Stone Hard, Machine Gun | Eric Coulter Fan Ficción

Dos

Estoy hablando en voz alta sin decir mucho

Ignoré a Eric el día siguiente. Con los iniciados haciéndolo genial en sus simulaciones, encontraba relajante tener un día tan fácil. Solo había una cosa rondando mi mente, la misma cosa que causó la pequeña cantidad de bilis subir por mi garganta. El estrés me estaba consumiendo, y tragué duro para sacar la preocupación de mi mente.

Cuando la gente explicaba este problema como "un mal momento", estaba exactamente en lo correcto. Hace una semana, me sonreía a mí misma en el espejo solo de pensar en ello. Pero ahora, después de anoche, lo odiaba. No quería más que huir con Eric y esconderlo de Jeanine. Ella le estaba lavando el cerebro, y yo lo necesitaba más que ella."

"¿Hey Lu?" la voz de Tris se escuchó vagamente a mi espalda.

Solté mi fuerte agarre en la mesa y me volteé a verla a ella y al resto de los transferidos.

"¿Sí?" pregunté, completamente distraída.

"Ya terminamos de correr. ¿Qué quieres que hagamos ahora?" preguntó.

Observé la cara de todos. Jóvenes, sin idea de sus futuros. No podía hacer más que observar mientras la gente a mi alrededor eran arrojadas a este lío.

Si enfrentara a Jeanine, no sabría lo que haría Eric. Lo amo, pero no puedo confiar en que me proteja. Me sentía más vulnerable ahora de lo que nunca me había sentido. Si aceptara, entonces sería parte del asalto a personas inocentes. ¿Cómo podría escoger? ¿Por qué Eric tenía que hacerme elegir?

Mi mente mantenía mi desafío silencioso, pero mi corazón me ordenaba sostener a Eric fuertemente y nunca dejar su lado. Sabía que sin él, no podía garantizar mi seguridad. Pero no podía conformarme con la locura de Jeanine.

"Um, ¿por qué no toman un descanso por ahora chicos? Han estado trabajando duro, vayan a tener un descanso. Encuéntrense conmigo aquí en dos horas."

"¡Gracias Lucy!" Christina dijo.

Ella y Tris conectaron sus brazos y dejaron la habitación con sus compañeros, y no pude evitar sentir el tirón en mi corazón a causa de mi mejor amiga.

Chrissy estaba en su apartamento, pintando las uñas de sus pies en el baño cuando entré. Ella me saludó con una sonrisa y una botella de esmalte naranja.

"Podía oler esta cosa desde el otro lado de Osadía. Pensé que podría darme una o dos capas en mi descanso." Bromeé.

Ella ajustó su asiento en el filo de la tina y limpió un poco de esmalte de su dedo gordo.

"Sí, sabía que vendrías eventualmente."

Me senté en la tapa cerrada del inodoro y comencé a trabajar en mis propias uñas, dejándola comenzar la conversación.

"Finalmente me van a poner a cuidar el muro. Comienzo el lunes."

"¿En serio? Eso es genial, ¿estás emocionada?"

"Ugh, ¡sí! Me estoy volviendo loca aquí. Voy a comprar comestibles todos los días solo para salir de Osadía. ¡Oh, lo que me recuerda! Compré este queso raro de Cordialidad, me olvidé cómo se llama pero huele a medias sudorosas y-"

Antes de que ella incluso pudiera terminar, mi estómago eruptó del sonido de queso oloroso. En un instante, hice una mueca y salté del inodoro, abriendo la tapa justo a tiempo para depositar mi desayuno en él con un tirón.

"Whoa, ¿estás bien?" Chrissy preguntó, agarrando el final de mi cola de caballo y sosteniéndola fuera de mi cara.

Vomité un par de veces más antes de contestarle.