Toda dama desea una bestia en la cama. Una bestia que la mire como un león mira su comida luego de estar días sin comer. Una bestia que la devoré con amor y pasión. Una bestia que le de la seguridad de que siempre que este entre sus brazos, nada le pasara. Una bestia tan fiel como un león a su manada. Una bestia que saboree cada rincón de su piel. Una bestia que pelee por su dama ante todos y contra todo.
-Jhonwil Meléndez Avilés.