I Hate You But I Love You

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—Entonces... lo haces para satisfacer a las demás personas para ganar popularidad. ¿Verdad?

Asintió. —No quería hacerlo.

Después de que él me sacará, mientras platicabamos, nos sentamos en la pared del pasillo.

Sonreí. —Entiendo, pero... —Hice una mueca. —¿Por qué me lo dices? Después de todo, pasó todo un año y nunca te habías disculpado por algo así.

Aaron se acercó un poco a mí. —Mis padres nunca están, en el colegio no me pueden castigar o algo así, por lo que yo lo disfrutaba y mi mente era rebelde.

—Muchos me odian en el colegio. —Suspire mientras recordaba esas típicas miradas de odio que me hacen con tan sólo poner un pie dentro del salón.

Él soltó una pequeña risa. —Scarlett, ellos no te odian, simplemente te tienen envidia. —Recargó su cabeza en la pared y cerró los ojos. —Eres de Canadá, es obvio que eres diferente y se te nota, yo soy de Inglaterra y se me nota. Las chicas te odian y a mi me aman, es confuso pero así es.

—Claro, Daniel ya me lo había dicho.

Sonrió. —Deja de hablar de ese tipo, siempre esta a tu lado, es frustrante.

Bajé la mirada. —Es el único que me ayuda en las horas del colegio.

Se levantó de golpe y me ayudó a levantarme. —Te veo mañana, tengo cosas que hacer. —Me dio un beso en la frente.

Asentí y entré a mi departamento, me recargue en la puerta y Sonreí mientras me perdía en mis pensamientos tan lindos, últimamente disfruto estar con él, así como lo había soñado en algún momento.

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—Mis padres van a hacer una fiesta el próximo viernes. —Daniel nos miró.

Carla sonrió. —Claro que iremos.

Hice una mueca. —Estaré ocupada.

Ambos me miraron de mala gana.

—Yo me encargo de que valla. —Carla me tomó del brazo y sonrió.

Daniel sonrió. —En pocos minutos, Aaron estará aquí.

Negué. —Es viernes, tal vez esta en una fiesta.

—Sabes... A pesar de que es popular, nunca lo veo en ese tipo de fiestas.

—Así es, prefiero quedarme en casa. —Aaron se acercó a nosotros, estaba detrás de mi.

—Chicos, es hora de cerrar. —Nuestro jefe dijo. —Tengo que irme.

Le dio las llaves a Daniel y se fue rápidamente.

—Bien, me llevaré a Scarlett. —Aaron dijo.

Daniel rio. —¿Te golpearon? O ¿Por qué esa actitud?

Aaron me miró. —Entra al baño antes de irnos, nos espera un viaje largo.

—¿La... Largo?

Él asintió y le hice caso, claro sin antes recibir un par de malas miradas por parte de mis dos mejores amigos.

—No le hagas nada malo, Aaron Smith. —Carla dijo fríamente.

—Lo tengo controlado. —Tomó mi mano y salimos del restaurante.

Un señor abrió la puerta de un auto negro y Aaron me dijo que entrara.

—Mi chofer nos llevará, así que vas segura.