Inquilino♡. [EN EDICIÓN]

Capitulo 30 - Frustacion y mentiras.

Mi padre estrecho la mano de Keith y con una típica frase de padre sobre protector como, - le haces algo y te rompo el cuello.

Se fue dejándonos solos a ambos, yo aun me sentía atónita y algo atolondrada pero sin embargo, estaba feliz, feliz de que nos permitieran estar juntos. Juntos  y en la misma casa.

- Keith nos dejaron... te quedaras.- chille emocionada abrazándolo.

- ¡Si! es genial, sinceramente no creí que tu padre fuera a acceder, pero ya vez ¡lo hizo!- agarra mi rostro entre sus manos.- te amo, te amo, te amo...- repite y besa mi rostro muchas veces.

- Keith...- hable

- No, no lo hagas. No preguntes por favor.- dijo sabiendo que le iba a preguntar.

- Si, es necesario.

- No, no lo es.

- ¡Claro que lo es!- exclame.- tengo derecho a saberlo.

- Yo no he dicho que no lo tengas, pero de igual forma no te diré... no puedo y no quiero.

- Ja! perfecto.- me cruzo de brazos.- entonces no me dirás.

- No.

- Bien.- digo y me encamino a salir de la habitación molesta.

- No te enojes conmigo, no tienes por que.

- ¿Ah no?- digo sarcástica.- Creo que es razón suficiente el que en esta maldita casa todo el mundo sepa mas de ti que yo, yo soy tu novia, tengo todo el maldito derecho a saber de ti y tu maldito ego no te lo permite, decírmelo...- grito.

- Ya te dije que no te diré, no te lo diré y este tema no esta en discusión.- habla con autoridad.

- ¿Y tu quien te crees que eres? ¿mi padre?- mas sarcasmo de mi parte.- No. Eres mi novio y se supone que los novios confían el uno en el otro, una relación es a base de confianza pero veo claramente que tu no confías en mi, y eso me duele...- se me quiebra la voz.

- Oh... pequeña...-

- No. Nada de pequeña o me dices.- me limpio bruscamente una lagrima que desciende por mi mejilla.- o no damos un tiempo.- esto es lo que tengo que hacer, es lo correcto.- tu decides.

- No me pongas a elegir Lauren.

- ¡Oh por dios Keith no es tan difícil!- grito haciendo ademanes con mis brazos.

¿Donde están mis padres?

Agh al diablo con ellos.

- ¡Dime por el amor a dios! Solo dime!- el no habla, no se mueve, no dice nada.- Bien. Entiendo... entonces... nos daremos un tiempo.- digo y subo las escaleras directo a mi habitación.

Me sentía terrible, me sentía engañada, estafada, poca cosa ¿Por qué no confiaba en mi? ¿Por qué no me lo decía y ya? Mis sollozos eran fuertes seguro se escuchaban hasta en su habitación pero no me importo.

Mi madre entro para avisarme que bajara para la cena pero sin embargo no le hice caso, no cene, no quería verle y tampoco tenia hambre, la boca de mi estomago estaba completamente cerrada.

Me dormí llorando, supongo...

...

Me desperté aquella mañana temprano. Era viernes, aunque no quisiera tenia que ir al instituto.

Vi en mi teléfono, las 7:12 am. Si, es un hecho me levante temprano, mucho para mi gusto, pero bueno así quizás no me iba a encontrar con el en la cocina...