That Moment When...

❝コーヒー深夜。❞

❝𝒜𝓁 𝓅𝒶𝓇𝑒𝒸𝑒𝓇 𝓉𝑒𝓃𝒾́𝒶𝓈 𝓇𝒶𝓏𝑜́𝓃. 𝒯𝓊́ 𝓂𝑒 𝒶𝓂𝒶𝓈 𝓂𝒶́𝓈...❞

Han sido palabras que siguen resonando en mi mente y las que aun me atormentan. He vivido cuatro años de mi vida atormentado porque quien llegue a querer me las vuelva a decir. Del día en que KiBum me las dijo para terminar conmigo, quedé devastado. Lloré como nunca antes en la vida lo habría hecho y es que le amaba, habría dado todo con tan de tenerle de por vida; sin embargo lo que más me dolió, me destrozó. Siquiera su confesión de infidelidad dolió tanto como esa simple frase y es que... ¿qué fue lo que hice? El día anterior estuvimos de maravilla, nuestra relación era perfecta pero él... no me ama...
Le había rogado más de lo debido, había echado mi dignidad y orgullo a la basura por rogarle que no me dejara pero él parecía odiarme. Quedé devastado, estaba solo. Se había ido todo de mí, hasta mi personalidad.
Aquel chico dulce, amistoso, seguro de sí cambió radicalmente. Se había convertido en un hombre serio, frío, calculador, reservado, poco apático y en cuanto a amistades, desaparecieron una por una. A los pocos meses se desconocía, el consumo de alcohol empezó a hacer frecuente, no salía de su hogar más que para rendir en sus clases, afortunadamente e dinero no le faltaba, sus padres mensualmente le mandaban desde japón dinero para subsistir. Cosa que tan solo derrochaba en pub's y bebidas hasta que ya no pudo más, no podía seguir así toda la vida. En cualquier momento le hallarían tirado sin vida en alguna cuneta con el olor a cigarro y al horrible alcohol que si bien le hacía sentir en otro mundo, le estaba matando.
por voluntad propia empezó por dejarlo, no del todo; por supuesto. Ya era hora de superar aquella fallida relación, matar esas ilusiones de que algún día volvería a su lado, de ese entonces andar con una y otra persona era su escape, no le costaba mucho conseguir nuevos pretendientes pues su atractivo rostro y delgado cuerpo llamaba la atención entre hombre y mujeres y, luego de un par fallidos, sabía bien cómo ligar a quién le llamaba su atención en las diferentes fiestas que asistía Pero al final todo era una farsa completa, por la misma razón no duraban en lo absoluto. O bueno, así fue hasta que conoció a un particular chico, él era totalmente diferente, sonrisa bella, facciones encantadoras, tenía una vitalidad y un aura alegre, bastante despistado pero fueron todas y cada una de estas cosas que le conquistaron, este chico había sido totalmente diferente a esas aventuras que llegó a tener. Al conocerle había dejado todo vicio, había sido una nueva oportunidad, o eso creyó hasta que en aquello desvelos diarios le confiesa que había empezado a salir con alguien más y pues.. claro, era obvio que nadie tan lindo gustaría de alguien como el japonés, no con su historial, solo pudo aguantar un par de semanas pues discutía de la nada con Yixing, todo gracias a los celos que le provocaba ver a la persona que quería siendo feliz con alguien más, tan solo lo aceptó y sin siquiera poder confesarse había desaparecido de su vida, tenía claro que le había pasado por haber sido una mala persona y haber jugado con los sentimientos de varias personas. La peor noticia vino luego cuando no de los amigos que tenían en común le dice que YiXing estaba próximo a casarse. Nuevamente la persona por la que había empezado a tener sentimientos sinceros se había ido y no podía hacer nada para impedir que así fuese todo.

Convencido hoy en día de la popular frase "lo que pecas pagas" o convencido del tan nombrado "karma", ninguna de sus relaciones le duró más de dos meses, todos y cada una de las personas con las que se comenzaba a encariñar le abandonaban, la mayoría dejándolo porque perdían el cariño y es que ¿Quién querría estar con un muchacho de carácter duro, bastante cerrado en cuanto a emociones y desconfiado hasta de sí mismo?