Dia Que Emma Conoce A La Familia De Cesar

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Entramos a mi casa Cesar se cambia en mi habitación y yo en la de mamá, los dos salimos a los cuarenta minutos para ser exacta. Le pido que me pases los tacones color piel que están en mi armario son los únicos así que no se confundirá. Me los pasa pero no le dejo que me vea aun, solo he abierto un poco la puerta justo y perfecto para que pasen los tacones. Al salir ya peinada, vestida y maquillada, Cesar dice.

-Te queda precioso, ese vestido le dije a mamá que eras talla, S - dice convencido.
-Pues parece que si - digo mientras doy la vuelta para que vea mi culo con propósito de coquetear.

-Emma, que haces mujer, me vas a volver loco - mientras se despeina el cabello con sus dedos.

-Está bien no lo are - y coqueteo un poco con él. Nos empezamos a reir y ese momento pasa tan lento por mi cabeza miles de fotografías de su risa su hermosa sonrisa.

-Gracias nuevamente por el vestido - digo.

El me abraza y me hace saber que está contento y muy tranquilo, de estar a mi lado.

Ya listos para la reunión a Cesar se le ocurre decirme que estarán todos sus familiares desde tíos hasta primos y mis nervios salen a flote, pero me tranquiliza repitiéndome que su papá le ha pedido que me invitara desea conocerme, nos dirigimos, a la puerta del portón y me pregunta si no llevare mi teléfono celular, le sonrió haciéndole saber que aún no tengo movil, mientras encojo mis hombros, y sigo delante de él, y como es de Cesar salen palabras morbosas.

-Que culo más lindo el de mi novia - Dice y yo de espaldas no me giro para que me siga observando.

-Ya para Cesar - Digo sonriente.

-Está bien pero no te me pongas de espalada o no respondo - replica con tanta coquetería.

-Listo mi amor - digo y el solo me observa con un rostro de asombro al escuchar de mi palabras como esas pero suelta una risa.
-Emma ¿porque me haces tan feliz? - me dice sin aparta la mirada.

-Tu me haces feliz también Cesar - respondo mientras ne acerco a besarle.
-Nena aun no tienes móvil, verdad - me pregunta, no se si estara sordo, pero ya se lo he dicho que no tengo.

Yo no digo nada mas y subo a su coche mientras Cesar pone seguro al porton de mi casa pareciera que ya vivimos juntos de verlo como coge con seguridad las llaves. Mientras vamos camino a su casa veo que aún tenemos algo de inocencia y duda de jóvenes en el mundo sin saber que pasara después. Saco de mi pequeño bolso negro el labial rojo de mamá, bajo el espejo que tengo frente mío y siento como me observa con delicadeza mientras toca mi muslo izquierdo dándome un ligero masaje de arriba hacia bajo.

Para minutos de camino exclama.
-Llegamos - mientras abre eléctricamente el porton de su casa.

-Cesar, tengo miedo - le confiezo.

-Nena, te van adorar, tranquila - dice besándome por unos segundos.

Entramos, y veo muchas personas  mis nervios se hacen notar, a estas alturas quiero el baño me orino y no se como decirle a Cesar. Después de varios pasos para ingresar a el gran salón, ahora si empezamos la presentación de la novia a su familia, mientras nos acercamos a un grupo de señoras, en ese grupo esta la hermosa mamá de Cesar.

-Disculpen, señoritas les voy a presentar a la mujer que se a robado mi corazón, mamá y tías les presento a Emma - Dice tan tranquilo y veo como su mamá devuelve el wiski ha el vaso sonríe de mejilla a mejilla mientras sus tías me abrazan fuertemente y nos felicitan a los dos.

-Emma desde el primer día en que te vi sabía que tenías algo especial bienvenida a mi familia - Replica la mamá de Cesar dándome un fuerte abrazo.

De repente me siento muy a gusto de saber que por el momento todo va mejor de lo que esperaba, estamos riéndonos de unos cuantos chistes, que empieza a decir Cesar a las cuatro mujeres que estan presentes incluyendome, después de una buena charla Cesar me hace saber que subirá a su recamara, yo me quedo muy a gusto con estas mujeres extraordinarias, ellas empienzan hablar de sus hijos cuando eran pequeños y la mamá de Cesar, platica sobre lo hermoso que se veía Cesar de niño comiendo mandarina, cuenta que separaba los ñejos, uno por uno y los dejaba en fila en el suelo ordenando que nadie se los tocara. Solo de imaginarme ese niño bello que hacia locuras de bebe me dan ganas de correr hacia donde esta y besarlo, de repente de tantas historias sobre Cesar, baja por las escaleras el hermoso niño ya hecho un hombre veo que se a cambiado de camisa y se a puesto una de color blanca, que le queda perfecta con esa sonrisa que me brinda mientras baja las dos ultimas gradas. A decir esta le queda mejor que la que tenia guardada en su segunda su coche.

-Me la robo unos minutos señoritas - les informa a sus tías y mamá
-Ve a presentársela a tu padre Cesar, Emma un gusto nuevamente, tenerte en nuestra familia. - dice sonriendo y yo le doy un delicado beso en su mejilla despidiéndome por unos minutos.

El me atrapó Donde viven las historias. Descúbrelo ahora