Demian

01/DEMIAN

Damian. Seis letras que describían el nombre del chico mas lindo de la clase de teatro. Dios, me encanta. Tan rudo y masculino. Rasgos dignos de un dios griego. Tengo la suerte de sentarme frente a él pero también mala suerte por que no deja de distraerme su presencia.

-Deja de mirarlo. Se está haciendo muy notorio. -Me advierte Pia, mi mejor amiga que está sentada junto a mi. Asiento lentamente y desvío la mirada suspirando. Escucho su risa y la miro feo.

Odio sentirme así, tan embobada por un hombre. Pero es que me encantan los chicos malos y Damian era uno de ellos. Cuando termina la clase todos se levantan corriendo como animales fuera del aula quedando sólo Pia y yo. Recojo mis libros y me levanto.

-¿La has terminado? -Cuestiona mientras avanzamos caminando.

-Si.

Pia sabe que me encanta leer novelas, especialmente de las típicas en las que están los chicos malos y esos rollos. Ella lo odia, no le gustan, dice que son masoquistas y poco realistas. Y bueno, es cierto, pero me encantan. La cosa es que yo siempre le digo las novelas que me dejan sin habla y hace como que me presta atención, omitiendo cualquier comentario al respecto, sin embargo, ayer le comenté sobre una que al parecer quedó colgada y quiere saber más.

-¿Y? ¿Que pasa?

-El chico se queda con la chica. -Encojo los hombros sin tomar mucha importancia.

-Pff -Se mofa rodando los ojos.-¿Ves? Siempre es lo mismo, ¿Por qué no lees otro tipo de novelas? No sé, ¿Ciencia Ficción? ¿Terror? Que se yo.

-No siempre es lo mismo. -Me defiendo, aun que la mayoría de veces si lo es. -La semana pasada leí una muy buena, el "chico malo" en realidad lo era, mató a la chica. -Digo entusiasmada.

Puso una cara de asco entonces me doy cuenta lo enferma que soné.

-Eso es perturbador Lía, repito, deberías dejarlo.

-No entiendes. Sé que sonó enfermo. -Hago una mueca. -Pero piénsalo, eso es fuera de lo común. Cómo dices, las personas están acostumbradas a leer los típicos finales felices. No el real...aún así, para eso es el mundo de la creación a través de la escritura, para crear momentos falsos en tu mente, sea posible o no en la vida real, es falso al fin y al cabo.

-Eso suena deprimente...deberías escribir un libro.

Me quedo en silencio y hago un sonido con mi garganta que no sé que significo específicamente. Seguimos caminando por el pasillo, observando a los demás hablando en sus propias burbujas.

¿Dónde estará? Me pregunto buscando con la mirada a Damian o cómo yo le digo Demian ya que es un nombre más rudo, según yo.

Vamos a la cafetería y nos sentamos en una de las mesas, Pia compra unos emparedados y mientras lo hace visualizo a Damian hablando con otro chico que no había visto jamás. Luce igual que él, sólo que con un aspecto más duro. De pronto en un movimiento inesperado, el puño del otro chico está en el rostro de Demian y comienza una pelea. Todos se amontonan sin dejar observar murmurando cosas y me comen las ganas de ir a ver pero siento que no debería.

-¿Y ahora quién murió? -Pregunta Pia dándome una botella de agua, recién llegando.

-Es Damian, está peleando. -Muerdo mi labio de manera inconsciente y Pia se ríe.

-Tu chico malo está peleando, deberías ir a sanar sus heridas después, haber si te lleva con él y te involucra en su mundo de drogas, sexo y alcohol. -Se burla.

Ruedo los ojos e ignoro su comentario. El grupo de gente se disuelve y en segundos ya no hay nadie ahí. Absolutamente nadie.

-¿Por qué no le hablas? -Cuestiona bebiendo de su botella. -Es decir, haz estado observándolo durante meses, no parece tan malo como dices tampoco. Creo que las novelas te están volviendo loca.

-No, no es por eso, no me da miedo ni nada. -Digo molesta. Aveces Pia piensa que de verdad me falta un tornillo. -Es sólo que...no lo sé, me da vergüenza.

-¿Vergüenza?

-Si, no lo sé....ya déjalo.

Cambio el tema y empezamos a hablar de otra cosa. No es que esté esperando que Damian me rapte algún día y empezar un amorío ilegal con él, pero se me hace imposible no pensar en el como el chico malo si su actitud es tan salvaje como tal.

¿Debería hacer algo al respecto? ¿Acercarme?

Me despedí de Pia por que nos tocaban clases distintas y en vez de ir a mi clase, decido ir a enfermería. Ahí debería estar. Asomo mi cabeza por la puerta y lo veo. Está con la nariz sangrando y su ropa rasgada viéndose malditamente sexy.

-¿Que necesita? -La voz de la enfermera me saca de mis pensamientos y me pregunto qué responder. Vacilo un poco la respuesta y al fin se me ocurre una.

-Me...me duele la cabeza. -Miento ocupando todo mi talento aprendido en la clase de teatro, rezando para que funcione.

-Bien...-Habla no muy convencida acercándose ami. -No tienes fiebre. -Declara tocando mi frente.

-Aún así me duele la cabeza. -Insisto entrando, sentándome al lado de Damian. Él no presta demasiada atención.

-¿Ha ocupado protección?

-¿Que? Eh...no, no es eso. -Frunzo el ceño un poco incómoda. -¿Puede traerme una pastilla o algo? De verdad me duele la cabeza, por favor...

Ella asiente entrecerrando los ojos y le agradezco. Abandona la sala y me quedo sola con él. Por fin.

-¿No te duele la cabeza, cierto? -Pronuncia mirándome divertido.

Una sonrisa se escapa de mis labios. Es la primera vez que me habla y es hermoso. Se siente genial. Espectacular diría yo.

-¿Te pasa algo? -Interrumpe mis pensamientos y siento que el calor sube a mis mejillas.

-Ah, no...es sólo que de verdad me duele la cabeza. ¿Que haces tú aquí?

-Me he peleado. -Dice simplemente. Esperaba una reacción más salvaje, no sé como: "Un imbécil se metió conmigo" o al menos una negación prepotente como "No es tu jodido problema".

-Uuh, que mal...¿Y por qué ha sido? Si es que se puede saber. -Trato de no incomodarlo.

-Me dijo que me quería golpear por que según él, hice llorar a su hermana. Le dije que no quería, por que eso es de animales ¿Entiendes? -Asentí un poco asombrada por su tranquilidad y seguridad al hablar. -Él me pegó primero, no soy imbécil, tuve que defenderme.

Asentí lentamente mientras observaba su poco interés hacia el tema, pareciera como si nada hubiera pasado. Curva sus labios hacia arriba como dándome un gesto de tranquilidad que recibo con cierta perplejidad.

-Bueno niña, aquí está la pastilla. Te aconsejo ir a un ginecólogo...sabes a lo que me refiero. -Me da una mirada de advertencia y observo de reojo a Demian marchándose.-Hoy en día los embarazos juveniles vuelan.

-Mh, si, como diga. -Hablo poniéndome de pie. -Adiós, gracias.

Corro hacia afuera pero mi inútil intento de encontrarlo se esfuma cuando no lo veo en ninguna parte. Me mantengo parada, las personas pasan a mi lado con sus mochilas y lo único que hago es preguntarme como llegué hasta aquí.

---VOTEN PORFAVOR🙏🏻🙏🏻🙏🏻❤️