Buscado por amar

Capítulo 102

-¿Es toda la información que tienes? -Neji asintió, mientras era rodeado de los de inteligencia que apuntaban hasta el más mínimo detalle.

Había sido escoltado hasta una sala completamente sellada, y una pequeña chica que no debía pasar el metro y medio había sido la encargada de cuestionarlo. Habían cámaras, que vigilaban sus movimientos, y un gran espejo que de seguro sería el vidrio templado. Neji se enrojeció al ver que era considerado peligroso, puesto que con el resto solo les bastó pedirles un informe, pero aun así agradecía que la chica con la que le hubiera tocado fuera un antiguo miembro de la organización.

-Anni -murmuró en un tosco ruso, y la chica giró a verlo- ¿Desde cuándo eres de los rebeldes del sur?

La pequeña niña movió uno de sus mechones hasta que volvió a taparle el ojo, pero aun así no le respondió. Neji la conocía porque ella había estado en su entrenamiento cuando él recién se graduó, y había sido él su tutor por algunos meses hasta que ella había logrado perfeccionar sus técnicas de ataque. La conocía muy bien, el cabello hasta un poco más debajo de los hombros y con las puntas color rojo, pésima para el ataque -es por eso que Neji se tuvo que encargar de enseñarle-, y era por eso que la ponían siempre en las misiones de espionaje e inteligencia.

-¿Alguna información extra que nos puedas proporcionar del zorro?

El chico frunció el ceño por decirle zorro y no Naruto. Anni solía tenerle mucho respeto al rubio cuando este era el centro de leyendas, pero aquí parecía tratarlo como un arma, nada más. Le enfadó también darse cuenta que todos lo trataban como arma, como una cosa y no persona. Negó con la cabeza y la chica salió de la sala diciéndole que estaría ahí un rato más hasta acabar con el papeleo, pero que mandaría a Aisha a que le curara las heridas.

-Naruto está muy lejos -comentó antes de que ella cerrara la puerta-, pero Orochimaru ha escapado y de seguro lo encontrará. Si queremos evitar una guerra debemos ir donde está él y protegerlo hasta que sea el momento.

La chica soltó un bufido, antes de responder en un suave tono de voz:- Un arma como él no necesita protección, no te precipites con tus palabras Neji-San.

Neji se quedó dentro del cuartucho al menos dos horas, Aisha vino al poco rato, pero las heridas de Neji no necesitaban tanta medicación por lo que acabaron rápido. En todo el momento, el pelimarrón sentía un mal sabor de boca por como trataban a Naruto. Haru era como ellos, tan solo lo veían como un arma que en cualquier momento podía descontrolarse y no les quedara de otra más que matarlo.

-Ya puedes salir -informó Anni, quien seguía parada en la puerta. Neji se paró y pasó por su lado arisco, pero la chica lo sujetó del brazo antes de que saliera por completo y susurró-, no digas nada sobre Naruto, o ellos no confiarán en ti y no podremos ayudarlo.

Señaló con su cabeza la cámara y Neji se movió fuera de la sala. Snake y Mir estaban esperándolo, ambos vestidos con un armamento parecido a los que él solía usar cuando estaba con los ambus.

-Sí que se tomaron su tiempo contigo -sonrió el chico-, dos horas es algo exagerado, hasta Nat en su primera vez duró menos, y estamos hablando de la chica loca.

Neji lo miró y frunció el ceño, Anni se había acercado a ellos y le había susurrado algo a Mir antes de darle una mirada e irse. La chica dio un brinco mientras corría detrás de la menor, y al final ambos chicos se quedaron solos en el centro de aquel pasadillo.

-Debes tener hambre -contestó, antes de bostezar-, la cafetería no está lejos, de seguro encontramos algo más que vegetales y papas pasadas -Neji asintió, y ambos se fueron a comer.

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-¿A qué te referías con lo que me dijiste? -preguntó Mir, alcanzando el paso de Anni quien andaba con algunos papeles de lo que sería el interrogatorio de Neji.