Levi se la había pasado todo el tiempo que estuvo fuera de casa pensando en aquella persona castaña que vería de nuevo al terminar su jornada de escuela, y no se le ocurrió mejor forma de recibirlo en casa que con la de cocinarle, así que no bien llegó a casa se puso manos a la obra y comenzó a cocinar algo simple pero delicioso, cada vez más ansioso esperando a que Eren entrara y pudiera verlo después de tan largo día.
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Eren había acompañado a Armin hasta su casa, sin embargo no se quedó mucho tiempo ahí a pesar de las suplicas del rubio por que se quedara más tiempo. Por alguna razón estaba ansioso de llegar a donde estaba Levi; sentía unas ganas casi inhumanas de estar cerca de él y ya no aguantaba más la tortuosa espera, así que tras despedirse de Armin partió directo hacia la casa de su alojante con suma ansia ya que había esperado todo el día para poder ver a esa persona que había estado rondando en sus pensamientos todo el día.
Mientras caminaba por las calles del vecindario para llegar a casa, todo parecía brillar y ser más colorido de lo normal. Eren jamás había tenido sensación alguna como la que estaba presenciando, y parecía que mientras más se acercaba a su destino se liberaba una presión acumulada en su pecho que lo oprimía. Hasta que divisó la casa
Entró silenciosamente ya que no sabía si Levi podría estar durmiendo, pero mientras se acercaba a la cocina escuchó el típico sonido de alguien cocinando y supo al instante que ese debía ser Levi. Cuando entró en la cocina, vio a Levi de espaldas a él mismo tarareando una canción que no reconoció y moviendo sus caderas al ritmo de la canción. Parecía que ya solamente estaba limpiando la cocina pero la mirada de Eren se quedó estática en las caderas moviéndose del mayor. Eran algo atrayente para Eren y deseó tener sus manos cuanto antes en esas delicadas pero bien definidas caderas cuanto antes.
No sabiendo muy bien que fue lo que lo impulsó a hacer aquello, avanzó hasta donde se encontraba Levi y simplemente lo abrazó colocando sus manos sobre la famosísima cadera del mayor como si fuera lo más normal del mundo, sintiendo que tenía que hacerlo.
Levi se asustó ante el repentino contacto de otra persona pero se relajó casi de inmediato cuando se dio cuenta que había sido Eren el que lo abrazó de aquella manera. No sabía porque lo había hecho pero no quería que dejara de hacerlo, se sentía seguro de esa forma.
El silencio para nada incómodo lo rompió Levi cuando le dijo a Eren: -ummmm Eren ¿Qué estás haciendo exactamente?
E ignorando cuán cerca estaba ya de Levi, le respondió en un susurro muy cerca de su oído: -Lo siento pero tenía tantas ganas de verte.
Y en ese instante aquella descuidada acción por parte de Eren, mandó un escalofrío a todo el cuerpo de Levi, haciendo que temblara un poco y empezando a sentir un calor en su vientre bajo que conocía bastante bien.
Eren percibió el pequeño temblor del mayor y no pudo hacer nada más que excitarse por aquel gesto, y de nuevo sin pensarlo y aprovechando que tenía puestos sus brazos alrededor de él, lo empujó más hacia sí mismo haciendo que su ya hinchado pene rozara con el trasero de Levi, provocándole un gemido por lo bien que se había sentido el contacto de Levi con su pene.
Levi al sentir algo duro restregarse contra él, no pudo hacer más que buscar su propia satisfacción a su excitación y así fue que empezó a mover lentamente sus caderas contra aquello que presionaba en su trasero, joder, vaya que se sentía como en las nubes pues el pene de Eren era grande y podía escuchar los leves gemidos de este tras sus movimientos. Era lo que en sus sueños pasaba.
Eren segado por la excitación del momento, se separó un poco de Levi para darle vuelta y verlo a la cara. Levi con la cara toda roja, la respiración entrecortada y toqueteándose por sobre el pantalón, lo recibieron con otro golpe de excitación directo en su entrepierna. No aguantaba más, así que tomó la cara de Levi entre sus manos delicadamente y le dio un profundo beso haciendo que Levi lo mirara confundido, y ante esto se separaron, ambos con las respiraciones agitadas.
Todo el cuerpo de Levi ardía tras separarse de aquel beso y se llenó de vergüenza al imaginar que Eren podría pensar algo raro de él, así que trató de huir de la escena pero Eren lo detuvo antes de que pudiera hacerlo, sujetándolo de la cintura y pegándolo de nuevo a él, y con la voz más seria que había escuchado en Eren, dijo:
-Por favor Levi, déjame ser tu compañero. No estarás solo nunca más, por favor Levi...
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Eternos: Eren & Levi (editando)
Fiksi PenggemarCuando crees que el amor de tu vida se ha ido para siempre, pasa algo inusual, se vuelven a encontrar, pero no en el cielo ni en el infierno, si no.... en otra época.