mi nuevo hogar

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EH vuelvo al mismo lugar a donde aquel idiota se encontraba sentado, (la esquina de mi cama).
- qué ha pasado, porque me esta pasando esto, sera el calma? No le abre hecho nada
-Leila. Vuelvo ha escuchar oh Dios mio olvidaba que mis padres esperan en la puerta. Salgo rápidamente de la habitación,bajo las escaleras de pronto las manos me sudan,  al fin llego a la puerta y cuando abro.
- donde estabas, teníamos mucho llamandote. Dicen entrando
- durmiendo mama que mas puedo hacer? Mentí Por lo que decido subir a dormir, esta vez enserio.

Dos horas después y no. No logro conseguir el sueño, estoy nerviosa, sudada y aterrada, ya quiero que esto pase. Y hay me quede profundamente dormida.

Me despierto por mi alarma de ir a la escuela, me levanto luego de varios minutos de luchar con mi cama me dirijo  ala ducha,y  preparo la tina, quedo desnuda y me entro sin mas, luego de 20 minutos salgo ya relajada, salgo del cuarto de baño, me cambio, bajo a desayunar, cojo mi bolso y me voy, varias cuadras y  por fin llego. Cojo mis libros del casillero y entro a mis clases.
...
Soy la primera que sale al escuchar el timbre, como siempre esta vez no espero a Camila, sino que salgo con verónica, Camila decidió quedarse un rato mas, me pregunto a que se debe? Caminamos hasta la cafetería yo escojo una mesa mientras que verónica va por el armuerzo, luego de ver tantas mesas repletas al fondo estaba una, parecía la única que estaba desocupada. Sin pensarlo dos  veces me dirijo hacia la mesa, me siento y al instante siento unos ojos mirarme, no es como que también lo este mirando, es que siento su mirada sobre mi, lo ignoró y sigo haciendo lo que hacia (nada), veo que verónica esta caminando hacia mi con nuestra comida.
- acaso no encontraste otra mesa? Dijo tomando asiento y dejando la comida en la mesa.
- porque no la buscaste tu? Pregunte irónica.
- esta usted de muy buen animo hoy. Me respondió con una sonrisa
- te aseguró que si. Dije comiendo mi armuerzo
- como vas con tu novio? Por primera vez preguntó. No encontraba que preguntar
-súper bien. respondió sin mas
Hablamos de cosas no importantes y hací se nos fue el receso.

Ya nos encontrábamos en nuestra ultima clase (biología).
- señorita Leila , podría usted decirme que tan importante es lo que le cuenta a la señoritas verónica y Camila? Preguntó el Prefesor.
Nerviosa no se que responder, mis manos sudan y el profesor me mira esperando la respuesta.
-mmm, les enseñaba lo importante que es la biología. uff  - aja y que tan importante es? Vuelve a preguntar. Contra-ataca - eh. Y hací sonó el timbre, mi salvación! Dije inaudible. Cojo mis útiles y salgo evitando el profesor que me mira con cara de " esto no se queda hací", no espere a verónica y menos a Carolina ya que el profesor las llamó para hablarle de lo sucedido. Estoy saliendo al estacionamiento cuando nuevamente siento su mirada, el mismo chico que me observaba en la cafetería,su mirada era penetrante, aterradora, trato de evadirle y camino aun mas rápido de lo que suelo caminar, salgo de ay como puedo, cruzo varias cuadras y llego a casa. Cuando llego subo a mi cuarto, me despojo de mi uniforme y me meto a la tina que ya prepare, me relajo pero no puedo dejar de pensar en aquel chico que me miraba en el estacionamiento, parecía nuevo en la escuela pero me aterraba. -sera el mismo idiota que entro a casa anoche?
-sera el mismo?
Son preguntas que rodean por mi cabeza, luego de 15 minutos en la tina, salgo y me visto con un mini-vestido de flores rojas, el cabello suelto y mis zapatillas rojas. Cojo mi bolso y salgo ha buscar a Emili, voy escuchando mi canción favorita (chandelier) sia, camino 2 cuadras y llego, a los dos minutos Emili sale con migo. - te gustaría ir al parque y comernos un helado? Le pregunte con ánimos
-me encantaría pero primero llegamos a casa, me cambio el uniforme y nos vamos, te parece? - perfecto, además tengo que buscar dinero. Le respondí tomándola de las manos para cruzar la calle.
- bien. Respondió esperando que abriera la puerta de la casa, entro la llave y la giro. -bajo en dos minutos. Dijo subiendo las escaleras. No le respondí y fui a tomar un baso de agua, abrí la nevera tome el jarrón y llene el vaso de agua, rápidamente me lo tome, luego subí a mi cuarto a buscar el dinero, subí las escaleras y entre, abrí la gaveta y lo tome, salí de la habitación y baje las escaleras, mire mi reloj y ya eran las 6:30 de la tarde, Emili aun no bajaba. - Emili has dicho dos minutos, impuntual. Dije sonriendo y viendo lo hermosa que estaba, parecía yo en miniaturas ya que llevaba puesto el mismo vestido que yo, pero mas pequeño claro, para su cumpleaños pasado compre un par para vestirnos iguales ese día, al parecer al verme con el se le ocurrió vestirnos iguales.
-ya nos vamos? Preguntó sonriente
-  claro. dije con la misma sonrisa, salimos de casa y a los diez minutos ya habíamos llegado. Me preguntaba donde estaría el idiota?
Nos sentamos, conversamos un rato compramos los helados y hay estábamos en una verdadera noche de chicas. - quieres otra ronda de helados? Le pregunte sonriendo -siii. Dijo al instante -pero esta vez tendrás que ir tu por ellos.  - ok, ok. Dijo y tomo el dinero de mi mano y se fue donde se encontraba el hombre con el carrito. Y otra vez sentía la misma mirada penetrante, miro a todas las esquinas del parque y no esta hay, me fijo en una casa azul cielo que hay en el fondo de una calle, la casa tiene un pequeño ventanal , me quedo observando y...
- ya vine con los helados. Me sorprendió Emili
-que mirabas? Pregunto curiosa
-no, Nada. Respondí nerviosa, era la primera vez que le hablaba mentiras a Emili, me sentía mal con ella.
-ok. Dijo sin mas, nos tomamos el helado mientras yo la empujaba para que se pudiese columpiar alto. -  ya,ya, leila estoy muy alta. Deje de columpiarla y volví a mirar hacia la ventana creí ver una silueta mirándome, pero se perdió al darse cuenta que miraba hacia esa misma dirección.
- ya nos vanos Emili. Dije tomándola de las manos
- te ha gustado la noche? Le pregunte
- me ha encantado leila. Respondió
- me alegra escuchar eso. Dije doblando la esquina antes de casa.
- hacia mucho que no salíamos juntas! Respondió de la nada
- si.
Dos minutos después ya estábamos en casa
- buenas noche Emili. Le dije dándole un beso de buenas noches.
-buenas noches leila. Respondió tapándose con la cobija, cerré la puerta detrás de mi y me dirigí a mi habitación, me senté en la cama, mire mi reloj y son las 9:40 de la noche, apago la lampara y me acuesto, a los cinco minutos se prende y en el fondo se ve una persona.
- oh, mi Dios. Dije acomodando mi vestido, y asustada sin saber quien es
- ya estas lista para irnos? Pregunto acercándose despacio, me quedo pensando y noto que es el idiota que me amenazó.
- no estoy lista y nunca lo estaré idiota. Dije con coraje
- si que lo estas. Dijo y sin mas me cargo en su hombro, veía el mundo de cabeza
- no puedes obligarme.
- oh si, claro que puedo. Escuche una risita con malicia, caminamos hasta la barandilla del balcón y hay me bajo de su hombro
- que pretendes? Le dije
- como que que pretendo, vamos a bajar.
-porque tenemos que bajar por aquí si existe una puerta? Pregunte rendida y enojada.
- no pienso bajar por aquí es arriesgado. Vuelvo ha decir
- ahora andas con migo y todo con migo es arriesgado. Lo miro indecisa pero el extiende su mano y yo la cojo rápidamente ya que no tengo de otra, si no  hago lo que dice me va ha obligar.
- pero porque es tan gentil con migo? No debería tratarme como un animal?, me ayudó a subir a la barandilla y luego subió el, bajo a uno de los tantos arboles, me dio la mano y con cuidado baje, luego de hay bajamos varios arboles mas y al fin llegamos  a  tierra firme, me encontraba tan asustada tenia miedo pero ya entendía como era que entraba tan fácilmente a mi habitación. Caminamos varias calles completamente oscuras y entramos a un callejón,
No había ni una pizca de luz, ni siquiera una luciérnaga que alumbrara, me dio la mano ya que no sabia hacia donde caminaba, llegamos a un enorme portón. Nos detuvimos y el chico soltó mi mano y apretó un botón rojo y dijo
- soy nick, abreme. Y al instante se abrió la enorme puerta.
- "Bienvenida a tu nuevo hogar" me susurro en un oído.
Todo en el interior era enorme, era todo de un color  negro y de metal, no avía otro color. Habían personas de todo tipo, llenas de tatuajes, cabellos de cientos de colores, llenas de aretes por todos los lados, algunos con pasamontañas y otros con ropas negra y demás, personas peleando, fumando, era horrible aquel lugar, no estaba acostumbrada a esa vida, y nunca jamás me acostumbraría.
- no quiero hacer esto nick. Le dije recordando su nombre. Me miro sorprendido y dijo - valla! ya te sabes mi nombre! Sorprendente.
Me tomó de la mano nuevamente y dijo:
-ven tengo que presentarte unos amigos. Caminamos hacia donde estaban un grupo de personas, entre ellas una pareja besándose muy apasionada mente, - es que acaso no les dan vergüenza? Pensé, no quería ir hasta ahí, tenia miedo, llegamos, el saludo a todos y dijo. - ella es leila, es nueva aquí sera mi ayudante. Todos me miraron pero puedo jurar que me miraban malicia, por lo que no dije nada.
-bien, puedes quedarte aquí tengo que hacer algo vuelvo en 15 minutos a mostrarte el lugar. Me trae y ahora me deja aquí sola, esto no puede ser mejor, veo como poco a poco se va alejando y se desaparece en un pasillo que se ve oscuro desde mi vista.
- hola preciosa. Alguien me sobresalta y no respondo debe ser un violador o no se que cosa.
- puedo hacerte compañía? Te vez muy solitaria aquí. Estaba dispuesta a mandarlo a la mierda cuando alguien me interrumpió.
- dejala en un paz mick.
Dice tirando de mi brazo para sacarme de ahí, fuimos a donde había una pequeña banca, hizo que me sentara y luego se sentó a mi lado. Era la chica que se estaba besándose con el chico
- hola soy alexandra, pero puedes decirme "ali", soy la novia de Esteban, ni lo mires es mio. Dijo con cara enojada, Desde que llegue a este lugar no he abierto mi boca y ya me están advirtiendo sobre que no mire a un chico.
- estaba jugando, leila?
Yo asenti, menuda forma de jugar.
- siempre bromeó, eres nueva aquí verdad?
Luego de varios segundos de pensar si responderle o no dije:
-si. Dije sin mas
- quieres conocer el lugar leila? Me pregunto muy amable
- no, esta bien nick dijo que le esperara aquí  para mostrarmelo, hago lo que me diga.
-nick es un chico hermoso, le has visto sin esa ropa toda negra y sin el pasamontañas? Es muy guapo, es tu novio? Preguntó curiosa.
-ihu, como crees, no le EH visto aun sin su traje, pero tampoco soy su novia, el es muy arrogante, me da asco tan solo pensarlo.
- jaja. Sorto una carcajada
- te aseguró que no dirías eso si le vieras sin el traje.
- no lo creo, Podría verle de todas formas y nunca causaría una chispa en mi... Jamás. Respondí irónica
- y tienes novio leila? Me preguntó
- hace mucho que no. Respondí
- pues aquí te conseguiremos uno, ven vamos a conocer el lugar, luego te reúnes con nick.
Dijo tirando de mi brazo
- esta bien, solo a conocer el lugar. le respondí ya que ya nos encontrábamos caminando, parecía contenta ya que tenía una hermosa sonrisa.
- esto aquí abajo es la sala, aquí es donde se hacen las reuniones, se charla, lo que quieras hacer.
Caminamos hasta una puerta que estaba al final de la sala, la  abrió y dijo:
-esta es la Cocina. Asenti y seguimos caminando, en una esquina de la sala se encontraba un enorme comedor con cientos de sillas.
- este comedor es para los que quieran ya que puedes comer donde se te da la gana, luego de esto subimos unas escaleras y dijo:
-de este lado, lado izquierdo están los centros, de aquel lado, lado derecho están las habitaciones, cada una con su baño. - eres huérfana? Me pregunto de la nada.
-no. Como crees? Amo a mis padres.
- pues supongo que no dormiras aquí no?
-aún no lose. Respondí
que les iba a decir a mis padres, con que cara los vería ahora?
Esto era demasiado para mi.
- muy bien, luego decidiras, ahora te mostrare cada uno de los centros. Caminamos hacia el lado izquierdo, y abrió la primera puerta de donde provenía un ruido muy molesto.
-centro de tatuajes y pircings,
Mas luego tendrás que venir. Al instante la mire confundida.
- querrás decir que tendré que marcar mi cuerpo? Aunque siempre me gustaron los tatuajes. Dije con una sonrisa pícara
- si. Dijo también con la misma sonrisa.
Seguimos caminando y abrió la segunda puerta.
- esto es inmenso. Se me escapo
- como no te imaginas, este es el centro de pelo, aquí podrás cambiarte de color tu cabello cuantas veces desees, al igual que tu maquillaje y uñas.
