Todos hemos tenido que madurar queramos o no. A veces la vida nos gasta esa pequeña putada y nos hace cambiar los esquemas. Y entonces, es cuando tu mundo cobra de una vez por todas sentido. 2 personas, una guerra, un internado, ¿vencerá el amor o l...
Lara - ¿Pensais decir algo? - Cuestiona por tercera vez el director sin obtener respuesta alguna.
Nos encontramos todos en su despacho, y un silencio agobiante nos invade por completo. Nos miramos mutuamente dudando sobre nuestro futuro y cual será el castigo que nos ponga. Y rezamos porque no nos expulsen. Nadie dice nada durante unos largos y tensos minutos.
- Yo no hice nada, solo fui porque me obligaron - Se digna a decir Dylan. ¿Será subnormal o me lo parece a mi? ¿Cómo tiene huevos a decir eso? - Mentira, el vino porque quiso - Contesto yo mientras frunzo el ceño asesinandolo con la mirada.
- Todo lo contrario, ellos le obligaron, el no quería ir, se queria quedar conmigo - Rechista una voz chillona detrás nuestra. La que faltaba. Ante mi la persona con menos cerebro y más maquilla que he visto en mi vida. Alice Turnner, que al parecer, nos estaba espiando porque no dudo en defender a su estupido novio justo cuando a este le hizo falta - Tito, yo los vi, Dylan no no quiso - Continua. ¿Quién se cree? Lara respira porfavor. No la lies aqui, noem este momento, relajate, no pasa nada. - En tal caso, Scott, queda usted absuelto de su castigo. Puede irse del despacho - Declara Griffin - En cuanto a vosotros...
(...)
- Te juro que lo mato - Muerdo mi labio mientras cojo el cepillo y comienzo a barrer toda la suciedad que se encuentra en el suelo del comedor - ¿Cómo se atreve a hacermos esto? - Sigo, intentando buscar una explicación lógica a aquel ser unineuronal. - Lara, relajate, por lo menos solo nos han ordenado limpiar, podían habernos puesto algo peor o expulsado incluso - Interviene Jesus intentando calmarme. Ja, que poco me conoce. - ¿Cómo que me relaje? ¿Eres consciente de que nos la ha jugado? - Respondo apoyando el cepillo en la pared y sentandome sobre una de las mesas del lugar. - ¿Y que hacemos? No podemos hacer nada - Afirma Emma mientras pasa un trapo humeno sobre las ventanas, quitando las manchas de comida que, inexplicablemente han llegado hasta alli. - Perdona, estas hablando con Lara Stones, para mi no existe la palabra nada, y me pienso vengar - Manifiesto colocandome el pelo con la mano mientras me levando para seguir barriendo. - Stones y sus venganzas... - Suspira Kevin mientras me mira fijamente. - Esa soy yo - Declaro orgullosa de mi misma.
La tarde se pasa rapido y conseguimos limpiar todo a tiempo para la hora de cenar por suerte.
- ¿Alguna idea para devolversela? - Pregunta mi compañera morena mientras intenta masticar la carne cogelada que tenemos hoy. Si, la calidad de la comida es excepcional. Lo se. - ¿Alguna? - Formulo yo irónica - Tengo miles de formas de vengarme. Y tranquila que las pondre una a una en practica hasta que ese subnormal acabe huyendo de este internado deseando que me muera - Continuo seriamente. Ya que conociendome se que voy a cumplir mi palabra.
Lo observo desde la distancia. Alli esta. Con sus penetrantes ojos azules y su precioso pelo dorado. Que pena que yo no sea una chica normal y no vaya a caer en sus encantos.
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Dylan
No debía haberlo hecho, sin embargo lo hice. Me he librado de pasarme el día entero limpiando la mugre acumulada en las cocinas y quitando los chicles de debajo de las mesas. Pero... Acabo de perder completamente a Emma, la cual me la suda un poco ya que me da asco esa chica, a mis dos compañeros de habitación y a ella, Lara Stones, de lo cual me arrepiento no sabeis cuanto. Ella es distinta. No se preocupa por arreglarse cada mañana o estudiar para aprovar el curso. Ella se deja llevar y acepta las consecuencias venga lo que venga. No como yo. Un puto cobarde que prefiero aprovechar que mi novia es la sobrina del director para librarme de cada lio en el que me meto. Que estoy detrás de la primera chica que pasa a mi vera y que... Cada vez que lo pienso me doy más asco a mi mismo.
- Cariño - Murmura Alice depositando un beso en mi mejilla mientras se sienta a mi lado - deja de mirar a esa retrasada mental que vino nueva - Continua refieriendose a Lara. - Yo... No la miraba... Esto... Sabes que solo tengo ojos para ti amor - Disimulo finjiendo una sonrisa para evitar su lluvia de preguntas a cerca de si la estoy engañando, la voy a dejar o cosas por el estilo. - Esta bien guapo - Asiente mientras se me aproxima pengandose a mi cada vez más. Necesito cortar con ella, no aguanto más. Pero nunca encuentro el momento. Solo comenzamos a salir por que necesitaba... Ya sabeis... En resumen que cabeza no tiene pero buen cuerpo si. Y esto es lo que pasa cuando quieres a alguien solo por su fisico, que al final terminas sin saber que hacer, rebuscando una forma para que acabar vuestra relación sea lo más fácil posible.
