Maratón 3\5
Pov's Azhul
La luz que pegaba en mi rostro me hizo abrir los ojos lentamente. Parpadee varias veces y talle suavemente mis ojos.
Cuando intente ponerme de pie un fuerte dolor me ataco por la espalda pese a que había dormido toda la noche en el suelo.
—Ah... — Solté pequeños gemidos de dolor mientras mi mano sobaba el lugar a dolorido. Trate de reincorporar me pero falle rotundamente en el intento.
Así que me rendí y me deje caer al suelo boca arriba.
Un di mi cara en las colchas que había puesto como "colchón" la noche anterior.— La noche anterior.. —
Recordé lo que había ocurrido. Y al instante de hacerlo el recuerdo de una hermosa sonrisa se había pintado mi mente.
Recordé como sus ojos miraban fijamente los mios.
Como sus mejillas se tornaban de un lindo color carmesí.
De como su cabello estaba ligeramente despeinado.
Y de como su sonrisa se borro de sus labios.Me levante rápidamente del lugar donde estaba al pensar en eso.
Y de nuevo un fuerte dolor me apuñalo por la espalda.{...}
—No tardamos solo iremos a comprar algunas cosas ¿Ok?— Decía mi madre mientras acariciaba mi cabello. —Esta bien pero no tarden mucho— Ella asintió y salio de la casa.
Cerré la puerta de la casa y camine buscando con la mirada al orejón.
¿Donde se había metido?
—¡Chanyeol!— busque por toda la planta baja de la casa y al ver que no había ninguna señal de vida decidí subir por las escaleras —¡Chanyeol dónde estas!—
Al no recibir respuesta, comencé a enojarme.
"Tanto le costaba contestar" me dije a mi misma.
Me dirigí a su habitación, ya que al no dar con el mientras buscaba por la casa, ese era el único lugar en donde debería estar.Sí si lo se. Yo también me sorprendía de lo inteligente que podía ser.
— Chan estas allí adentro— Se sentía como si jugáramos un juego de escondillas. Solo que sin la diversión. — ¡Chanyeol abre la puerta!— Y pronto descubriría el por qué.
Abrí lentamente la puerta, adentrando me a la pieza de mi hermano. Y como era de esperarse, su mirada estaba fija en su celular.
De repente este sonó anunciando que un mensaje había llegado. Pude notar como una sonrisa de oreja a oreja permanecía en su rostro cuando este abrió el mensaje.
Sus dedos tecleaban de forma rápida una respuesta y un leve sonrojo se notaba en sus mejillas.¿¡Es enserio!? Ni siquiera llevamos una semana aquí y ya esta muriendo por su novia.
—¡Chanyeol!— Grite mientras apretaba fuertemente mis puños. ¿De verdad era tan ingenuo?
—Hm que quieres enana— Contesto cortante. Como si intentara decir "deja de molestar me, no tienes algo mejor que hacer—
En mi ya no cabía más el enojo. La rabia. La frustración de ver a mi hermano así.
Así que me di la vuelta y camine por el pasillo. No me molestaría ni siquiera de decirle que lo que hace esta mal. Que ella lo trae comiendo de su mano. Por qué siempre la que terminaba con lágrimas en los ojos era yo.
Me dirigí a mi habitación, y trate de tranquilizar me un poco. Suspire y me deje caer al piso.
¿De verdad era tan malo el amor?