- pensaron en todo, me sorprenden.  dije sonriendo
- esta puerta es el centro de boxeo es inmenso, la siguiente puerta es el gym, veo que no te hace falta mucho ya que tienes un buen cuerpo, pero de todos modos tienes que venir para mantenerte en forma, además es saludable. - si. Le dije y asenti, ya entendía que tenia que hacer esto, que aunque me negara me obligarían, me sentía impotente.
- muy bien, ha este que sigue no podemos pasar sin autorizaciones, aquí es donde guardan las herramientas de los atracos, las armas, trajes negros y pasamontañas, todo lo que puedas necesitar para defenderte y tomar lo que no es tuyo. Dijo con malicia
-porque hacen eso, no se dan cuenta que es malo, que las cosas ajenas, son  ajenas?
Dije cabizbaja.
- si lo sabemos leila, pero nos gusta y también tenemos que hacerlo para obtener todo esto, todo lo que tenemos es de esa forma que lo hemos conseguido, aquí leila. Me dijo haciendo que mirara alrededor,
- llegaron personas de todo tipos, huérfanos, mendigos, vagabundos,prostitutas, de todo tipo leila y miramos tenemos un hogar, agua, comida, y lo mas importarte una familia. Y con esto me convenció
- esta bien. tienes razón, Ahora estoy con ustedes no?
-si. Dijo abriendo la ultima puerta.
-  esta puerta es la que mas me gusta, biblioteca. te parecerá raro pero a muchos de nosotros nos gusta leer, y por nuestra apariencia no nos permiten entrar a las biblioteca ya que piensan que vamos a robar o algo hací, nos tienen miedo, es por eso que hemos hecho la nuestra.
Que sorprendente como es que personas como ellos le gusta leer, al parecer algunos en el fondo son buenos! Pensé
- entiendo, a mi también me encanta leer novelas u otros.
- perfecto, al parecer nos llevaremos muy bien.
Respondió ella con una sonrisa. No sé porque pero esta chica me inspira confianza, me agradaba.
Yo solo asenti, aun no muy convencida
-muy bien, creo que hoy no dormidas aquí o si? Me pregunto.
-claro que no, mañana es viernes tengo que ir al instituto.
- bien, entonces vamos con nick.
Empezamos a caminar devuelta a las escaleras, las bajamos y hay nos encontramos a nick.
- te he buscado por todos lados leila, llegas hoy y al momento momento te desapareces! Donde te metiste? Iba a mostraré el lugar y te has desaparecido.
- yo mm. Dije nerviosa, estaba enojado.
- ya le he mostrado el lugar nick, le has dejado sola en su primer día. Dijo alexandra,  por segunda vez me salve.
- esta bien alexandra, te me adelantaste.
-jaja, siempre estoy un paso adelante.
-es por eso que la amo. Dijo un chico apuesto dándole un beso fugaz en los labios a alexandra.
- y yo a ti, cielo. Respondió ella, nick y yo solo le mirábamos.
- hola, soy Esteban . leila cierto?
-si. Respondo sin mas,
la mayoría de chicos aquí llevan pasamontañas, como nick siempre lo lleva puesto, pero aun hací no me da ni la mas mínima curiosidad de saber lo que lleva debajo de ese horrendo traje negro.
-tengo que llevarte a tu casa leila, tus padres ya deben de estar en casa.
- si,  vamos.
-bye alexandra, fue un gusto.
- el gusto es mio, nos vemos mañana  cierto? No le respondí sino que salimos de hay a pesar de las miradas asesinas que nos lanzaron y llegamos a casa.
-me imagino que subiremos por el patio trasero verdad? Pregunte divertida
-claro, Eso es un si.
Luego de cinco minutos ya estábamos en mi habitación, al parecer mis padres no habían llegado aun.
- tenemos que hablar. Dice preocupando me que sea una de sus obligaciones.
- piensas quedarte aquí y que te venga a buscar cada día en la noche? O te vienes a vivir con nosotros, con nosotros, tendrás comida, tu habitación, todo.
- no. Digo sin mas, - ni poca paso a vivir con ustedes, tengo todo lo que necesito,no pienso irme contigo, te recuerdo que me estas obligando a ser de los de ustedes, no lo elegí yo nick, no quiero esto. Dije con una lágrima.
- hací es, te estoy obligando y no puedes hacer nada o sino sabes lo que te sucederá cierto?
- lo se muy bien. Dije cabizbaja
- nos vemos mañana. y sin mas se tiro por el balcón, era todo un experto.

tu y yo en la mafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora