Capitulo 22 - Un amigo

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-Pero ¿Y Aisha?, no puedo irme sin saber que esta bien 

-Inventaron el celular ¿Sabes?, puedes llamar a Mason cada cinco minutos si lo deseas, así sabrás las novedades que pasan aquí

-No será lo mismo

-Si algo pasa, te traigo volando

-¿Volar? - ella abrió los ojos como platos - ¿Me estás diciendo que si puedes volar?

-Si - sonrió con suficiencia el muchacho

-¿Con tus alas y toda la cosa? - la muchacha no pudo contener la risita que se le escapo

-¿Te estas burlando de mi?

-NO - agudizo y no pudo evitar soltar la carcajada siguiente por lo falso que sonó eso, definitivamente no estaba echa para mentir

Lucas a miraba intensamente mientras reía, su risa era realmente de las más hermosas que había escuchado, comparables a los cantos de sirena que atraían a los marinos hasta su muerte con su belleza incomparable, si, a lo mejor Emma en otra vida podría ser una sirena.

-Nunca había escuchado tu risa, no así

-¿Así, cómo? - dijo cuando ya logro parar de reír

-Tan... tan alegre

Lucas sonrió mientras pensaba cuántas veces había disfrutado que se burlaran de él y frunció el ceño porque la respuesta era fácil, eso nunca había pasado.

-¿Qué pasa? - dijo de repente preocupada

-Nada - dijo llevando su mirada al piso medio confundido

-¿Seguro?

Lucas movió la cabeza para despejar esas ideas que no lo llevarían a ningún lugar, solo lo confundirían más de lo que estaba.

-¿Familiares de la Srta. Morgenstern? ¿Aisha Morgenstern?

Emma miro a Lucas quien asintió con una sonrisa para que se acercara.

La muchacha corrió hasta donde estaba la enfermera que ya hablaba con Mason, la Sra. parecía sonriente y Emma decidió tomar eso como  una buena señal y se apresuró a escuchar de lo que hablaban justo cuando Mason se giro hacia ella con una inmensa sonrisa.

-Está fuera de peligro - anunció

-¿Enserio? - dijo la chica con una sonrisa que no podía contener y Mason por su lado asintió frenéticamente 

Entonces Emma no pudo evitarlo, se dio media vuelta y corrió hasta donde estaba Lucas, se lanzo hasta sus brazos abiertos sumergiéndolos a ambos en un fuerte abrazo.

-Está fuera de peligro - chilló feliz

-Me alegro mucho - dicho el muchacho dulcemente en su oído, apretándola aún más fuerte contra él

-Lo siento - dijo la muchacha cuando se dio cuenta de lo que había echo e intento alejarse pero Lucas no se lo permitió

-No tienes disculparte - susurro en una voz aun más profunda y varonil que la que tenía y un poco ¿Ronca? 

Obviamente el hombre no era humano, pensó la chica porque esa voz había echo que un escalofrió la recorriera por todo el cuerpo e incontrolablemente la hiciera temblar.

-Nos están mirando - balbució la muchacha con  la voz un poco amortiguada contra el pecho del hombre

-¿Y te avergüenza que te vean conmigo? 

-No - dijo rápidamente

-¿Entonces? - se alejó de ella lo suficiente para ver su rostro que estaba inyectado en sangre y sonrió, tenia un adorable sonrojo

Como sacado de un libroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora