~•Cap único•~

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Ya eran pasadas las doce de la madrugada y trece chicos se encontraban practicando en la sala de ensayos. Todos sudorosos y con respiración agitada, pero a la vez llenos de energía y enfocados en lo que estaban haciendo.

A excepción de uno...

—Jihoon-ah ¿te pasa algo? Estás muy desconcentrado, no sigues el ritmo de la música y tardas mucho en realizar los pasos— dijo Hoshi, cortando la música.

—N-no... No pasa nada...— dijo el castaño de baja estatura bajando la cabeza un tanto avergonzado.—Lo siento... Lo haré bien.—

—No, mejor deberías ir a descansar un rato. Ayer pasaste toda la noche en tu estudio componiendo y no has dormido nada. Ve a descansar.— habló esta vez Joshua. A lo que Jihoon sin decir más se despidió de los más y se fue a su habitación.

Pero la razón por la cual estaba desconcentrado no era el cansancio.


Era el...



Con solo su presencia podía hacer que el corazón de Jihoon se saliera de su pecho. Cada vez que están juntos Jihoon se olvida de que todo lo demás existe y solo están ellos dos. Cada roce, cada abrazo y cada mirada que él le da hace que Jihoon pierda la cabeza y le salgan corazones en los ojos como en las caricaturas.

Cerró la puerta tras de sí y se acostó boca arriba en su cama contemplando el techo. Trató de dormir un poco pero le era imposible. Se movía de un lado a otro, cambiaba la almohada de lado al que estuviera más frío. Si se desarropaba le daba frío, si se arropaba todo le daba calor, y si sacaba un pie le daba miedo. Simplemente no podía dejar de pensar en el.

No podía dejar de pensar en la forma en la cual el sudor bajaba desde su frente y recorriendo su rostro hasta sus pómulos y luego descender hacia su mentón.  Algo un tanto asqueroso pero que podía hacer que Jihoon quedase completamente embobado. No podía dejar de pensar en su boca y esos labios que se entreabrían al respirar... Esos labios que se moría por besar. Aquellos brazos fuertes y musculosos que quedaban al desnudo por aquella franelilla con manga corta.

"Estúpido Choi SeungCheol...¿por qué tiene que ser tan perfecto y a la vez tan inalcanzable? ¿Y por qué no te puedes fijar en mí?" Pensó.

No era de más decir que él y SeungCheol tenían una muy buena amistad. Pues se conocían desde hace ¿ocho, nueve años? Tal vez menos, pero eso no quitaba el hecho de que ambos tenían una hermosa amistad.


De amigos...

Eso era Jihoon para SeungCheol... Un amigo. Le dolía mucho cada vez que pensaba en eso. El quería ser más que un simple amigo. Quería ser mucho más. Pero sabía que jamás lo sería. El mayor simplemente no mostraba ningún interés en el, y según Jihoon, jamás lo haría.

—Jihoonnie, ¿estás despierto? Te traje algo de comer—

Esa voz....

—N-no... Pasa, pasa— dijo el pequeño castaño saliendo de sus pensamientos.

—Debes estar muy cansado, así que...t-te hice esto...— dijo colocando una pequeña bandeja con comida en una mesa que estaba cerca de la cama. —Espero que lo disfrutes— sonrió con un sonrojo un poco notorio.

—Gracias Cheol...— dijo tomando la bandeja y terminándose todo como si nunca hubiera comido en su vida.

—Oye Cheol...¿por qué eres tan bueno conmigo? Todos dicen que soy muy malhumorado y tengo mal carácter...—

—P-pues...— "porque me gustas tonto, solo que nunca te das cuentas cada ve que me insinuo"
—Porque eres un gran amigo— sonrió algo nervioso.

—Ah, ya veo...— dijo Jihoon con tristeza en su voz.

El solo era eso, un amigo...

—Cheol tengo sueño— habló el menor de los dos mientras se arropaba con las sabanas.

—Claro... Me iré— dijo el mayor dándose la vuelta. Hasta que sintió un ligero agarre en la tela de su pantalón.

—Pero...quiero que te recuestes conmigo...—

—C-claro Hoonnie— dijo SeungCheol con un leve sonrojo.

Luengo de entrar en la cama y acomodarse cerró sus ojos y acomodó su cabeza encima de la de su contrario; oliendo el aroma de este. Vaya que podía hacerse adicto a ese aroma.

En ese momento solo reinaba el silencio. Un silencio combinado con las respiraciones tranquilas de los dos chicos. Hasta que por fin SeungCheol se decidió a romperlo.

—Oye Jihoon...¿puedo preguntarte algo?— dijo sin moverse de su posición.

—Claro Cheol, ¿qué pasa?—

—¿Tú arriesgarías una amistad de muchos años solo por el hecho de gustar de esa persona? ¿Pondrías en riesgo esa amistad que tal vez se rompa por declarártele?—

—Bueno... Si tienes tanta química con esa persona no creo haya problema. Quiero decir, si ya son amigos de hace tiempo no creo que su amistad vaya a acabar siendo está tan buena— 

—Ya veo...—

—Hazlo, Cheol— habló el castaño con sus ojos humedecidos. —Deberías confesártele a Jeonghan. Harían linda pareja...—  como le dolía...

El líder simplemente quedó en shock por aquellas palabras.
¿En serio creía que el gustaba de Jeonghan? ¿Estaba en sus cinco sentidos?

—¿Jeonghan? Pero si ni siquiera me gusta—

— Ay por dios Cheol, Jeonghan es...simplemente perfecto. Tiene un hermoso cabello largo, rasgos lindos y delicados, hermosa sonrisa, es un ángel...— era como si cada palabra que dijese se la estuvieran clavando como cuchillos en la piel. Y algunas lágrimas no demoraron en colarse por sus ojos.

—Jihoon...¿En serio eres estúpido o te haces?—

—¿P-perdón?— dijo algo indignado el mencionado

—¿Cómo es posible que no te des cuenta, Jihoon? No me gusta Jeonghan... Me gustas tú... Siempre lo has hecho...desde que te conocí me gustaste... Todo tú me encantó. Desde tus hermosos y rasgados ojos hasta tus lindos hoyuelos...— listo. Ya lo había dicho. Ya se había declarado y no había vuelta atrás.

Hubieron varios minutos de silencio en los cuales SeungCheol pensó dos cosas.
Uno, Jihoon lo había ignorado completamente y no va a decir nada. O dos, se quedó dormido. La verdad SeungCheol no sabía cuál de las dos creer más posible. Así que solo cerró sus ojos y se dispuso a dormir.

Hasta que sintió una leve presión contra sus labios. Abrió los ojos y se encontró con algo que había soñado desde siempre.

Jihoon le estaba besando. Jihoon le estaba besando en ese preciso momento.

SeungCheol no hizo más que cerrar sus ojos y corresponder aquel beso de la forma más pasional y amorosa posible. 

Era realmente placentero como sus labios se acoplaban a los del otro. Como si estos hubieran sido creados específicamente para si.

Después de unos minutos, se separaron por la falta de aire. Aunque ellos sabían que querían más. Necesitaban más.

—Entonces...¿Tomo eso como un "tú también me gustas"?— dijo el mayor con una sonrisa.

—Yo diría que mejor un "tú también me gustas y mucho"— rió el de baja estatura, acomodándose en el pecho del contrario a la vez que lo rodeaba con sus brazos y los dos caían en un profundo sueño.

Only you - One shot (Jicheol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora