Entre mi Fantasía y mi Realidad

Capítulo 07

El chico de cabello cobrizo estaba bastante molesto. Sentía una rabia incontenida hacía su madre. Castigado por una semana, horribles palabras de una madre que después de ver a su hijo en condiciones terribles, aun así lo acusa de culpable por no regresar a casa a tiempo. Nunca le había disgustado tanto estar en su habitación. Por lo general estaba dentro de ella y solo, pero ahora le dolía no pasear por el parque, no poder quedarse a leer con Onew y no poder estar con Minho, ahora que recién había llegado aquí y tenía tantas dudas. Deseaba preguntarle tantas cosas.

Aun recordaba dos días atrás cuando llegamos a la casa de Onew y tardamos en convencerlo para que lo dejara quedarse. Key terminó diciendo que lo habían corrido por que Minho había declarado su homosexualidad a sus padres.

-¿Me has extrañado mucho verdad? – entraba Key a su habitación.

-Key ¿Dónde te habías metido? – dijo el chico. Key no había vuelto desde el día anterior.

-Tuve que tratar de explicarle las cosas a Minho – dijo mientras empezaba a organizar las cosas del escritorio de Taemin – pero el cabeza hueca parece que no va a entender nunca. – Decía bastante molesto – aunque entiendo sus razones – se dijo Key para si mismo. Recordaba su larga conversación con Minho y su promesa de no contarle a Taemin.

Taemin fue a la escuela el día siguiente, esperando preguntarle a Onew por Minho por que Key el día anterior no quiso hablar más sobre eso y se dedicó a leer viejos cuentos de Taemin.

-Onew-hyung – saludó Taemin al encontrarlo en el receso junto a un árbol en el patio – ¿Cómo va todo?

-Hola Taemin, ¿Tu madre sigue enojada? – dijo Onew tratando de saber por que el pequeño seguía sin aparecerse por su casa.

– Un poco, supongo – dijo algo decepcionado recordando que aun le quedaban varios días de sentencia – ¿Minho no te ha causado problemas? – dijo intentando obtener información. Sabía que Key cuidaba de que no sucediera nada raro de lo que Onew pudiera sospechar, pero aun así quería más noticias de Minho.

-No, es un buen chico y creo que hasta los vecinos lo adoran, en especial un de mis vecinitas que se ha pegado a él – dijo Onew de forma pícara.

-¿Una vecinita? – dijo Taemin preocupado.

-Jajaja, no te preocupes por eso, solo quería ver tu expresión – Onew se atacaba de risa.

-Onew –hyung, no juegues con eso – decía Taemin aliviado pero molesto.

-Soy torpe Taemin, pero a veces tengo desplantes de inteligencia. Debí suponerlo hace tiempo, digo los dos tienen el mismo nombre y son prácticamente iguales. Cuando llegó a mi casa no podía creer que Choi Minho de verdad existiera. Entonces entendí por que te enojabas cuando sugería una protagonista a su lado o lo insultaba. Es muy lindo que escribas sobre la persona que te gusta – Onew decía esto bastante seguro de si mismo mientras el rostro de Taemin tomaba diversas expresiones.

-Onew-hyung creo que estas confundiendo todo – decía Taemin intentando explicar algo, pero aun así no importaba lo que dijera. Parecía que la historia de Onew era bastante factible.

– Tienes mucha suerte Taemin, ese chico pregunta mucho por ti – dijo Onew sosteniendo los hombros de Taemin hablándole frente a frente y de una forma tan alegre.

Ese día Taemin terminó más confundido que nada. Pero contento de saber que Minho estaba bien y preguntaba por él. Salió de la escuela y fue directo a casa como su castigo dictaba para encontrar a su madre en la cocina bastante molesta.

-Tu hermano ha vuelto a hacer de las suyas – le dijo a Taemin, al ver que la observaba – Bien, se levanta tu castigo, ve a la tienda y consigue estas cosas. – Decía mientras le daba una lista de víveres que faltaban para la cena de ese día.

Taemin fue a cambiarse y bajó rápidamente, luego fue por la lista a la cocina.

-Hijo, se que no eres un mal chico – su madre decía mientras empezaba a cortar algunas verduras – pero me preocupa que siempre estés solo. No puedes andar solo siempre por que te vas a meter en más apuros y no se si pueda aguantar otro susto como el de la otra noche. Por favor ten más amigos y piensa en tu pobre madre.
Taemin solo afirmó ante el discurso de su madre y después de que ella le dirigió una sonrisa se fue directo a la tienda.

Caminaba tranquilamente por el parque de siempre hasta que sintió un golpe en la espalda.

-Taeminnie – gritaba el chico hiperactivo – tenía tanto tiempo sin verte, hasta estaba preocupado.

-Jonghyun, no deberías saludar así, mi pobre espalda.
-Bien, bien. Te daré un masaje – decía el chico mientras empezaba ha hacer presión en sus hombros.

-¿Llamas a eso masaje? Es bastante doloroso – decía Taemin tratando de librase – Ya déjame.

-Está bien, te suelto – el chico reía de nuevo – ¿A dónde vas?
-Voy a la tienda, tengo un encargo de mi madre – dijo Taemin mostrando la lista.

-Bien, entonces te acompaño, el día a estado bastante aburrido y esos pesados me corrieron – dijo Jong tomando una mochila y poniéndosela en el hombro.