Sentimientos Ocultos - Junjou egoist

CAPITULO 12 Aclaraciones.

---Nowaki---

Me siento tan frustrado, no puedo entender porque rayos me están obligando a aceptar un compromiso que no quiero, yo al único que quiero es a Hiroki, sino es él no quiero que sea nadie, Hiroki es lo que yo amo y no pienso perderlo, no voy a aceptar a esa mujer, hablaré con ella y cancelare todo.

Además soy el príncipe, yo debería elegir con quien quiero casarme, mi padre me lo dijo, que quería que fuera feliz, sin importar la clase social, el sexo o lo económico, yo debo estar al lado de la persona que amo, no me pueden hacer esto.

-Primo del alma, mira lo que me encontré. –comento Takeshi entrando a mi oficina.
-Ahora no tengo ganas.
-Pues deberías de verlo. –se acercó y me entrego una revista.
-¿Qué es esto?
-Míralo.

Suspire pesadamente y empecé a ojear la revista. Se mencionaban mi supuesto compromiso con la duquesa, empecé a leer todo lo que decía, mentiras y más mentiras.

-Maldita sea. –masculle.
-Es genial ¿no?
-CLARO QUE NO, -grite- YO NO ME QUIERO CASAR CON ESA MUJER.
-No me digas que, -sonrió- ¿bateas para el otro lado?
-Eso no te importa.
-En fin, yo pienso casarme con el pequeño hijo de Steven.
-¿Por qué? –me sorprendí.
-Nada más, lo quiero.
-Eres un...
-En fin, te dejo que disfrutes de la noticia.

Camino y salió de mi oficina, me daban ganas de golpearlo por burlón, por creído, no puedo entender porque quiere estar con el chico, esto es una maldita obsesión.

Mire de nuevo la revista, no entiendo porque Steven hace todo esto... me pregunto qué pasaría si él se entera que estoy saliendo con su hijo.

Escuche la puerta principal abrirse y corrí hasta ella, mi hermoso Hiroki, tenía un semblante de tristeza, me acerque a él y él me jalo del brazo.

-¿Hiroki?
-Tenemos que hablar.
-¿Eh?

Me llevo hasta la sala y me aventó un periódico.

-Hiro-san puedo explicarlo.
-Pues te doy 2 minutos para que me lo digas todo.
-Hiro-san, -lo abrace- tú eres al único que yo amo, eres mi vida entera, yo nunca me he comprometido con nadie.
-¿Acaso me estás viendo la cara?
-Mi amor, -tome su mentón y me pude percatar de sus lágrimas- no llores Hiroki.
-¿Quién está llorando? –desvió su mirada.
-Hiro-san...
-ES QUE, -sollozo- ¿Por qué demonios no me lo dijiste? Creme que...
-Hiroki, -lo tome de los hombros- yo no me he comprometido con nadie, yo solo te amo a ti, y se me he de casar con alguien, será contigo.
-N-Nowaki...
-Hiro-san, por favor escúchame, te diré lo que paso.

Mi amado asintió y yo le di un cálido beso. Nos sentamos en el sofá y tome sus manos.

-Tu padre vino aquí para decirme que él se encargó de comprometerme con esa duquesa.
-¿Qué? –se sorprendió mi amado.
-Steven vino para comunicarme que debo casarme, que mi padre le pidió que me consiguiera prometida, que yo no tengo ni voz ni voto.
-Eso es...
-Hiro-san, te amo como un loco y lo sabes, nuestros sentimientos son mutuos, yo no quiero a nadie más que no seas tú. –tome su mentón.
-Pero, Nowaki esto.
-No dejaré que te separen de mi lado.
-Tú sabes que debes cumplir con la petición del rey, -miro el suelo- debes casarte.
-¿DE QUE DIABLOS ME HABLAS?
-Nowaki, tú eres un príncipe y yo tu guardaespaldas, solo piensa en eso, lo nuestro no...
-No lo digas, -lo abrace- no te atrevas a decirlo.
-Pero...
-Hiro-san, -tome su mentón- mírame a los ojos y dime que no me amas.
-¿Eh?
-Dilo, si lo dices yo me rendiré...
-Y-Yo no puedo hacer eso...
-Entonces no decidas por mí, nosotros nos amamos, así que haré lo que este en mis manos para romper el compromiso.
-Nowaki te amo pero...
-Shhh, -lo bese- nadie nos va a separar, ni siquiera tú, venceré tus temores para que sigamos adelante, no te atrevas a dejarme porque te buscaría en el fin del mundo.
-Eres tan egoísta.
-Lo soy y no me arrepiento de serlo.
-Sí mi padre se entera...
-En cuanto acabe con el compromiso hablaremos con Steven.
-Nowaki no...
-Hiro-san.
-En verdad no lo hagas, ahora como está mi padre solo empeoraría las cosas.
-Debemos decírselo Hiroki.
-Sí lo haces él...
-¿Qué ocurre? –lo mire.
-Nada, -se acurruco en mi pecho- no quiero pensar en eso.
-Te amo Hiro-san, te amo.

Él solo me miró fijamente con un hermoso sonrojo sobre sus mejillas.

-No lo diré.
-Lo sé...

---Yukito---

Estoy tan emocionado, tan feliz, nunca pensé que nuestra banda sería la ganadora, que tendríamos a un manager el cual se encargaría de que todos nos escucharan cantar, me siento tan emocionado. En cuanto nombraron "Red Rose" mis amigos me abrazaron fuertemente.

Mire a mi hermano que me dedicaba una sonrisa y Akihiko se acercó a mí, así que corrí hasta sus brazos y él me cargo.

-Ganamos Akihiko, ganamos. –sonreí.
-Sí amor mío, felicidades. –me besó.

Sin importarnos quien nos veía, Akihiko me tomo de la cintura y me beso tiernamente, yo coloque mis brazos en su cuello transmitiéndole todos mis sentimientos.

-Te amo Yukito. –susurro al separarnos.
-Y yo a ti Usagi-san, tanto.
-Me encantas. –acaricio mi mejilla.
-Nee Usami-san, no sea egoísta y compártanos a Yukito. –comento Eiri.
-Sí, ahora lo necesitamos un momento, prometemos devolvérselo. –sonrió Mao.
-Está bien, pero cuídenlo mucho, es mi mayor tesoro. –comento mi novio.
-Así será.

Caminamos hasta donde estaban los jueces junto con el señor Laforet que me miraba con bastante intriga, desvié mi mirada porque me era algo incómodo, llegamos hasta él.

-Felicidades Red Rose, me gustaría que se presentaran. –comento el hombre pelinegro de ojos color miel conocido como Laforet.
-Yo soy Mao.
-Y yo Eiri.

Estrecharon la mano de nuestro nuevo manager, cuando estaba a punto de presentarme, él beso mi mano y me miro.

-Tú debes ser Kamijou Yukito ¿cierto?

Me sorprendí cuando pronuncio mi nombre.

-S-Sí, ¿Cómo lo sabe?
-Acaso, ¿no me recuerdas?
-N-No.
-Era de esperarse, solo nos vimos unas cuantas veces hace 3 años.
-Yo...
-En fin. –suspiro- Aunque admito que como banda son muy buena, debo reconocer que Yukito tiene una voz hermosa.
-G-Gracias. –me sonroje.
-Ya lo sabíamos. –rieron mis amigos.
-Será todo un placer trabajar a su lado.
-Gracias.
-No agradezcan, ustedes han demostrado que tienen material, así que no me defrauden.
-Daremos lo mejor de nosotros.
-Eso espero, -sonrió- por favor chicos vayan a leer el contrato.

Mis amigos se adelantaron y antes de alcanzarlos Laforet tomo mi brazo.

-Ahora tendremos más tiempo para convivir y poder conocernos mejor.
-C-Claro usted será nuestro manager.
-Me gustaría que me vieras como un amigo.
-Yo...
-Aunque también quiero que me recuerdes. –acomodo un mecho de mi cabello.

Sentí como unos brazos me apartaban y me envolvían.

-Podría dejar de tocar a mi novio por favor. –comento Akihiko.
-¿Novio? Es verdad, -sonrió mi manager- los vi hace un rato.
-Yukito, ven a firmar. –comento Mao.
-Hai.
-Ya vuelvo Usagi-san.

Fui con mis amigos y leí el contrato que nos ofrecía, por un momento dude en firmar, ya que tengo el problema con lo de mi padre, pero Hiroki me dijo que no permitiría que me quitaran mi sueño, que ambos lucharíamos y yo le creo.

Al terminar nos quedamos de ver con nuestro manager el fin de semana para empezar a grabar un disco con nuestras canciones.

Akihiko me espero y ambos fuimos al parque, quería hablar con él acerca de lo que estaba pasando, él debe saberlo.

-¿Yukito? ¿Estás bien?
-Usagi-san, -lo mire- no lo estoy.
-¿Paso algo con tú padre? ¿Lo que dijo ese hombre fue verdad?

Me acurruque en su pecho y comencé a llorar.

-Sí, -solloce- sí, mi padre quiere que lo proteja pero yo no quiero yo...
-Mi niño lindo, tranquilo, -limpió mis lágrimas- no permitiré que lo hagas, no te tiene porque obligar.
-Tiene poder y...
-No lo dejaré.

No podía controlar mis sentimientos, mis lágrimas, no quiero separarme de lo que más amo, estoy enamorado de Akihiko, no quiero separarme de él.

-Akihiko, -lo mire- llévame contigo, déjame vivir en tu casa yo te prometo que te pagare cada centavo que...

Él sonrió y me beso interrumpiéndome, me beso tiernamente y yo me aferre a su cuello.

-Yukito, -tomo mis manos- por favor, quédate a vivir conmigo, no te separes ni un momento de mí, quiero que seas solo mío.
-Akihiko...
-No permitiré que te alejen de mí, así que, te secuestraré y te encerraré en mi hogar donde nadie te encontrará.
-Te amo.
-No más que yo Yukito...