Sentimientos Ocultos - Junjou egoist

CAPITULO 31 El dolor de un hombre.

---Akihiko---

Simplemente me siento destrozado, siento que mi corazón acaba de ser destruido en mil pedazos, no puedo creerlo...

No puedo creer que mi amado Yukito me haya terminado, no así, lo amo, es mi todo, me siento tan estúpido por dejarlo ir, por no sostenerlo adecuadamente, debí abrazarlo con fuerza y decirle cuanto lo amo, que quiero estar siempre con él.

¿Qué puedo hacer para recuperarlo?

Es lo que más me importa.

Yo...

Cometí el peor de los errores...

Debo remediarlo.

Pondré toda mi confianza en Yukito, le diré todos los días que lo amo, le demostraré que él es al único que yo quiero.

Le mostraré que lo amo y que estoy dispuesto a todo con tal de que este siempre a mi lado.

Me dirigí a mi auto y maneje hasta la casa de sus amigos, puesto que en ese lugar se estaba quedando, porque comenzábamos a darnos la oportunidad para estar juntos de nuevo.

Al llegar estacione el auto como pude y me acerque a la puerta y comencé a tocar la puerta con algo de desesperación.

-YA VOY. –grito Mao.

Escuche como sus pasos se arrastraban y abrió la puerta.

-Espero que tenga un buen pretexto para interrumpirme en mi mejor momento, -bufo- uno ya no puede tener intimidad con su pareja.
-CÁLLATE MAO.
-Yo también te amo Eiri.
-Lamento la interrupción, solo quiero hablar con Yukito.
-¿Eh? –me miro- Acaso no estaba con usted.
-No, él... -suspire- tuvimos un pequeño malentendido y salió corriendo.
-¿Qué? –se sorprendió Eiri- ¿Dónde está Yukito? –gruñó.
-N-No lo sé. –comente.
-Dígame lo que ocurrió. –comento Eiri.

Respire profundamente y les conté todo lo que Yukito me dijo.

-LARGO. –gruñó Mao.
-Pero...
-No quiero que se le acerque a Yukito, -comento Eiri- es como nuestro hermano y no queremos que se le vuelva a acercar.
-En verdad lamento lo que hice pero...
-Es muy tarde Usami, -me miro Mao- por favor no moleste a Yukito.
-Amo a Yukito y...
-Por favor, -rechino los dientes Eiri- si tanto lo amara no lo hubiera hecho sufrir.
-Pero...
-Nada, -grito Mao- no vuelva.

Ese chico me saco de la casa y cerró la puerta en mi cara.

Quiero recuperar a mi amado Yukito...

Pero ¿Cómo?

Debo pensar la manera de mostrarle todo mi amor y mi confianza, no puedo permitir que se aparte de mi lado, es lo que más amo y necesito.

Solo él...

---Nowaki---

Siento como si mi corazón se detuviera con esas simples palabras, con solo ver ese rostro, tan temeroso y triste.

Hiro-san siempre me juro fidelidad y que yo sería el único para él pero...

¿Escuche realmente bien?

¿Me estaré equivocando?

-¿Qué has dicho? –lo tome de los hombros.
-E-Estoy esperando un hijo de Mookyul. –murmuro.

Siento tanto rencor y enojo.

Una sensación de asco comienza a estrujar mi garganta.

Me aparto de él y golpeo fuertemente la pared hasta que mis nudillos están en un tomo purpura.

-N-Nowaki.
-¿POR QUÉ? –gruñí.
-Yo...
-¿POR QUÉ TENDRÁS UN BEBÉ DE ÉL? ¿POR QUÉ?
-N-No fue mí...
-¿Acaso no dijiste que me amabas? ¿Qué era tu prioridad?
-Nowaki escúchame.
-¿POR QUÉ DEMONIOS TE LE ENTREGASTE A ESE IMBECIL?
-Yo...
-MALDICIÓN. –volví a golpear la pared.

Sus lágrimas comenzaron a caer y solo rechine mis dientes.

Con recelo lo tome de los hombros y lo mire.

