Otra noche más, pero esta es diferente.
Esta noche las estrellas llueven del cielo y con ellas miles de deseos a la espera de hacerse realidad.
Hoy ponemos nuestra vista en el cielo y como niños ilusionados pedimos aquello que anhelamos con toda nuestra fuerza, cerramos los puños y con nuestro corazón en las manos deseamos en vano, como si por desearlo con mas fuerza se fuesen a cumplir, ja.
¿Pero en eso consiste la vida no? En soñar y cumplir los deseos y esta noche yo he soñado y he pedido el mejor deseo. Pero me quedare este deseo en secreto para mí, no vaya a ser que no se cumpla.