sonrisa de cristal (tsukkiyama) -hiatus

capitulo 1: primer día de clases

Era el primer día de clases más que nerviosismo sentía un fastidio ir a clases y tener que soportar que lo rodearan una o dos chicas preguntando su número telefónico, cualquier chico hubiera deseado que le pasara eso pero tsukishima no era cualquier chico. Salió de su casa huyendo de su madre que no paraba de decirle lo orgullosa que estaba y recalcándole que fuera bueno con los demás e hiciera muchos amigos, esta dejo de hablar cuando su hijo se puso su cascos se quedó mirado desde el marco de la puerta, se sentía orgullosa de su pequeño parecía tan corto el tiempo que había visto irse a la primaria tomado de la mano de su hermano mayor aunque muy dentro de ella había algo que le preocupaba y era un poco aquel carácter "especial" que siempre había tenido desde tan tierna edad aquello no lo dejaba entablar una buena amistad o relación amorosa, meneo la cabeza.

"Tal vez no ha encontrado a las personas correctas" pensó entrando a la casa para tener un día lleno de quehaceres.

Por otro lado tsukishima estaba absorto con la música, era la única forma de estar en paz, odiaba el ruido de la ciudad las voces bulliciosas de los desconocidos o el sonido de los claxon en la calle por el tráfico mañanero, su único escape era la distracción que le brindaba la música y la voz del artista, se detuvo en la parada de autobuses una de las cosas que más odiaba era tomar un autobús lleno, con mucha mala suerte pudo ver cuando se acercaba el autobús y el monto de personas que esperaba junto a él, chasqueo la lengua en reproche.

Tuvo que aguantar 15 minutos siendo apretujado por personas desconocidas, subió el volumen de su celular intentando ignorar las voces que lo rodeaban, eran molestosas y más de las estudiantes que estaban a lado de él, podía sentir las miradas indiscretas que daban.

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No dejaba de impresionarse un poco por los enormes edificios que conformaban a la universidad todos de un color café pastel, con varias ventas panorámicas, y grandes espacios verdes con árboles de lado a lado al igual que flores dándole un toque colorido, no tardo más que unos segundos para que algunas chicas posaran sus miradas curiosas sobre él devorando cada centímetro y retándose entre ellas para ver quien se atrevería hablarle, pero esto fue impedido por el fruncido leve que el rubio daba, no tenía las ganas de hablar con nadie, su prioridad era encontrar su salón que hayo en menos de dos minutos, al entrar observo que un poco de gente había llegado, miro su celular solo faltaban 10 minutos para comenzar la clase busco el lugar más apartado de los demás pero donde pudiera escuchar perfectamente al maestro y ver el pizarrón, se sentó casi al final de la tercera fila saco un libro que aún no había terminado con el fin que nadie se acercara a él.

Luego de dos hojas y rendirse por no poder mantenerse concentrado guardo el libro, sacó los auriculares, dio una mirada a los que serían sus compañeros había más chicos que chica, todos un poco nerviosos se hablaban del reto que había sido haber pasado el examen y que les esperaba un camino espartano por recorrer, "los típicos idiotas presumidos" pensó el rubio volteando a ver del otro lado, encontrando al que era su vecino un chico de cabellera castaña que estaba amarrada por una simple coleta, y unas pecas se veían desde su mejilla izquierda, el chico pasaba ojeando un manga, este subió la mirada encontrándose con la de tsukishima pero al segundo que conectaron el pecoso la bajo rápidamente avergonzado.

El profesor apareció, los murmullos se silenciaron, tsukkishima por fin podía estar tranquilo, luego de terminar las clases reviso su horario su siguiente clase era de anatomía se levantó aún tenía que buscar el otro salón, estaba sacando sus auriculares un grupo de chicas lo rodearon con miradas curiosas llenas de energía, sabía que se avecinaba y eso le era un terrible fastidio.