¡Secretos Monstruosos!

Capitulo 1: El Encuentro

Era aquella vez en un bosque, donde caía el sol y se levantaba la noche llena de estrellas, y entre las montañas un lobo le aullaba a la luna, satisfecho sonrió por haber cumplido su último deseo...

– ¡Mamá! ¡Mamá! ¡Ya empezó, ya empezó la Novela! – Dijo una niña mimada de unos 6 años, observando a su actriz favorita.

– ¡Eso es estupendo cielo!, ya voy para allá, ¿Vale? –

– ¡De acuerdo!... Ojala ella fuera mi hermana, es tan bonita...–dijo ella, susurrando lo último, refiriéndose a aquella chica en el televisor.

Después de 6 años, he aquí una chica de 12 años de edad, un poco rebelde, pero sería...

– ¡Madre!! Ya va empezar tu novela...–Dijo con desganes...

–Ok Hija, ¿la quieres ver conmigo? –

– NO... Odio a esa tipa – Dije despreciando su nombre...

– Miliana, ¡Oye, Miliana! ¡No sigas Durmiendo! – Dijo una chica de cabello largo –Tenemos que empacar todo, ¿recuerdas?... Todo por tu culpa... ¿Sabes?, si tan solo tú no hubieras existido, nada de esto hubiera pasado... Ella estaría aquí, ¡Conmigo!... No eres más que un estorbo, ¡Un chupasangre! Un... Un ¡Vamp...! –

– ¡VAMPIRO! –Dijo la mencionada, despertándose exaltada de un mal sueño – Aff...Que tonta – dijo pegando su mano a su cara – ¿Uhm? ¡Q-que! ¡Voy a llegar tarde al colegio! – Se paró rápidamente de su cama al baño, no quería una madre furiosa golpeando la puerta de su habitación.

–Buenos días, Ma – dijo esta a los minutos ya vestida bajando las escaleras de la casa.

– Miliana, Hija, ¿Cómo estás? ¿Dormiste Bien? – Dijo aquella señora con cabello ondulado, piel morena, y unos lindos lentes para ver mejor, ella era todo lo contrario de su hija, ni en lo más mínimo se parecían, su única herencia era aquellos ojos color azabache, esta cocinaba el desayuno de su querida hija.

– He, Si, si Muy Bien – dijo Miliana esperando sentada en la mesa su desayuno, – ¿Has sabido algo de Jorsh? – Le pregunta a su madre.

– No... que lastima, ustedes que eran buenos amigos...–Dijo lamentándose, Jorsh era un buen amigo para Miliana, la defendía de todo aquel que la molestase, era chistoso y amigable, era una persona muy confiable, lastimosamente hace unos meses atrás el desapareció, dicen que la última vez que lo vieron fue en medio de un bosque por la noche y que no dejo rastro de donde podría estar, no más, que una barra de metal diciendo su nombre...

– Ya veo, me voy madre, nos vemos al rato – dijo Miliana un poco frustrada, acabando de comer, decidió irse a su infierno, el colegio, ella no quería regresar, pero su madre la obligaba a ir por una buena educación, desde que Jorsh desapareció, los compañeros de su colegio la volvieron a molestar, todos los días...

– ¡Vaya, Vaya, Vaya! ¿Pero que Tenemos Aquí? ¡Pensé que ya habías Muerto! – Dijo Sarcástica una de las Populares de su grado – ¡Te equivocas amiga! ¡Todos pensamos eso! – Empezaron a reírse como si disfrutaran verle sufrir.

– Dejen de molestarme niñitas, ¿que no se aburren de molestarme? – Dijo Miliana ya molesta de que se rieran de ella.

– ¡Hay! ¿Y por qué lo haría? ¿Acaso quieres que te de algunas razones para seguirte molestando? Mira– dijo la más popular – Tu piel, ¡tu piel es horrenda! Pareces una Momia, ¿acaso nunca sales al sol? – Dijo esta engreídamente.