El nieto de la Sra. Robertson ©

CAPÍTULO 46: "La carta"

POV CHARLES

Mi mirada estaba fija en la pared de mi habitación, mis ojos recorrían una y otra vez con cuidado cada una de las fotos que estaban pegadas. Todas las fotos de ella riendo, durmiendo, sonriendo, mirándome, distraída. Era ella, en toda su perfección.

Ya no sabía que más hacer para que me perdonara. Sí, me había equivocado, lo había arruinado todo, pero soy humano, y soy hombre, y soy un idiota. Se que necesita su tiempo para acostumbrarse a todo esto, o sopesar la idea de que la engañé, pero mientras más tiempo pasa, más loco me vuelvo. No quiero perderla. No puedo ni siquiera pensar en la simple idea de perderla. Es preocupante la desesperación con la que la necesito. 

Miré el papel de mis manos una vez más. No podía creer que me habían admitido en la universidad de Stanford. Todo esto es completamente loco, estaba volando en las nubes prácticamente. Yo, Charles Thomas Conner, he entrado en la Universidad.  Decidí estudiar administración de empresas, solo porque es lo más lógico que haga. He aceptado la propuesta de mi padre: trabajar en su empresa luego de terminar mis estudios. ¿Estoy feliz por eso? No tanto ¿Sé qué otra carrera estudiar? Claro que no, ¿Estoy siendo conformista? Así es.

Dejé la carta de admisión sobre mi cama y caminé hacia la sala. En dónde estaban Luke y Peter arreglando los moños de sus trajes en el espejo. Caminé hacia ellos y me di una rápida repasada de pies a cabeza. El traje no me quedaba para nada mal. 

- Explíquenme como puedo ser tan atractivo - comentó Luke con una sonrisa de costado. Puse los ojos en blanco. 

- Estoy demasiado nervioso con toda esta mierda - comentó Peter pasándose una mano por el rostro. 

- ¿Por? - pregunté llevando las manos a mis bolsillos.

- Es el puto baile de graduación al que estamos por ir en menos de media hora - dijo visiblemente nervioso -. No creo que haya estado más nervioso en toda mi jodida vida.

- Ay, por favor, cálmate Jones, todo saldrá bien - dijo Luke dándole una palmada en la espalda -. Además, nuestras chicas estarán ahí, ellas harán que todo parezca más sencillo. Como siempre. 

- Al menos ustedes tienen parejas, y novias. Yo me siento más solo que la mierda - dije bufando.

- Thommy, sabes que Scarlett estará ahí - me dijo Luke.

- Solo tienes que acercarte a ella cuando esté sonando una canción lenta, hacer eso que solo tú haces con tus ojos y pedirle que bailen - se encogió de hombros Peter -. No es nada del otro mundo.

- Si, claro. Me acercaré a ella y seguramente o me ignore por completo o me de una patada en la entrepierna - puse los ojos en blanco.

- Oh, por favor, Thom - Luke puso los ojos en blanco también -. Se le nota que te sigue queriendo. No creo que no pueda perdonarte. Te aseguro que lo hará, amigo. No seas tan negativo, hombre, que me pones los pelos de punta.

- ¿No sabes a qué Universidad irá? - pregunté dirigiéndome a Peter. El ha sido el único de todos nosotros que ha hablado con ella. El rostro de Peter se desencajó por unos minutos, y su mirada me dijo que estaba tratando de no abrir la boca y meter la pata.

- No. No sé nada. Creo que ha enviado unas que otras solicitudes, y que varias universidades la contactaron gracias a la recomendación del profesor de historia, pero no sé si ya tiene una fija - se encogió de hombros y se volvió a mirar al espejo.

- Sabes algo que yo no - sentencié mirándolo fijo.

- No sé nada más que eso, Thomas, lo juro - no le creí una sola palabra.