-SE SUPONE QUE ERAS MÍO, QUE SIEMPRE ESTARÍAS A MI LADO, ¿POR QUÉ ME TRAICIONASTE?
-Nowaki no es como parece yo te amo.
-No sabes cuantos años espere esas palabras.
-Es la verdad.
-¿Cómo quieres que te crea? ¿Cómo hacerlo cuando tú...?
-Es mi bebé Nowaki, yo no puedo dejarlo de lado.
-Pues quédate con tu hermosa familia. –gruñí.
-Nowaki no me dejes. –me tomo del brazo.
-La misma técnica no funciona dos veces, -lo mire- aunque te entregues a mí yo no quiero estar contigo.
-Nowaki, déjame explicarte y...
-Se feliz con tu familia y, -gruñí- yo si estaba haciendo algo de provecho, buscaba a tu mamá mientras tú te revolcabas con el idiota de...

No complete mi oración ya que me volteo una bofetada.

-Ya no buscare a tu madre, consíguete a otro idiota que lo haga por ti.

Salí del baño con un gran dolor y mi corazón completamente destruido, aniquilado, no tuvo compasión, solo dolor...

Se entregó a otro hombre, y ahora le dará un hijo.

¿Dónde quedo su amor hacía mí?

Que estúpido...

Tal vez desde el principio siempre quiso casarse con él.

Por eso me mintió ese día...

MALDITA SEA.

Que tan estúpido soy.

Al llegar a la mesa saque mi cartera y aventé el dinero a la mesa.

-¿Nowaki?
-Vamos Tsumori.
-¿Ocurrió algo?
-VAMONOS.

Caminamos hasta el auto y le pedí que me llevara a mi casa.

-¿Qué pasa?
-Nada que te importe. –gruñí.
-Su majestad yo...
-SOLO DEDICATE A CONDUCIR. –grite- Y NO TE INTROMETAS EN MIS ASUNTOS.
-Lo siento, -comento- solo quería decirle que la investigación acerca de...
-CANCELALA.
-¿Qué?
-YA NO LA BUSCAREMOS.
-Pero...
-ES UNA ORDEN.
-Sí. –susurro.
¿Para qué buscar algo que no te traerá nada?

Mejor que lo haga su prometido, tal vez le de otro hijo como recompensa.

LO PEOR...

Al llegar a la casa me encerré a mi despacho y me serví una copa de coñac.


***Flash-back***

-No te vayas con ella. –sus ojos estaban cristalinos.
-Hiroki. –lo mire y tome su mentón- ¿Por qué no quieres?
-Nowaki yo te amo...

Siento como mi corazón se acelera.

¿Esto es un sueño?

¿Realmente escuche sus sentimientos?

-Te amo, -sollozó- te amo, me gustas, ¿acaso está mal?
-No lo está. –lo abrazo a mi pecho.
-Lamento lo que te dije y...
-Ni se te ocurra retractarte, -lo separo un poco para poder verlo a los ojos- ya te habías tardado tanto Hiroki.
-Nowaki, -me miro- no me quiero apartar de tu lado, juro que haré lo que tú quieres, aun si eso implica ser un remplazo, pero déjame estar contigo.
-Tú no eres un remplazo, eres la persona a la cual yo amo.
-¿Qué? –se sonrojo.
-Hiroki, -junte nuestras frentes- te amo, eres un idiota por no darte cuenta, te he dado miles de indirectas y nunca entendiste.
-Pero tú...
-Fingí ser un mujeriego para que te dieras cuenta de tus sentimientos, y creo que fue la peor idea que tuve.
-Es verdad. –sonrió.
-Tú no eres ni un remplazo porque eres mi pareja, la persona con la cual quiero estar toda mi vida.
-Nowaki. –se acurruco en mi pecho.
-MI amor, Hiro-san, te amo, así que perdóname por cómo me he comportado, pero solo era un hombre desesperado que quería que su amado se confesara.

***Fin del flash-back***


Tome la copa y la aventé hacia la pared donde se hizo añicos.

Mentiras...

"Te amo"

MENTIRAS...

"Siempre estaremos juntos..."

SOLO SON PURAS MENTIRAS...

Maldición, me siento tan impaciente, tan aterrado...

-AGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGG. –grite- ¿POR QUÉ? ¿POR QUÉ?

Yo lo amaba, lo amo como nunca, un amor de años, sufriendo por cada rechazo, por cada "es mi deber"

No puedo, no puedo más...

¿Por qué la vida es tan cruel?

No puedo más...

NO QUIERO VERLO, NO QUIERO SABER NADA DE ÉL...

Un maldito mentiroso, eso es él...