El Charco
Ya está entrando la noche. Tiene rato que estamos caminando por esta zona, aún no encontramos a Rosette, pero presiento que está cerca. Es como si algo me dijera que hay alguien cerca. Alguien que no logro ver. La verdad puede que esté confundiendo el querer con el sentir. Puede que en realidad quiera que todo vuelva a la normalidad pero no siento que eso vaya a ocurrir. Al menos no por ahora. Me pregunto qué estará haciendo Rosette. Tal ves esté buscando comida en alguna casa o posiblemente encontró a Christian. Cada vez que estoy lejos de ellos, me pierdo más y más en mi propio delirio.
Escucho ruidos entre los botes de basura en una de las esquinas. No llevamos nada para defendernos pero... y si se trata de Rosette o Christian. Tengo que revisar de qué se trata, puede que sea alguien que haya sobrevivido a las Sombras (así llama Richard a esas criaturas negras). O puede que se trate de otra criatura. Esas criaturas con verdaderamente rápidas y fuertes. De no ser por esa rama en mal estado, no creo que hubiéramos podido salir vivos de eso. Espero que no se trate de otra de esas cosas, o de algo más. Nos asomamos por la esquina (de un edificio grande) que conduce al callejón. He tirado una botella sin querer a lo que Richard dice murmurando:
—¡Shhh... Guarda silencio! Puede ser algo peligroso.
—Estoy lo más callada posible —le contesto en el mismo tono.
—Callate o lo que haya ahí nos matará —Me reprende.
Nos aproximamos lentamente hacia los botes de basura. Cada paso se siente como si me fuese a caer en cualquier momento, la sensación es tan fuerte que hace a mis pies temblar. No se ve nada sospechoso en este lugar. Entonces el contenedor de basura (un bote viejo de metal) cae al suelo. De él se asoma un pequeño cachorro beagle. Tendría quizás unos cuatro meses. Parece que ha perdido a su madre.
—¡Mira, es un perrito! —exclamo— esta cosita nos podría matar... pero de ternura. ¡Ven aquí pequeño! —menciono enternecida por el cachorrito, tomándolo entre mis brazos—. ¿Te perdiste? —le pregunto al cachorro casi como si me fuese a contestar.
—¿Y qué? —pregunta Richard
—¿Y qué de que?
—¿Te lo llevarás? —pregunta Richart mirándome con sus tiernos ojos verdes. Lo dice en un tono casi como reprimenda.
—Pues, ¡claro! ¡cómo podría dejar algo tan hermoso en semejante peligro! —le respondo mientras acaricio al pequeñín cachorrillo.
—¡Es tu responsabilidad eh! —abre la boca Richard— Yo no andaré limpiando sus 'desastres' del suelo...
—Eso no será un problema, yo me encargaré —le aseguro.
—Y... ¿Qué nombre le pondrás?
—...Wellington
—¿Cómo la ciudad de Nueva Zelanda?... ¿Y a qué se debe eso? —dice mientras proseguimos con el paso.
—Pues siempre quise conocer Nueva Zelanda... —le explico mientras las lágrimas se me escurren—. Mi padre me prometió que algún día viajaríamos, pero han surgido muchos problemas. Y ahora con todo esto... Ah es demasiado difícil de explicar.
—Pues yo te aseguro que conocerás Nueva Zelanda, tal vez no en este preciso instante, pero algún día irás a conocerla tú misma —me consuela Richard—. Y quién sabe, quizás yo también.
—Jajaja, Sabes... se te dan bien las palabras, a pesar de ser poco amable cuando nos conocimos —bromeo mientras me seco las lágrimas.
—Estabas en peligro, no podíamos platicar en aquel momento —se defiende mientras se le escapa una sonrisa pícara.
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BORRADA (Incluye Soundtrack)
Mystère / ThrillerPRIMER LIBRO DE LA SAGA. Imagina que cierto día te despiertas y no hay nadie en tu ciudad. ¿Qué harías si todas aquellas personas que amas se fueran? Pues de eso se trata esta historia. ¿O no? descubrelo por ti mism@. NO APTO PARA NIÑOS MENORES DE 1...