~Sorry~ Out Of Order 3: Endless Love

Endless Love

(Música cuando se indique:

Artista: Ashes Remain

Canción: Everything Good.)

"Un asesino acabó con las vidas de cinco inocentes niños en una pizzería local. Los cuerpos nunca fueron encontrados, fue un verdadero baño de sangre.

Eso describían las noticias y periódicos de todo el país. Una gran masacre dentro de aquel lugar donde los sueños y fantasías se volvían realidad.

Por casi treinta años los condenaron a vivir atrapados ahí con el castigo de no recordar nada de su vida pasada. Sólo con su compañía y confianza inquebrantable que los mantuvo unidos durante todo ese tiempo en el infierno que se vieron obligados a llamarlo "hogar"."

Pero tú ya sabes eso, conoces la historia de las cinco almas de inocentes que buscaban salir y ser libres del dolor soportado durante tanto tiempo...

Esta es la historia detrás de todo aquello que ya sabemos.

(...)

Las pizzerías ya habían sido cerradas hace diez años.

Los animatronicos desactivados reposaban en el viejo escenario frente al comedor principal donde alguna vez hubieron niños alegres cantando y comiendo en su lugar favorito.

El mismo lugar donde a cinco niños les fue arrebatado el derecho a la vida y encarcelados en trajes quitándoles la alegría que alguna vez pudieron sentir.

Ahora el lugar estaba abandonado, ríos pasaban por los pasillos empolvados, la humedad hacia acto de presencia en el ambiente y unos trajes inactivos yacían en el escenario decorando la pobre estructura de madera.

Todo había permanecido así durante los siguientes diez años. A excepción de hoy.

Una de las puertas que poseía el lugar fue abierta a la fuerza por una hacha filosa y mucha fuerza de parte de quien la empuñaba. Los animatronicos no hicieron nada, no se movían por ningún motivo.

Un estruendo se formó por los pasillos, el objeto metálico golpeaba las desgastadas paredes que mantenían de pie el edificio.
Los trajes seguían sin moverse.
Menos uno, el oso. Un susurro lo levantó del "coma" en el que estaba. Alguien le susurraba "Sígueme".
Algo extrañado, el oso, caminó en dirección del sonido. La voz resonaba por todos los pasillos de la antigua pizzería por lo que más de una vez se metió en el camino equivocado.

La extraña voz no dejaba de sonar, decía siempre lo mismo y su eco resonaba sin cesar en cada habitación. "Que extraño" pensaba Freddy mientras caminaba por los desolados pasillos. Se empezaba a frustrar por no encontrar el origen de aquella misteriosa voz, había llegado al final del pasillo donde era como un callejón sin salida. La voz dejó de sonar, se dio por vencido. Se dio la media vuelta para retirarse del lugar.

Tuvo mala suerte, la misma arma con la que forzaron la entrada golpeó contra el metálico traje de Freddy, no tuvo mucho tiempo para reaccionar pues le fue arrebatado el control del traje. Cayó en el piso sin poder hacer nada para detener tal acto de agresión del misterioso hombre que lo despedazaba.

No tardó mucho, en muy poco tiempo el traje estaba destruido y vencido en el frío y polvoriento suelo del establecimiento. Volvió el silencio por un segundo, el llanto de un niño rompió con el sepulcral silencio que reinaba.