Estoy agotada. Las drogas me tienen completamente incapaz de distinguir la realidad de la ilusión, como si todo este tiempo hubiese estado confundida.
Alguien se acerca.
Una enfermera se acerca a mí; al principio parece una mancha blanca y borrosa que se acerca y aleja todo el tiempo.
- ¿Cómo estás? - su voz es dulce y melodiosa - espero que te sientas mejor porque ya es hora de despertar
Sus palabras resuenan a lo lejos, trato de moverme pero mis manos y pies están atados a la camilla ¿Qué está pasando?. La enfermera nota mi desesperación, nuevamente trato de moverme pero duele; hay mangueras conectadas a mis brazos y a todo mi cuerpo.
- Realmente lamento lo que sucedió - trató de calmarme - pero necesito que no te alteres para que puedas hablar con ellos
Ignoro por completo lo que está diciendo ¿Por qué estoy atada a una camilla? ¿Qué pasó? ¿Dónde está mi familia? ¿Están ellos bien?
Sigo forcejeando con todas mis fuerzas, necesito moverme, tiro de las correas que me atan a la camilla y mis brazos duelen.
La enfermera sale corriendo, algo ha pasado. Aprovecho el momento para escapar, pero no puedo, realmente no puedo y no sé qué es lo que está pasando.
La enfermera vuelve a mi lado mientras dos hombres me sostienen
- Realmente lo siento - se disculpa mientras me inyecta algo - no puedo dejar de hacerlo hasta que te calmes
Quiero protestar, decirle que no se trata de eso, solo quiero soltarme para estar más cómoda pero las palabras no salen de mi boca. De pronto, todos se vuelven extrañas manchas blancas que giran a mi alrededor.
¿Qué diablos está pasando?
Realmente no lo sé
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Ni idea
Teen Fiction¿Y si todo lo que crees está mal? ¿Y si tu cabeza ha estado jugando todos estos años contigo? ¿Hasta qué punto puedo confiar en que lo que veo está sucediendo en verdad?
