Como todas las benditas mañanas de Lunes, Baekhyun se levantó de su cómoda cama, insultando a medio mundo por la estúpida e innecesariamente necesaria creación de las escuelas.
-Sólo quiero ser modelo, mierda.
A regañadientes, se fue directo a darse una ducha fría. Tal vez así se le pasaría el humor de mierda con el que se despertó.
-Sólo ésta semana y ya -se repetía una y otra vez- Ésta semana, y no volveré a volver a pisar esa maldita cárcel.
Acabó de ducharse y se enrolló una toalla a la cintura, para luego caminar directo a la pequeña mesita en la que estaba su celular, el cual no dejaba de hacer ese zumbido que tanto lo irritaba.
Catorce llamadas perdidas.
Confundido, miró quién era la persona que estaba llamándolo tantas veces, y al saber de quien se trataba, simplemente le dio igual.
«Seguro sólo quiere joder» pensó.
Jongdae, por otro lado, llamaba desesperadamente a su mejor amigo, aún sin éxito.
-Demonios, Baek, contesta...
Prácticamente se estaba mordiendo las uñas por la desesperación, pero a la veinteava llamada, decidió que le valía verga.
-Bien, no me contestes, luego no me andes lloriqueando, estúpido. - le habló a su celular, fingiendo estar hablando con Baekhyun.
Jongdae agarró su mochila y bajó las escaleras de su casa, y después de meterse un pedazo de pan a la boca y hacerle señas a su madre para indicarle que ya se iba, salió de ella.
Una de las ventajas de la ubicación en la que se encontraba su hogar, era que al frente estaba la escuela en la que asistía. Y otra sería que cerca vendían esos bollos que tanto le gustaban.
Al llegar, no se sorprendió por haber llegado primero, ya que desde que había iniciado el año siempre había sido así. Él tenía la asistencia más deseada de cualquier alumno.
Esperó unos minutos, y como lo supuso, llegó el crush de su amigo.
-Hey, Poste, ¿cómo te va?.-rió- Escuché que tienes novia, ¿es verdad?-el pobre chico alto, álias poste, asintió nervioso.-No puede ser, ¡me ganaste chico-poste!-se llevó una mano al pecho, indignado.-Qué rayos pasa con éste mundo.- Jongdae miró al cielo, o mas bien el techo, como si estuviera esperando que le respondieran.
Tratando de aprovechar que Jongdae ya no le prestaba atención, caminó rápidamente a su asiento de al fondo, sentándose y sacando el libro que había estado leyendo, pero aún no había terminado. Lo cual, era impensable para Park Chanyeol, quien nunca dejaba las cosas a medias.
-Oye, Poste.-lo llamó Jongdae desde su asiento-¿Quiéres que te cuente algo?-como lo esperaba, Chanyeol negó, pero obviamente a Jongdae no le importó. -Baekhyun es gay.
El chico alto abrió los ojos de sobremanera, pensando que el chico con sonrisa de gato le estaba haciendo otra de sus tantas bromas.
-Es imposible.
Jongdae, sin poder evitarlo, rió tan fuerte que Chanyeol podría jurar que se escuchaba hasta la parada de autobuses.
-¡¿Imposible?! ¡Já!-se limpió las lágrimas que habían salido a causa de su ataque de risa, y prosiguió.-Baekhyun es tan gay como tú de alto.-sonrió, ya más calmado. -Incluso más.
En ese momento, llegó Baekhyun, con un plátano en la boca.
Jongdae y Chanyeol dirigieron su vista hacia la persona que acababa de entrar al aula, y al notar que era Baekhyun y ver lo que tenía en la boca, Jongdae volvió a reír como histérico, y Chanyeol se puso rojo.
ESTÁS LEYENDO
Mi Novio, El Poste |ChanBaek|
FanfictionBaekhyun tenía una meta en la vida: Ser el mejor modelo profesional del mundo. Sin embargo, nunca se hubiera imaginado que sería así de difícil. -Byun, sube más la mano. Y peor aún, nunca hubiera siquiera pensado que su "fotógrafo" sería aquel chico...