Lindo Conejito (Adaptación Hyunghyuk)

Parte 1/2

¿Por qué diablos la agencia de Starship lo hacía salir de madurada por los ensayos? ¿No les bastaba con qué entrenará el día y en los fines de semana sin descanso?

Los miembros de Monsta X habían ido a sus apartamentos a descansar, pero Minhuyk decidió ir a casa en lugar de al apartamento. Quería dormir. Y la cama más cómoda era la de su casa, no la de un pequeñísimo apartamento de hotel

Desgraciadamente el chófer había perdido el día libre. Y Minhuyk tuvo que irse caminando a su hogar. Maldición

Al caminar por las deshabitadas calles de noche, una esponjosa bolita negra lo sorprendió al pasar a su lado y que ésta se moviera hacía él. Casi soltó un grito por temor a que fuese un fantasma. Pero rápidamente se tranquilizó al ver unos brillantes ojitos iluminados por la luz de la luna, observándolo.

De la cabeza de aquella criaturita salieron dos largas orejitas del mismo calor negro de el resto de su cuerpo.

El platinado nunca había sido muy fanático de las mascotas o los animales, pero este en especial llamo su atención, le pareció realmente adorable.

-Ven, conejito, conejito.
-se agachó a su altura y comenzó a pequeñas palmaditas a sus manos para que el animalito se acercará- Vamos, cosita preciosa.
Ven con Min, lindura.
-Al notar que el conejito se dirigía hacia él con pasos lentos y pequeñitos, lo tomo en brazos y continuó su camino a casa.

Esperaba encontrar alguna una tienda de mascotas abierta a esa hora para comprar algo de comida especial para conejos.
Para su desgracia, no encontró ninguna, así que al llegar a su casa le dio algo de avena, que el conejito comió luego de haberlo olido durante unos minutos. Le dio también un tazón lleno de agua. Al terminar, le coloco una manta en el sofá que estaba en la habitación y lo puso allí.

Con cansancio volvió a su cama. Mirando las estrellas por la ventana abierta, pensando en su familia, su madre, su padre. Los extrañaba tanto. Había veces en las cuales simplemente deseaba hecharse a llorar al recordar que ellos no estaban con él. No todo el tiempo podía contarle a sus compañeros de Monsta que se sentía triste y desolado al no tener a su familia allí.
Quisiera tener un amigo íntimo que no se aburriría cada vez que le hablará de sus penas y de lo solo que se sentía. Que lo escuchara y consolarla. O simplemente que no se quejara de que hablaba mucho.

-Deseo tener a alguien que me haga sentir menos solo... Y si es posible... enamorarme.
Susurro, sin darse cuenta que en ese momento, una estrella fugaz pasaba por ahí. Y se durmió.