Extraños Pensamientos

1. El rapto

Paco era mi mejor amigo desde hace algunos años, siempre confié en él ciegamente, aunque sabía que tenía algunos "extraños" pensamientos.

Yo tenía novio que también era su amigo, los tres nos conocimos al entrar a la universidad.
Paco siempre había estado enamorado de mi, pero ambos sabíamos que jamás, nada pasaría entre nosotros, yo amaba a David y anteriormente le había comentado a Paco acerca de mi fetiche (desde qué tengo memoria, me gustan los hombres gordos, y sólo ellos) y él, que no era delgado pero tampoco gordo, no entraba en esos estándares (por no mencionar otras características que le faltaban para algun día gustarme).

Cuando mencioné que Paco tenía "extraños" pensamientos, me refiero a que era un tanto pervertido, jamás, a sus 22 años había tenido novia y bromeaba todo el tiempo sobre secuestrarme y sobre los métodos que usaría para no ser descubierto, decía que construiría un sótano, etc, etc. La lista es larga...

Siempre que salía con Paco a desayunar o a cualquier sitio, David lo sabía, al igual que mi mejor amiga Marina, nunca fue algo que hiciera a propósito pero de alguna manera siempre les avisaba.

Una mañana, de principio de semestre (nuestro último semestre antes de graduarnos), me dirigía a mi clase de las nueve, en la cual estaba sola, no tenía amigos en ese grupo aún y era la única clase en la que no estaba con Marina. Bueno, esa mañana, encontré a Paco por casualidad, tomó mi teléfono celular y lo guardo en el bolsillo de su pantalón (solía hacer eso para molestarme por usarlo demasiado), me dijo que aún era temprano para llegar al aula y me pidió acompañarlo a su auto, que estaba estacionado cerca de ahí, me dijo que me tenía una sorpresa, me dijo - Sube! No quiero que nadie lo vea - al subir ví que tenía puesta una máscara, una de esas con una especie de filtro para no respirar gases, pregunté de que trataba todo aquello, pero extendió su mano para encender el aire acondicionado y lo siguiente que recuerdo es haber despertado en una cama, atada, sin ropa, en una linda y amplia habitación que jamás antes había visto...