puedo escuchar tu corazón...-

-No lo había notado- la voz cantarina de Jackson se hizo oír -Tenés el tamaño de una muñeca...- su risa copó la sala de estar, enviando ondas relajantes a todos sus compañeros -¿No les parece chicos?- Todos comenzaron a reír.

-¡BamBam! Vos también sos cortito ¿De que te reís?- exclamó Laura, uniéndose al resto.

-Haber, comparemos- el nombrado se hizo camino hasta la chica y cruzó un brazo por sobre sus hombros. Si bien, el era más bajo que Yugyeom, todavía le ganaba como por media cabeza.

-Es injusto... todos son más altos que yo... ¡En este país todos son altos!- dramatizo Laura, sacando una carcajada general.

-Entonces si nos sentamos no se va a notar tanto- se acercó Junior tomándola del codo y extendiendo la otra mano hacia el gran sofá.

-Los trajimos de nuestras habitaciones- comentó JB mientras se paraba detrás de dos sillones -así podemos estar todos cómodos...-

-¡Yo quiero este!- Laura se tiró sobre el que se encontraba entre el sofá y el otro sillón.

-Pareces una nena saltando así...- el tono bajo y lento que utilizó Jackson, hizo dudar a Mark de que realmente fuera un comentario. Sonaba más como una reflexión que, inconscientemente, había materializado en palabras.

-¿No tienen hambre chicos? No abrieron el paquete...-comentó la muchacha con la bolsa en la mano.

Todos comenzaron a mirarse entre sí, con la complicidad que sólo años de amistad te otorgan, y sin más, decidieron en silencio, guardarse esa travesura para sus recuerdos.

-Claro que si, eso estaba por decir- se acercó Yugyeom a recibir las masitas.

-Ya preparé para hacer te- exclamó Youngjae, satisfecho por su anticipación.

-Vamos a traer la mesita, así nos quedamos en los sillones- Mark empujó con suavidad la espalda de Jackson y los dos desaparecieron por el pasillo.

La noche pasaba entre bromas y momentos de silencios tranquilos. Sus actitudes eran relajadas y distendidas, como el tiempo que comparten los amigos de toda una vida.

-Creo que ya es hora de irme- Laura se levantó sacudiendo las migas que se habían aferrado a su ropa.

-Y no podrías...- Yugyeom se detuvo, midiendo sus palabras. Pero la idea fue captada por todos los presentes.

-No, es mejor que me vaya a casa. Hoy llegaba mi compañero, lo mas probable es que me este esperando...- le dio una rápida mirada a la pantalla del celular y tras guardarlo volvió sus ojos a los chicos. -¿Qué pasa?-

-No sabíamos que tenías un compañero de habitación...- comentó Youngjae, como si esa fuera una buena excusa para la seriedad en sus ojos.

-No es de habitación... En realidad, es su departamento, yo sólo estoy alquilando- la chica sonrió ante el malentendido de los chicos. Sin embargo, el semblante de ellos no cambió en lo absoluto.

-Pperdón, es sólo que no sabíamos que vivías con alguien...nos tomó por sorpresa-comentó BamBam sintiendo que la tensión del ambiente aumentaba con los segundos.

-Saben... creo que ya me voy. Fue un gusto chicos- Laura se fue sin darles tiempo siquiera a despedirse como correspondía.

Los siete se quedaron clavados en su lugar, sin despegar los ojos de la puerta por donde minutos antes, se había ido la muchacha.

-Creo que está vez, si la embarramos...-murmuró Junior y dando media vuelta se perdió en su habitación. En esos momentos agradecía dormir sólo.

La casa quedó en completo silencio. Cada integrante se encontraba intentando dormir... el tic tac del reloj en la cocina resonaba en las paredes, martillando los oídos de cada chico. De manera intermitente las posturas se cambiaban, las sábanas caían al piso y eran levantadas con pereza. Brazos se enredaban en cuerpos ajenos, buscando, quizás, la tranquilidad del antes.

Con la simultaneidad que da un corazón que suspira, las pantallas comenzaron a brillar y el marcar del reloj, fue apagado por sonidos cortos y rápidos, que por momentos cesaban y volvían a retomar su ritmo. De pronto todo se detuvo. 《ENVIADO》 《ENTREGADO》fueron leídas por cada dueño y los aparatos volvieron a reposar al costado de sus cabezas. Esperando una respuesta que no llegaría. No, de la manera que ellos esperaban.

//
Cuando la chica estacionaba su moto, su celular comenzó a sonar. Suspiró y decidió leer los mensajes después. El departamento quedaba en el tercer piso pero no quiso usar el ascensor. La caminata por las escaleras le iba a dar ese momento para pensar que le hacía falta.

Al abrir la puerta, la oscuridad la recibió. No tenía ganas de hablar con nadie, por lo que pasó directo a su habitación sin detenerse a comprobar si su compañero había regresado.

Se baño, cambió y dio vueltas por su pieza tratando de retrasar el momento todo lo que pudiese. No obstante, la curiosidad estaba estrujándole el estomago. Quería, y a la vez, no quería leer los mensajes que se amontonaban en el buzón, esperando a ser abiertos.

Acostada, saboreo la idea de dejarlos para mañana, pero sentía que estaba mal. Leyó el primero, sorprendiéndose, de que le hubiesen escrito de manera individual.

Yugyeom -Lamentó muchísimo que te hiciéramos sentir incomoda... espero que no estés enojada conmigo. Sólo no sabía que decir... No dejes de hablarme ¿Si?- sonrió ante las palabras del maknae. Era imposible enojarse con él, su dulzura siempre la compraba. Sin embargo no respondió y decidió pasar al segundo.

Youngjae -No se bien que debería decir... pero siento que te debo una disculpa...la noche fue muy divertida y es horrible que terminará así... por favor no te alejes por esto-

Junior -Lau... creo que no tengo palabras...en realidad no se bien cuales usar... sólo te pido que olvides nuestra última reacción. Lo que menos quiero es que te sientas incómoda conmigo-

Mark - Avísame si llegaste bien... ¿si?- La muchacha lo leyó varias veces, todos los mensajes anteriores seguían un hilo, por lo que las escuetas palabras del mayor la habían descolocado un poco. Se sintió un poco molesta pero a la vez refrescada.

JB -Lamentó lo que pasó, no fue nuestra intención hacerte pasar un mal momento. Eres una persona especial y no querría perderte, asique te pido una oportunidad mas para enmendarnos-

Jackson -¡Lau! Espero que sepas que no hubo mala intención de mi parte, es sólo que a veces no controlo lo que digo. Perdón ¿Podemos vernos mañana?-

BamBam -Realmente espero que al despertar todo esto este mejor, me siento mal por cómo reaccione, sólo quiero que entiendas que no quise hacerte sentir mal. Sos importante para mi-

Mark -Entiendo que estés molesta sólo quiero saber si ya estas en tu casa...-

Repaso varias veces cada mensaje. Ya era tarde para contestarle a Mark y a los demás, ya que seguramente estarían durmiendo. Sin embargo, tecleo unas simples palabras y envío una respuesta. Apago el celular y lo dejo debajo de su almohada, obligándose a dormir.

Sintiendo más de Lo Que Se Debe... Got7 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora