LETRAS Y CAFÉ - | YEWOOK |

S E I S

« Cuando un loco parece completamente sensato, es ya el momento de ponerle la camisa de fuerza. »

—Edgar Allan Poe. 

Jong Woon observó su imagen en el espejo, satisfecho. Le gustaba como se veía. Se veía como una persona nueva, incluso se sentía feliz. ¿Ryeowook? ¿quién es Ryeowook?

Jong se sonrió a sí mismo y tomó su teléfono. Marcó al último contacto « S » 

—Suzy.

—¿Quién habla?

—Soy Yesung

Colgó. El chico suspiró con pesadez y llamó de nuevo.

No contestó.

Llamó otras cinco veces.

No contesto.

Decidió mandarle un mensaje.

Suzy, hablemos, por favor.

Estuve mal y tú tenías razón.

Veámonos en el parque, ¿quieres? 

Mandó el mensaje. No tuvo que esperar mucho para recibir una respuesta.

De acuerdo, voy para allá.

Jong guardó su teléfono y salió de casa. 

Ese día, Mouse Rabbit no abrió.

—¿Lee Sungmin?—preguntó Ryeowook emocionado.

El rubio asintió.

—¡Por dios, me encantan tus libros!—alegó el pelinegro. 

—Entonces, ¿quieres que publiquemos tu libro?—cuestionó Kyuhyun.

—Así es—el rubio sonrió.

—Nos encantaría, pero lamentablemente tenemos mucho trabajo encima—se disculpó Kyuhyun.

Ryeowook hizo un puchero y jaló la manga de la camisa del castaño.

—Kyuhyunnie, por favor...

El menor suspiró y se cruzó de brazos.

—De acuerdo—se rindió Kyuhyun.

Los dos chicos sonrieron.

El rubio salió de la oficina. 

Ryeowook golpeó el brazo de Kyuhyun.

—¡Auch!—se quejó el castaño.

—Mentiroso.

—¿Disculpa?

—Eres un mentiroso, Cho Kyuhyun. Tenemos poco trabajo.

—Es que necesito tiempo para planear algo con mi Wookie.

El castaño lo abrazó por la cintura. Ryeowook le miró con una sonrisa tierna.

—Me das diabetes, Kyu.

Kyuhyun le depositó un beso en la nariz y juntó sus frentes, sonriendo tal idiota enamorado.

—Te amo Wook.

—Te amo Kyu.

—¿¡QUÉ MIERDA TE PASÓ, JONG WOON!?—gritó Suzy, manoseando su cabello.