diabolik lovers (yaoi)7w7

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Era un dia más en la mancion de los sakamakis, pero no cualquier día sino que era ese el momento especifíco donde El Albino se daba cuenta por primera vez de sus sentimientos hacía su mayor

-Tsk,Diablos desde hace tiempo siento este sentimiemto cuando estoy al lado de shu- se dice a sí mismo sonrojado por las palabras que estan en su mente.

Mientras el sigue meditando,El mayor duerme placidamente sobre el Enorme sófa de la gran sala de Estar

-Y ¿qué pasaría si lo beso?- Se enfado rápidamente consigo mismo por decir tales estupideces, El no era gay ni nada por el Estilo.

-vamos subaru solo hazlo, Pero y sí se enfada conmigo,Hazlo no lo pienses más- Subaru no sabía que hacer, ya que su difusa mente lo  confundía aún más de las desiciones que el quería tomar, anhelaba besarlo,pero a la vez este tenía miedo de la reaccion que El Mayor pudiera tomar hacía el; El albino Observo Al Rubio que yacía sobre el Sofa de esa enorme Mansión, se veía tan Hermoso  y a la vez Tan Prohibido. Por que Vamos, Un Romance ya en sí; entre Hermanastros era imposible, pero al ser ellos Hombres lo dificultaba aún más Sería casí imposible y esto entristecía cada vez más a el Menor

Por otro lado El Mayor sentía lo mismo por El Albino, Su corazón Latía como un loco cuando miraba a El menor, con aquellas Delgadas pero sonrojadas Mejillas. que le ponían duro al verlas y tener pensamientos obscenos de como se verían esos Hermosos y sonrojados Cachetes Succionando Su Gran y Erecta Polla, sí a el Le gustaba su Hermanastro, pero por que nunca lo a dicho? No cree que Subaru pueda corresponder a sus sentimientos o Alguna otra cosa por igual

-No ya no puedo mas esos labios de shu son tan tan .... No que me pasa no puedo seguir tengo que salir de este lugar del lado de shu... O esto se puede descontrolar...- exclamó el albino en medio de sus tormentosos pensamientos.

Tu no puedes controlar ese sentimiento eso lo controla el corazón
¿que debo hacer?
Sigue tu corazón Shuu haz lo que diga tu corazon....

El rubio se acercaba lentamente al sofá donde adyacia el menor, sus labios picaban por probar a Subaru.
Corrientes electricas pasaban por su cuerpo en ese instante