Luna
El frío ha desaparecido. Empiezo a tener calor. Demasiado calor. Es como si estuviera... No se... ¿En las nubes? No se como explicarlo. Pero ya se porqué le gusta tanto a la gente. Porqué en los libro que he leído dicen que sienten mariposas. El por qué de todo... No me arrepiento de nada... Necesito respirar, pero no quiero parar.
No para de juguetear conmigo. Me sujeta la cintura con una mano y con la otra en el cuello apretándole hacia él. Me encanta esta sensación, y yo tampoco puedo estarme quieta. Con una mano le cojo del cuello para que no me deje y con la otra le acaricio el pelo. Bueno... lo que se dice acariciar... más bien tirar.
Él quiere controlarme y yo le dejo. Jugetea con mi boca. Me acaricia los labios con su lengua y me muerde el labio inferior. Pero hay algo que me mata: cuando me acaricia suavemente la lengua con la suya y me obliga a abrir la boca para dejarle pasar.
No se cuanto tiempo ha pasado desde que estamos así, pero ha dejado de nevar y parece que se está haciendo de noche.
Va disminuyendo la velocidad. Su lengua ha desaparecido de mi boca y ya no siento sus labios sobre los míos. No quiero abrir los ojos, pero me obligo a hacerlo. Miro a sus pies. Me da un poco de vergüenza mirarle a los ojos.
—Me gustas —me sorprendo. Le miro a los ojos —Me gustas, Dragneel.
No se que contestar. He esperado este momento mucho tiempo y me lo he imaginado varias veces, y ahora me quedo en blanco.
—A-a mi... —desvio la mirada y empiezo a pornerme colorada —ta-también me... —trago saliva —A mi también me gustas...
—Es obvio... —dice con una sonrisa en la cara.
—¿A-a qué te refieres? —digo mirandole.
—Solo digo que después de lo que me has hecho es obvio que te gustaba. Todavía me duele, ¿sabes? —dice frotándose la parte de la cabeza donde le he tirado del pelo.
—Adiós —digo dándome la vuelta y dirigiéndome a casa de mis padres. Ahora mismo soy un tomate y una estufa...
***
Ha pasado una semana desde el beso y no he salido de casa de mis padres desde entonces.
—Luna —dice oka-chan abriendo la puerta de mi cuarto —. Cielo, tienes que ir al gremio. Ha pasado una semana.
—Luna Dragneel!! Vas a ir al gremio como que yo me llamo Natsu Dragneel!! —dice abriendose paso entre oka-chan y la puerta.
Estoy acostada en la cama boca abajo con la cabeza enterrada en la almohada. Levanto la cabeza lentamente y miro a oto-sama. Parece que se ha asustado de mi.
—Lo-lo siento cariño... Pu-pu-puedes seguir du-du-durmiendo —oka-chan se acerca a mi y se sienta a mi lado.
—Tienes que volver al gremio. Todos están preocupados por ti y no paran de preguntarnos que te pasa. Hasta Storm lo ha hecho —vuelvo a enterrar la cabeza en la almohada.
—Entonces si que no voy...
—¿Porqué? ¿Qué pasó en la cita?
—Na-nada!! No pasó nada!!
—Vamos Luna —me pasa la mano por la espalda —, tienes que volver. Charlie y Gale han venido varias veces a preguntar por ti. Dicen que no han hecho ninguna misión ya que tú no estabas —levanto la cabeza.
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Del Amor al Odio hay un solo Paso [Fairy Tail Nueva Generación]
Roman d'amourAviso!! En esta historia no se ha desmantelado Fairy Tail y no ha pasado nada con Álvarez. A lo mejor cuento con algunas cositas de lo que está pasando ahora. P.D.: He contado con la saga de Tártaros, con que Zeref es hermano de Natsu y que Natsu es...