◆ La luz al final del camino ◆

memoria 2 #12

Me encanta recordar lo bueno, siempre trato de dejar mis demonios atrás, de encerrarlos y nunca más dejarlos salir, porque se que aún no lograré derrotar los, pero de igual manera no lo logro, mi vida es como un carrusel, en un momento estoy en lo alto y siento que nada me puede derrotar, pero luego, estoy cayendo y es ahí cuando me hundo más y más, es ahí cuando el carrusel se daña y queda en lo más bajo.
Tengo un oscuro secreto, NADIE lo sabe, y ese secreto se ha convertido en uno de mis ahora tantos demonios, es una carga tan pesada, es una culpa que me sigue día tras día, y ahora eso me recuerda lo débil que fui, que soy y que probablemente no deje de ser.
A estas alturas, ni yo misma me conozco!
Quisiera pensar que podré superar esto y que solo es una etapa de mi vida, pero el dolor, la devastación, la melancolía, la depresión y muchos problemas más, me hunden día con día, y yo no hago nada para detener esto.
Es como si ahora estuviera muerta (y así lo es), el cuerpo muere cuando no hay alma, el alma es esa luz que te da la fortaleza de seguir, esa que te da ese toque de no se que, esa que te hace brillar como nadie lo hace, pero lastimosamente mi alma se apagó, y ahora no se como volver a encender esa luz que irradiaba con fuerza en mí.

Recuerdo una navidad en la cual Emilia, Fiorella y yo estábamos juntas, parecía como si nada ni nadie pudiera separar esas tres almas, ese día fue... no lo se, no se como describir la alegría que esa niña transmitía con solo una mirada, con una sonrisa hacia caer el mundo a sus pies, esa niña que todos pensaron que iba a superar lo todo, pero ahora esa niña es débil, la luz de sus ojos ya no está, su sonrisa ahora es falsa ya no tiene esa alegría que solía llenar un estadio entero, ya no queda nada de esa niña ya no existe, ahora existe una Celeste solitaria, reservada, triste y opaca.
Recuerdo mis cumpleaños y los de Fiorella, todo era tan perfecto, con Gabriel, Emilia, Fiorella, Julia, Karol y yo, JUNTOS CONTRA EL MUNDO y ahora estamos todos distribuidos por todas partes, ahora ya ninguno sabe como estar cerca, ahora lo que queda de eso son RECUERDOS y nada mas que eso.
Recuerdo los días de la madre y del padre, el día del niño, vacaciones, lo recuerdo todo, pero de pronto no recuerdo nada, en momentos esos recuerdos invaden mi mente como bombas y en otros solo explotan y no queda nada de ellos.

Ahora que estamos nosotras cuatro juntas, no se si sea la palabra correcta, pero es la que por el momento me gusta creer.

Me gusta el sabor que va tomando todo, uno de mis demonios esta descansando, y a eso me refiero con que ellas han tomado una actitud diferente, ya no hay tantos gritos, me gusta como se está poniendo todo, ahora el demonio que descansa en mí, es ese el cual no respetaba a nadie, ahora solo espero que no despierte nunca.

Todo va de maravilla, Brandon es la persona con la cual me gustaría compartir mis días, lastima que no tengo el valor para decirle lo que siento por él.
En el colegio todo va bien, a comparación con principio de año, ahora soy más sociable, en mi salón ya tengo amigas, es un grupo de más o menos 10 chicas incluyéndome, le hablo a casi todos los del salón y eso hace descansar a otro demonio, es una carga muy grande siempre ser indiferente con todos, era muy grosera y odiosa con todos (aún lo soy, pero ya no tanto).
Me gusta todo los cambios que ha tenido mi vida.

Ahora si nada podría estar mal.