Me levanté del sillón y bostecé, hacía frío y yo no traía ni una cobijita. Subí a mi cuarto por mi celular y me encontré a Marco.
-Che floja Yos- me dijo sin apartar la vista de su videojuego mientras yo me reía como respuesta a su comentario.
-Nadie te supera en eso, ni siquiera yo- me miró de reojo y puso los ojos en blanco ante mi "gracioso" comentario. Caminé por el pasillo hasta llegar a mi cuarto, tome mi celular y vi la hora, eran 2:03 p.m, ahora entiendo porque me dijo floja..
Mi turno en la pizzeria comenzaba a las 3:00 p.m así que tenía tiempo de darme una ducha rápida y comer algo. Me puse la camisa de la pizzeria, un pantalón de mezclilla y mis converse blancos, me hice una coleta y me puse un moño rojo. Salí de mi cuarto y vi que el de Emma estaba cerrado, la curiosidad siempre gana, pensé y abrí la puerta.
-¡Yoselinne! Ya te dije que cuando vallas a entrar toques la puerta- gritó Emma al tiempo que yo entraba a su cuarto, y ahí estaban: Anna y Camila. Era de esperarse, Emma nunca deja la puerta cerrada a menos que esté hablando por video-chat con Uriel. Saludé a Anna y Camila con una sonrisa y un movimiento de cabeza.
-Solo te iba a avisar que ya me voy a la pizzería, ¡adiositoo!- dije y salí de su cuarto.
Fui a la sala tomé mi mochila y metí mis llaves, celular, sombrilla y me puse una sudadera, hecho esto salí de la casa y caminé, caminé y caminé. El cielo estaba muy nublado, pero no me importaba que lloviera, me gustaba ver la cara de los clientes cuando rara vez llegaba su pizza mojada o empapada, aunque si eso pasaba no me daban propina.
-¡Ya llegué July!- grité mientras entraba a la pizzeria, el local era pequeño pero pagaban bien, la pizza era riquisima
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Pizza a domicilio
Teen FictionYoselinne, una chica de 16 años con un trabajo no tan bien pagado pero muy divertido, conoce a esa persona que parecerá ser la indicada.