-Draco sujetó los marcados brazos de su auror favorito contra la cama y le miró fijamente con esos ojos plata que hacian que a Harry se le acelerara el pulso, para luego juntar su frente con la de este y susurrar justo sobre sus labios-.
-Te amo, Cara-rajada.
-Harry se extremeció hasta la médula , pero no le dio tiempo a contestar puesto que ya tenia los acolchados labios del rubio sobre los suyos en un beso que parecía no tener final, y desde luego no iba a ser él quien se lo pusiera.
Su compañero le sujetó las muñecas con una mano sorprendentemente fuerte, mientras que con la otra le acariciaba el torso; Harry jadeaba de impaciencia cada vez que la serpiente acariciaba un poco más abajo de su ombligo, el tiempo justo para desesperar al león y volver a subir la mano hacia su pecho-.-Hurón..por favor..
-Harry miró suplicante a su rubio, quien asintió complacido de sí mismo por provocar esas reacciones en su novio; le soltó las manos y fue dando un camino de besos lento desde su apetecible cuello, bajando por su pecho y acariciando los abdominales del oji-esmeralda con los labios hasta bajar del todo; sin vacilar, metió la erección de Harry en su boca, quien recibió un latigazo de placer que provocó que acabara sentado y con el pelo del rubio entre sus dedos; este se mantuvo entre las piernas del moreno un rato, hasta que decidió que ya era suficiente. Jadeando se apartó y miro al león a los ojos, sonrió engreído-.
-Boca abajo. Harry. Ya.
-El mencionado tardó más en escuchar lo que le había dicho su novio que en darse la vuelta. Sin que Draco se lo pidiera levantó las caderas quedando con la parte trasera de su cuerpo regalando unas hermosas vistas a su chico, quien, sin pensarlo dos veces, se abalanzó sobre ellas. Acarició la espalda del auror y deslizó sus manos hasta las nalgas, poco a poco fue entrando en su uke (que no dejaba de jadear y de gemir por lo que hacia el hurón) tratando de hacerle el menor daño posible. Draco se resistió todo lo que pudo a cerrar los ojos ya que no quería perderse nada del espectáculo de sensualidad del cual era capaz el moreno, pero al final el placer pudo con él. Cerró los ojos y se echó hacia delante, besando cada parte de la espalda de Harry que alcanzara su boca-.