Capítulo 1

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Alia se sintio la persona mas afortunada del mundo al recibir aquella carta. Sin embargo, la niña no sabía lo que acontecia ese documento. Al mirar el sobre, su padre,  sonrió euforicamente, buscando a la madre de la niña que se encontraba haciendo sus tipicas labores de dueña de casa. Ella se volteo al oír que su esposo llamaba a su nombre, el hombre levanto el sobre y Zara, la mujer, solto un rotundo no al identificar el papel que Neil tenia en sus manos.

-Zara, por favor, no puedes negarle una opotunidad como esta a nuestra hija. No puedes negarle su tarea, lo que tiene que hacer- dijo Neil, sentandose y pasandose frustrado la mano por el cabello que contenía unas pocas canas producto de la edad que el hombre tenía.

-Puedes olvidarlo, no mandaré a nuestra hija a la boca del león- replico Zara, fregando desesperadamente un traste de la cena. Su esposo se acercó y tomó sus manos para tranquilizarla.

-Tranquila, podremos ir a hablar con Albus y trataremos de llegar a un trato-

-Solo tiene 11 años- dijo la mujer. Alia, habiendose escondido tras un mueble escuchaba atentamente la conversacion que tenían sus padres.

-¿Y si convencemos a Albus de dejarla ingresar cuando sea mayor?, como fui profesor podríamos enseñarle los tres años anteriores a su llegada aquí en casa y luego podría irse. Estará lista para entonces, a eso de lo que te refieres- Neil hacía intentos de que su esposa accediera, los cuales creía que eran en vano.

-No lo sé, Neil. Ese lugar no es para nada seguro...ella no puede hacerlo-

-Podemos llegara un trato, Zara. Siempre se puede- insistió su esposo.

-Ya tome la decisión-

-Pero yo también soy parte de esta familia y debemos llegar a un acuerdo-habló Neil- te lo repito, podríamos dejarla ir cuando sea mayor.

-Podría marcharse a los 14, ni más ni menos. Pero con respecto a lo otro, no puedo acceder- respondió Zara en un tono resignado a la petición que le proponía Neil.

Soltándose de su esposo, sonrió dirigiendo su mirada hacia su hija, que oía escondida tras la estantería. Hace poco que sus padres se habían dado cuenta de las peculiares habilidades que poseía Alia, y, su madre temía la llegada de ese sobre.

No hace unos pocos días se había enterado por medio de conversaciones que sostenía con su hermana sobre su sobrino, Isaac, sobre las extrañas cosas que ocurrían en el colegio.

El muchacho les había contado sobre un peculiar chico que había llegado al colegio el primer año y Zara ya se había enterado sobre todos los acontecimientos que traería ese suceso. Se sabía la historia de aquel chico, como murieron sus padres, Lily y James y como el chico sobrevivió milagrosamente. Fue difícil soportar aquella terrible perdida. Fue difícil aceptar la muerte de sus dos mejores amigos. Y ahora, más difícil será aceptar la partida y el deber que a su hija le había sido asignado

Pero ahora, era crucial esconder aquella tarea de su hija. Era crucial no rebelar las cosas de su pasado. Era crucial mantenerla a salvo.

-Sal de ahí, pequeña traviesa- le dijo a Alia comenzando a hacerle cosquillas a su hija y luego la sentó sobre la mesa cuidadosamente.

-¿Que era ese sobre, papá?-dijo la niña soltando pequeñas carcajadas.

-Ay, cariño-suspiró y acaricio su cabeza- tenemos muchas cosas que explicarte.

(...4 años después...)

Alia.

Tiré mi cabello tras los hombros mientras mis manos temblaban . Esperaba nerviosamente en una banca a mis padres que se encontraron con unos viejos amigos.

Save him [Draco Malfoy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora