CAPÍTULO 39: ¡Toca la puerta!

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Pasaron algunas semanas tranquilas sin fiestas y Josh llegaba en la madrugada con chicas pero ahora no hacía tanto ruido o por lo menos yo no lo escuchaba, mi trabajo iba estupendamente aunque estaba muy cansada todos los días la paga era buena, no tenia con quien salir pero salía, la ciudad era muy hermosa, cuando viajaba en bicicleta veía las casas de campo hermosas y me detenía un rato para admirarlas, hoy también saldría un rato; Josh dormía con una morena así que salí en silencio.

Fui más lejos de lo que lo había hecho antes y encontré una hermosa casa, me detuve y baje de la bicicleta, era grande, había caballos afuera corriendo por todo ese gran campo.

-Hola- me sobresalte cuando vi un caballo hasta que subí mas mi cabeza y vi al jinete, era rubio tenía su sombrero y una bonita sonrisa.

-Hola, Disculpadme ya me iba- cogí mi bicicleta.

-Te he visto en la universidad- dijo- mucho gusto, Julian- dijo cuando bajó de su caballo y extendió su mano.

-Abbigail, el gusto es mío- dije estrechando la mano.

-Sé quien eres- no entendía.

-¿Qué?- dije.

-Sí, todos saben. Eres Abbie, la chica de Josh- ahora no entendía nada.

-No,no. Nosotros somos amigos-

-Oh, qué incómodo. Creí eso porque dijeron que llegaste y hubo bastantes problemas y todo eso- ahora todo estaba más claro que el agua. Reí.

-Bueno, ellas son mis amigas y quisimos hacerle una broma-

-Eso no piensan todos, emm... Bueno.. Por eso nadie se te ha acercado, hay chicos que te miran pero por haber estado con Josh mejor no se acercan para evitar problemas con él y las chicas sienten envidia porque tu lo tengas porque saben que viven juntos- otro problema a mi lista y entendí porque no se me acercaban, que miedo como vuelan los chismes.

-Entiendo- dije bajando la mirada y analizando lo dicho.

-¿Quieres subirte?- preguntó apuntando a su caballo.

-Claro- dije emocionada- pero primero quiero intentar con uno pequeño, no sé un pony- él se rió, ya me agrada.

-Vamos llevemos tu bici a la casa y te enseño- asentí. No moriré pensé.

Sacó una yegua blanca hermosa y él subió primero.

-Mírame- miré cada uno de sus movimientos y memorizaba.-Ahora te ayudaré- subí de a pocos y me acomodé.-Ahora haz así- dijo haciendo un sonido con su boca. Lo hice.

-¡No!, ayúdame- dije cuando la yegua se fue y no sabía cómo pararla.-¡Julian!- grité pero me reí.

-Lo mejor, ¿verdad?- dijo alcanzándome con su caballo.

-Sí, gracias- grité y seguí cabalgando. Después de un tiempo de tanto reír le dije que me ayudará a detenerla y bajamos.-Gracias, ha sido una experiencia muy chistosa- dije.

-De nada, ¿Quieres comer algo?-

-Es tarde, esto se hará muy oscuro, si quieres luego- le Sonreí.

-Te llevaré, relájate- tocó mi brazo.

-Bien- dije.

Comimos con su familia (Que era bastante grande) no tenía papá así que era el hombre de la casa porque tenía 3 hermanas y su bella madre que era muy amable aunque distante y me analizaba a distancia. Me llevó en su camioneta hasta casa (sorprendentemente sabia donde vivía) y bajamos la bici.

-¿Quieres pasar?- pregunté.

-Emm..bueno..- dudó.

-Josh no dirá nada porque sólo somos amigos- le repetí y él asintió. Entró, Ezra y Josh estaban jugando videojuegos así que tuve que gritar para que escucharan que había llegado.

Mi Primera Opción (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora