El hombre raro

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Pasaron tres semanas desde que empezó todo. Estuve de cumpleaños hace dos días, ya tengo once años. Hace dos semanas que me peleé con Duane, éramos como dos hermanos. La esposa de Morgan se había convertido y todas las noches nos visitaba. Era muy difícil ver a mi mejor amigo llorar por qué su propia madre lo asustaba.

Fui a buscar algo de comer en algunas casas del barrio(yo nunca comía de la comida que nos hacía Morgan, siempre me conseguía algo para mí sola) y vi a un hombre con una bata de hospital saliendo de una casa. Cojeaba mucho y tenia un vendaje, quise ayudarlo pero me dio miedo, se sentó en las escaleras para entrar a la casa y comenzó a llorar. Me escondí detrás de unos árboles que estaban frente de la casa. Lo mire por unos segundos, tenía ojos verdes y pelo corto. Escuche a una cosa, el hombre comenzó a pedirle ayuda.

-¡Ayuda! ¡Por favor ayúdame!- le gritó el hombre a la cosa.

Estaba apunto de ir a matar a la cosa, pero escuche un golpe, era el tonto Duane, que le había pegado en la cabeza al hombre con una pala

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Estaba apunto de ir a matar a la cosa, pero escuche un golpe, era el tonto Duane, que le había pegado en la cabeza al hombre con una pala.

-¡Papá! ¡Papá! Lo tengo, tengo al maldito.-le grito Duane emocionado.

Morgan salió de la casa y mató a ma cosa, luego se acerco a Duane. Corrí hacia ellos y Morgan apuntó al hombre con una pistola.

-¿Te dijo algo hijo?-le preguntó a Duane.

-Me dijo Carl.-le respondió el niño.

-¿PORQUE TIENES EL VENDAJE? RESPONDE O TE MATO.-le gritó Morgan. El hombre estaba apunto de caer por el golpe que le dio Duane, no quería que muriera.

-Tranquilo. Llévenlo a casa y yo revisaré su herida.-les dije.

-¿Y si es una mordida?-me pregunto Duane.

-Lo matamos, pero si no lo es... Se queda con nosotros hasta que este bien.-les dije cruzándome de brazos.

-Pero...-intento decir Morgan.

-Nada de PEROS, yo ya tome la decisión.-lo interrumpí enojada.

-Okay.-me dijo y lo levanto en su hombro.

Al llegar a casa, Morgan lo llevo al segundo piso. Lo recostó sobre una cama y lo amarro.

-No es necesario amarrarlo.-le dije.

-Solo por seguridad.-me respondió.

-Esta bien.-dije y mire el parche, -Veamos esto.-dije y saque el parche, olía a mierda. Era la cicatriz de algún tipo de operación o algo por el estilo, -Es solo una cicatriz de operación.-les dije.

-¿Segura?-me preguntó Morgan.

-Al 100%-le respondí.

-Okay, baja a comer algo. Yo me quedo con el y Duane.-me dijo Morgan.

-Tranquilo no tengo...-intente negarme.

-Que vayas a comer.-me interrumpió enojado.

-Haré la cena.-dije y baje las escaleras para ir a la cocina.

El hombre estuvo una hora desmayado. Cuando bajaron a comer ya estaba de noche. Las ventanas tenían maderas y sábanas para que no salga la luz y llame a las COSAS, las velas prendidas y la calle repleta de las cosas.
Yo estaba sirviendo la cena para Morgan y Duane cuando vi al hombre bajando las escaleras. Tenía una manta puesta en su espalda y se veía cansado. Le hice un plato con cena y el hombre camino hasta la sala sin decir ninguna palabra, solo observaba.

-¿Esta es la casa de Cindy y Fredy Drake?-nos pregunto.

-No lo sé, nunca los conocí.-le respondió Morgan.

-¿No es tu casa?-le pregunté extrañada.

-No, nunca lo fue.-me dijo Duane.

-Llevó tres semanas con ustedes y recién me entero.-les dije molesta.

El hombre camino hacía una ventana y intento abrir para ver a la calle.

-¡No lo hagas!-le dijo Morgan asustado,-Verán la luz. Hay más de lo normal. No tuve que haber disparado.-agrego.

-¿Mataste a ese hombre?-le pregunto el hombre raro.

-¿Hombre?-le pregunto Morgan.

-Eso no era un hombre.-le dijo Duane.

-Amigo, necesitas anteojos, son muertos.-le dije riendo, -Ven siéntate a comer.-le dije apoyando su plato sobre la mesa. Camine a la sala y me senté en el sofa, tome una historieta y comencé a leer.

-¿No comerás?-me pregunto Morgan.

-Que te hace pensar en eso.-le dije, -Ademas encontré una barra de chocolate, casi me muerden pero la conseguí.-agregue riendo, mientras sacaba de mi mochila una barra de cereal.

-¿¡Que!?-me preguntó enojado Morgan.

-Solo bromeaba jefe.-le respondí.

-CHOCOLATE ¿Me das?-me pregunto Morgan.

-Déjame pensarlo....NO.-le respondí burlándome.

-Dale chocolate ____.-me dijo Morgan.

-Pero...-intente defender mi causa.

-Ningún PERO señorita. Si no le das a Duane, mañana no saldrás.-me interrumpió Morgan molesto.

-Okay PAPÁ.-le dije y me levante del sillón. Me acerque al puesto de Duane y le pase un pedazo de chocolate, -Mañana te traeré las tripas de una cosa, quiero ver como te las comes pendejo.-le dije molesta y me devolví.

Duane me muro enojado y luego siguió hablando con los otros dos.

-Padre la bendición.-le dijo y yo comencé a reír, -¡Cállate tonta!-me gritó enojado.

-Bebesito.-le dije yo sin parar de reír.

-¡Basta!-nos grito Morgan y yo seguía riendo.

-Ella empezó.-le dijo Duane y yo no paraba de reír, cuando me detuve seguí leyendo la historieta mientras ellos rezaban.

The Walking Dead. (Carl Grimes y tu)[CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora