El Circo Del Amor [YeWook]

Cap. 3

Jong Woon conducía con el ceño fruncido a la escuela de Henry, cómo siempre le tocaba llevarlo cómo si de su chofer se tratara. Aún estaba molesto por lo que había hecho, ¿con que intención quería imitar a ese cirquero?, le daba rabia con tan solo pensarlo.

- ya no estés enojado Jong - dijo el pequeño con un puchero - es que yo quiero ser cómo él.

- ¿encerio? - preguntó con un tono molesto - ¿quieres ser un mugre y naco cirquero? - el pequeño lo miró con decepción - creó que la otra vez te dije perfectamente que los circos y nosotros no nos juntamos, es cómo el agua y el aceite, incompatibles ¿entiendes?.

- pero a mi me gustan muchos los circos, son muy geniales lo que hacen y...- fue interrumpido por el mayor.

- y te vuelvo a repetir que esos lugares son para gente pobre, ¡por favor Henry date cuenta! - cada vez su enojo crecía aún más - ellos no tienen los mismos recursos que nosotros ni mucho menos la misma clase, nuestros modales son diferentes al igual que todo lo que nos rodea, así que deja de hacerte ilusiones estúpidas que solo te vas a perjudicar en la vida.

- esta bien Jong - susurró con un tono triste - ¡pero yo quiero ser cómo Ryeowook! - dijo rápido.

Ryeowook.

Se repitió mentalmente, aún no podía creer que ese chico cambiará los pensamientos de su hermanito, ¿quién se creía?, ¡ni siquiera debieron llegar a la cuidad!, se hubieran quedado en los pueblos dónde pertenecían y nunca llegar a su vida, eso solo lo irritaba y cada vez más.

- adiós Jong - se despidió su hermanito con un beso en la mejilla, cómo siempre hacía, y bajó del auto - ¡nos vemos en la tarde!.

- Kyu te vendrá a buscar! - dijo terminando con su tono de voz alto ya que se había alejado.

Volvió a retomar su camino mientras pensaba. Ese circo le estaba arruinado la existencia, ni siquiera la llegada de Kyuhyun lo había enojado tanto cómo ese circo, ¿qué hacían en la ciudad?, ellos nunca debieron salir del lugar donde comenzaron con su ridículo circo, tampoco llegar a arruinarle la existencia a él y a su familia.

Ryeowook, aquel nombre lo tenía con la rabia en la lengua, desde aquella noche que piso ese horrible lugar no había dejado de escuchar el nombre de ese chico ser pronunciado por Henry. Ryeowook, Ryeowook, Ryeowook, puro Ryeowook. Las imágenes de aquella escena del chico colgado en las telas se le vino a sus recuerdos, ¿cuánto habría trabajado ese chico para hacerlo?, su actuación y acrobacias en las telas fueron magníficas. ¡Basa Jong Woon!, se recriminó mentalmente, ¿en que estaba pensando?, ni que colgarse en las telas fuera gran cosa.

Tan solo había pasado unas horas desde que se habían quitado de ese lugar y ya le estaba causando problemas, ¡maldita sea!: pensó aporreando el volante. Dirigió su mirada hacia aquel lugar, ahí estaba de nuevo arruinando el lindo paisaje que se veía en la carretera. Si ya estaba por ahí, iba a aprovechar para hacer lo que tenía que hacer. Estacionó su auto en un espacio del lugar y bajó dirigiéndose dentro del circo, pudo notar algunos chicos desconocidos yendo de un lugar a otro, seguro estaban viendo que todo se encontrará perfecto para la función de la noche, entre esos chicos pudo ver a un chico medio alto practicando con unos aros y otro delgado de cabello negro-no tanto cómo la de él-, piel blanca y vestía algo afeminado, ¡ah, claro, el chico de la moto y el globo de la muerte!: pensó Jong rodeando sus ojos. Se acercó a él con pasos firmes y no tuvo que hacer mucho para que el chico lo volteara a ver.

- oh, buenos días - dijo el mismo e hizo una reverencia - ¿le puedo ayudar en algo? - le preguntó amable.

- quiero ver al chico que se enreda en las telas - respondió con su misma seriedad, cosa que asustó un poco al motociclista.